Los toros ya est¨¢n en decadencia
El voto de ma?ana en Catalu?a sobre las corridas refleja el rechazo o la indiferencia creciente de la sociedad - La propia afici¨®n lamenta el declive y algunos lo ven como el principio del fin
Con unas cifras en claro derrumbe y una opini¨®n p¨²blica cada vez m¨¢s desinteresada, la votaci¨®n que ma?ana se producir¨¢ en el Parlamento catal¨¢n sobre la prohibici¨®n de los toros puede convertirse en un hito de una decadencia que ya es real. 2.000 toros sin salida en las fincas, la bravura cada vez m¨¢s recortada, la ca¨ªda de corridas y la desafecci¨®n creciente son el contexto de un voto que, si gana, puede extenderse en Espa?a.
Catalu?a abre esta semana el mel¨®n taurino. El Parlamento vota ma?ana la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que busca prohibir las corridas de toros y llega avalada por 180.000 firmas (bastar¨ªan 50.000) recopiladas por la plataforma ciudadana Prou! que prefiere hablar de "abolici¨®n de la tauromaquia". El portavoz, Leonardo Anselmi, avisa de que, si prospera en Catalu?a, lo intentar¨¢n en el resto de comunidades aut¨®nomas.
Pol¨ªticos del sur de Francia han pedido que siga la fiesta, por tradici¨®n
Los taurinos temen que, despu¨¦s de las corridas, caigan los encierros
"Tengo fotos de Llu¨ªs Companys en la Maestranza", dice Eduardo Miura
Victorino Mart¨ªn asegura que el gran ataque al festejo es el silencio medi¨¢tico
La votaci¨®n en el Parlamento catal¨¢n se presenta ajustad¨ªsima. Esquerra Republicana e Iniciativa per Catalu?a votar¨¢n a favor de la prohibici¨®n. Defender¨¢n argumentos animalistas y descartan debatir sobre la catalanidad o espa?olidad de la fiesta, una discusi¨®n en la que ya nadie entra, habida cuenta de que Catalu?a cuenta con algunas de las plazas m¨¢s antiguas de Espa?a y de que Barcelona es la ¨²nica ciudad del pa¨ªs que ha tenido tres cosos. El PP y Ciutadans votar¨¢n en contra. Pedir¨¢n respeto a la tradici¨®n.
La decisi¨®n est¨¢ en manos de los dos grandes grupos: CiU y PSC, cuyos diputados no tienen una postura com¨²n y su voto ser¨¢ libre y secreto. Las calculadoras echan humo en los pasillos del Parlament: el resultado pueden decidirlo unos pocos votos.
Mientras el estamento taurino insiste en el argumento de la tradici¨®n mediterr¨¢nea, los festejos con toros bravos se celebran en las Islas Azores, Colombia, Per¨², M¨¦xico y el sur de EE UU. Las plazas africanasest¨¢n en estado de abandono. En Am¨¦rica Latina se suele relacionar la fiesta de los toros con el imperialismo espa?ol y la religi¨®n cat¨®lica. En Venezuela ya se recogen firmas en contra del festejo para enviarlas al presidente Ch¨¢vez.
Lo que no consiga la mano pol¨ªtica puede hacerlo, sin embargo, el dinero: en los ¨²ltimos dos a?os, la depreciaci¨®n del d¨®lar ha devaluado la temporada americana para las figuras del toreo. Sin esos carteles, las ferias carecen de p¨²blico. Cada vez son m¨¢s cortas o directamente se suspenden.
En 2006, la empresa Gallup efectu¨® una encuesta entre 1.016 personas que trataba de medir la evoluci¨®n de la afici¨®n a los toros en Espa?a. Un 81% de los menores de 24 a?os mostraba desinter¨¦s por estos festejos. La misma cifra se daba entre los de 24 a 34 a?os. De 35 a 44 a?os apenas baja un poco (78%). Y lo m¨¢s sorprendente es que entre los mayores de 65 a?os s¨®lo el 41% se declara interesado en los toros. Desde finales de los ochenta, el desinter¨¦s ha aumentado.
