Zelaya: "Obama ha arreglado su casa pero ha desarreglado la nuestra"

En la capital de Honduras todo discurr¨ªa ayer con una sospechosa sensaci¨®n de normalidad. Tres eurodiputados espa?oles del Grupo Popular llegaban el viernes desde Bruselas en calidad de observadores para las elecciones generales. El Tribunal Supremo Electoral anunciaba en los canales hondure?os que casi 300 observadores internacionales han acudido para verificar la transparencia de los comicios. Los peri¨®dicos reproduc¨ªan las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Barack Obama -con las elecciones "se podr¨¢ comenzar de cero"- y del de Costa Rica, ?scar Arias -"Si las elecciones del pr¨®ximo domingo son transparentes, si no hay acusaciones de fraude, si los observadores que est¨¢n en el hermano pa¨ªs hondure?o encuentran que no hubo nada incorrecto, yo voy a pedirles a los pa¨ªses iberoamericanos que debemos reconocer al futuro Gobierno hondure?o"-. Los taxistas, los empleados de los hoteles de cinco estrellas donde se alojan la mayor parte de los observadores y la prensa internacional comentaban que el ambiente que se respira es pac¨ªfico y que Honduras lograr¨¢ hoy olvidar las convulsiones de los ¨²ltimos cinco meses. Pero...

Los zelayistas han pedido boicotear los comicios, pero act¨²an divididos

A diez minutos en taxi del palacio presidencial, en la Embajada de Brasil, frente a la de Estados Unidos, rodeado por decenas de militares, contin¨²a encerrado el depuesto presidente Manuel Zelaya. Y ya van 68 d¨ªas sin poder salir. Parece que cinco meses despu¨¦s de aquella noche del pasado 28 de junio en que los militares entraron en su casa y lo deportaron en pijama a punta de fusil, Zelaya a¨²n siguiera en pijama y con los ca?ones apunt¨¢ndole. "Arriesgu¨¦ mi vida por volver a mi pa¨ªs y la sigo arriesgando", declar¨® ayer a EL PA?S en conversaci¨®n telef¨®nica. "Tienen que valorar el hecho de que yo haya vuelto a mi pa¨ªs, porque soy inocente, no tengo causa en contra ni cola que me pisen. Resistir¨¦ aqu¨ª hasta que se vayan los golpistas".

- ?Le ha decepcionado Obama?

- Yo me limito a narrar los hechos. Y los hechos son que Estados Unidos ha dividido a Am¨¦rica Latina y nos ha traicionado. Ha arreglado su casa, pero ha desarreglado la nuestra. Ha incumplido los acuerdos que firmamos en su d¨ªa, ha negociado a nuestras espaldas. La diferencia entre Estados Unidos y Espa?a es que en Espa?a se sabe lo que es una dictadura. Como en Estados Unidos no la han sufrido nunca, por eso la apoyan.

Las visitas no est¨¢n autorizadas. Junto a Zelaya pernoctan en la embajada su esposa, dos asesores y seis funcionarios brasile?os. "Cuando entr¨¦, llegaron conmigo 300 personas, huyendo tambi¨¦n de la represi¨®n. Poco a poco fueron arreglando su situaci¨®n jur¨ªdica y salieron de aqu¨ª. Pero el pueblo sigue apoy¨¢ndome. He llamado a la abstenci¨®n. He pedido que la gente acuda a las plazas de forma pac¨ªfica y ense?e sus dedos limpios [sin la mancha de tinta indeleble que indica que se ha votado] para que se vea que est¨¢n con el Gobierno leg¨ªtimo y no con los militares".

Los zelayistas, agrupados en el Frente Nacional de Resistencia, han pedido boicotear estas elecciones en las que 4,6 millones de hondure?os han de elegir entre cinco candidatos para presidente como si nada hubiese ocurrido desde aquel 28 de junio. En las elecciones de 2005 se registr¨® una abstenci¨®n del 44%. Unos miembros del Frente quer¨ªan que la gente se quedase en sus casas y otros prefer¨ªan seguir la consigna de Zelaya. Finalmente se decidi¨® que en cada barrio cada uno actuara seg¨²n convenga.

La convulsi¨®n que sufre el pa¨ªs se remonta a la consulta que trat¨® de convocar Zelaya en junio para preguntar a los hondure?os si estaban de acuerdo en redactar una nueva Constituci¨®n en la que se abriese la opci¨®n a la reelecci¨®n presidencial. La consulta fue calificada de ilegal por la Corte Suprema de Justicia y el Tribunal Superior Electoral. Pero Zelaya mantuvo la convocatoria. La oposici¨®n le acus¨® de buscar perpetuarse en el poder. Pero lo deportaron.

La comunidad internacional apoy¨® a Zelaya de forma un¨¢nime y reprob¨® al presidente de facto Roberto Micheletti. Pero ¨¦ste se mantuvo en el poder. Ahora, la comunidad internacional est¨¢ dividida. A un lado, Estados Unidos, Costa Rica y Panam¨¢. Al otro, buena parte de la comunidad internacional, encabezada por el presidente brasile?o, Lula da Silva y el venezolano, Hugo Ch¨¢vez, bestia negra de la derecha hondure?a. En la Uni¨®n Europea, s¨®lo el Grupo Popular ha mandado representantes. "Hemos venido porque le pedimos consejo a ?scar Arias (presidente de Costa Rica) y ¨¦l nos convenci¨® de que la mejor opci¨®n para el pa¨ªs es que se celebrasen unas elecciones transparentes", indic¨® el eurodiputado espa?ol Carlos Iturg¨¢iz.

Entre los cinco candidatos en discordia, los dos que tienen m¨¢s opciones de ganar son el l¨ªder del Partido Nacional, Porfirio Lobo, alias Pepe, y Elvin Santos, del Partido Liberal. "Cualquier alcalde, diputado o presidente que salga elegido ma?ana ser¨¢ producto de un fraude", augura Zelaya.