Marcelo se desdobla
El lateral dice que se siente m¨¢s c¨®modo de interior, pero los t¨¦cnicos s¨®lo le consideran una soluci¨®n puntual para esa posici¨®n
"Marcelo es lateral". Palabras de Manuel Pellegrini. El t¨¦cnico del Madrid, siempre que puede y siempre que es preguntado por ello, defiende la posici¨®n natural del brasile?o. "Siempre me he sentido lateral. Pero, desde que Juande me colocara de interior izquierdo y sobre todo este a?o, me siento m¨¢s c¨®modo en esa posici¨®n. No me noto tan extra?o como al principio". Palabras de Marcelo, que hoy, en el Camp Nou, volver¨¢ a jugar "fuera de sitio". Igual que lo ha hecho en cuatro de los 19 partidos disputados hasta ahora entre Liga, Copa y Champions. Fuera de sitio es lo que consideran, al menos, los t¨¦cnicos: "Ya es bastante anti-natural tener a un diestro en el lateral derecho [Arbeloa] como para tener tambi¨¦n a un lateral que juegue de interior. Es que ya hay dos jugando en posiciones que no son las suyas".
De ah¨ª, que Pellegrini siga defendiendo la idea de que Marcelo es lateral. ?sa es su posici¨®n natural. Si a veces le coloca de interior, es una soluci¨®n m¨¢s bien puntual. Un recurso con fecha de caducidad. El brasile?o ocup¨® el lateral izquierdo hasta el duelo contra el Getafe. Arbeloa le quit¨® la banda y ¨¦l actu¨® de interior. Al chileno la jugada le sali¨® redonda. El Madrid ven¨ªa de tres resultados negativos -empate en Gij¨®n (0-0), derrota en casa contra el Milan (2-3) y humillaci¨®n en Alcorc¨®n (4-0)- y para calmar el run-run que se empezaba a o¨ªr con insistencia, y no s¨®lo en el Bernabe¨², necesitaba con urgencia un reactivo. Acert¨® con el once, derrot¨® al Getafe (2-0) y a partir de ese momento, y a petici¨®n de la direcci¨®n deportiva, desorientada por tantos cambios de alineaci¨®n, Pellegrini mantuvo el equipo. As¨ª es como Marcelo repiti¨® de interior en otros tres partidos: contra el Milan, el Atl¨¦tico y el Z¨²rich.
Despu¨¦s del Camp Nou, dicen en el club, el brasile?o regresar¨¢ a su posici¨®n natural a pesar de que ¨¦l dice sentirse c¨®modo de interior. Juande fue quien se invent¨® esa posici¨®n para Marcelo -eso s¨ª, antes lo puso a r¨¦gimen para que bajara seis kilos de sobrepeso-. Primero para aprovechar mejor su velocidad y segundo para que sus carencias defensivas no hicieran tanto da?o al equipo, que hab¨ªa sufrido, bajo las ¨®rdenes de Schuster, una sangr¨ªa de goles: 26 en 14 jornadas.
El t¨¦cnico alem¨¢n tambi¨¦n se quejaba de la poca disciplina t¨¢ctica de Marcelo en las tareas defensivas. Pero, en lugar de reinventar al jugador y colocarle en otra posici¨®n, instaba a su segundo a hacer un trabajo intensivo a base de v¨ªdeos. Manolo Ruiz cog¨ªa a Marcelo y le ense?aba todos las acciones en las que no s¨®lo comet¨ªa errores de posici¨®n y de marcaje, sino que los repet¨ªa -v¨¦ase, por ejemplo, la visita al Betis en febrero de 2008 y los dos fallos id¨¦nticos del brasile?o en los goles de Edu y Mark Gonz¨¢lez.
Ya no es aquel Marcelo as¨ª de despistado que lleg¨® en diciembre de 2006, con apenas 18 a?os, como remedio de urgencia para Fabio Capello, quien buscaba un recambio natural de Roberto Carlos. Jug¨® seis partidos y, a finales de aquella temporada y con la marcha del t¨¦cnico italiano, el Madrid intent¨® cederlo al Valladolid para que el chico se fogueara. Marcelo dijo que no, que estaba convencido de que iba a poder aprovechar sus oportunidades.
Su cabezoner¨ªa es lo que se lo ha permitido -de seis las presencias subieron a 24 la temporada siguiente y a 27 la pasada-. De pulir sus extravagancias en el campo, en cambio, se encargan Pellegrini y Pepe, su consejero oficial en la plantilla.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.