En 2009, seg¨²n datos del Ministerio de Interior, se han celebrado en Espa?a 891 festejos mayores, entre corridas de toros, novilladas (con picadores) y rejones. 354 menos que en 2008. En el campo se calcula un excedente de m¨¢s de 2.000 toros con fecha de caducidad. El reglamento taurino obliga a lidiar reses de cuatro a seis a?os. Este 2010, adem¨¢s de los toros con cuatro a?os reci¨¦n cumplidos se encontrar¨¢n con estos "cinque?os" de dif¨ªcil salida en el mercado. En Espa?a las ferias son cada vez m¨¢s cortas, y si se tiene que prescindir de un festejo suele ser de la novillada de promoci¨®n, que sirve para que den sus primeros pasos novilleros y aprendices.
Isabel Carpio, secretaria t¨¦cnica de la Uni¨®n de Criadores de Toros de Lidia y veterinaria, no muestra tanta preocupaci¨®n: "En 2006 hubo sequ¨ªa y las vacas no fueron tan f¨¦rtiles. Como la camada es corta, se compensar¨¢ el excendente de 2009".
En 1991, Canarias fue la primera comunidad aut¨®noma espa?ola en prohibir los toros. Ya hac¨ªa una d¨¦cada que la comunidad no viv¨ªa una corrida y el asunto no necesit¨® ni debate. Pero lo que persegu¨ªa aquella ley era prohibir las peleas de gallos. Acabaron con los toros, con la lucha de perros y con el tiro de pich¨®n. Las peleas de gallos, muy populares en algunas zonas rurales, ah¨ª siguen. A Miguel Cabrera P¨¦rez-Camacho, hoy del PP pero entonces en las filas de Coalici¨®n Canaria, no le apoy¨® ni su propio grupo y dimiti¨® en el mismo parlamento.
La votaci¨®n de ma?ana en Catalu?a y la indecisi¨®n de diputados socialistas y convergentes ha causado una tremenda guerra de lobbies. La Asociaci¨®n en Defensa de los Derechos de los Animales present¨® este lunes 127.500 firmas m¨¢s. Sumadas a las ya recogidas por la plataforma ciudadana y a otras iniciativas, la c¨¢mara lleva recibidas m¨¢s de medio mill¨®n a favor y en contra. Las reuniones con diputados de todo signo han sido constantes. Del lado taurino, la Plataforma en Defensa de la Fiesta y la Federaci¨®n de Entidades taurinas present¨® este mi¨¦rcoles un manifiesto titulado Por la libertad, en el que ilustres taurinos y antitaurinos rechazan la prohibici¨®n. Entre los firmantes se encuentran el cantante de Loquillo, Jos¨¦ Mar¨ªa Sanz, las periodistas Concha Garc¨ªa Campoy y Mercedes Mil¨¢ o el humorista Jordi Evol¨¦ (El follonero).
Los argumentos de este manifiesto, apunta el portavoz de la Plataforma, Luis Corrales, son que Catalu?a, en su tradici¨®n de respeto a las libertades, no puede permitirse prohibir las corridas; y que si ¨¦stas tienen que morir, que lo hagan solas, por falta de afici¨®n, pero no por imperativo legal.
Los partidarios de los festejos cuentan tambi¨¦n con el apoyo de los diputados de la zona de Tarragona, donde los correbous, encierros populares, son parte esencial de las fiestas y las pe?as temen que se comience prohibiendo las corridas para ir despu¨¦s a por los correbous.
Adem¨¢s, un grupo de 133 pol¨ªticos franceses, sobre todo del sur, donde tambi¨¦n se celebran corridas, han escrito esta semana a todos los diputados catalanes pidi¨¦ndoles que rechacen la iniciativa en nombre de la libertad y de la tradici¨®n.
Eduardo Miura, titular de la temida ganader¨ªa que lleva su apellido, opina desde su posici¨®n de presidente de los ganaderos: "Somos el segundo espect¨¢culo de masas de Espa?a, pero nos tratan como apestados. Hemos pedido audiencia al presidente Zapatero, pero no nos contesta, ni nos recibe". En su opini¨®n, la prohibici¨®n de los toros en Barcelona no tendr¨ªa vuelta atr¨¢s: "Se busca una vida m¨¢s amable, m¨¢s c¨®moda. Se teme la muerte y no se quiere ver que es parte de la vida". Mantiene que Catalu?a crea una identidad falsa con un nacionalismo excluyente. "Se reinventan. Tengo fotograf¨ªas de principios del siglo XX de Llu¨ªs Companys [presidente de la Generalitat de Catalu?a durante la Guerra Civil] en La Maestranza", argumenta, "pero es una cuesti¨®n de libertades".
Victorino Mart¨ªn Garc¨ªa, el ganadero m¨¢s cotizado de los ¨²ltimos 50 a?os, une los m¨¦todos m¨¢s modernos de crianza con la selecci¨®n de unas reses ¨²nicas por su bravura. Se siente discriminado: "Los medios son los primeros en darnos la espalda. No es posible que el segundo espect¨¢culo de masas no se d¨¦ en abierto en televisi¨®n, ni tenga hueco en los informativos. El gran ataque contra la tauromaquia es el silencio medi¨¢tico".
La caba?a brava, base del espect¨¢culo, tampoco goza de una salud destacable. Las peticiones de los toreros han ido convirtiendo el toro bravo en un animal cada vez m¨¢s d¨®cil y con menos sensaci¨®n de peligro. El espect¨¢culo ha ganado en emoci¨®n art¨ªstica a cambio de adrenalina. Son pocos los ganaderos que lidian sus toros sin problemas. Prima el encaste Domecq, m¨¢s noble en la muleta, con cierta docilidad. Esta exigencia por parte de los matadores ha llevado la diversidad de encastes al borde del precipicio. Juan S¨¢nchez Fabr¨¦s ha anunciado que tendr¨¢ que enviar al matadero su vacada, exponente ¨²nica de la procedencia "Coquilla".
M¨¢s grave es la situaci¨®n de Atanasio Fern¨¢ndez, una ganader¨ªa obligatoria en las ferias durante los setenta y ochenta. El pasado mes las vacas de este hierro fueron al matadero: adi¨®s a la madre de muchas otras ganader¨ªas de procedencia Conde de la Corte.
Aunque la Uni¨®n de Criadores de Toros de Lidia (UCTL) no hace declaraciones al respecto, la crisis inmobiliaria ha puesto el cartel de se vende en much¨ªsimas fincas. Los constructores acostumbraban a dedicar sus ganancias a la compra de ganader¨ªas.
La queja generalizada en el mundo de los toros contra las administraci¨®n es el "abusivo" impuesto del 16% de IVA en las entradas para este espect¨¢culo. Esta petici¨®n formal de rebaja del IVA choca con un negocio que no siempre es muy transparente. Se niegan a firmar contratos o formalizar relaciones. Los toreros, casi siempre liquidan los emolumentos de la temporada con el empresario que contrat¨® sus servicios con un apret¨®n de manos o un pacto en el que, en el mejor de los casos, se escribe "la cantidad convenida".
Domingo Domingu¨ªn, personaje bohemio, empresario taurino y apoderado de toreros, vaticin¨® el negro futuro de una fiesta que no supo quitarse la caspa y el tinte franquista que acompa?aban a f¨²tbol y toros, los dos fen¨®menos de masas del r¨¦gimen: "Los toros son un espect¨¢culo brillante en manos de mediocres. El f¨²tbol, lo contrario".
Al estamento taurino le falta una voz, un argumento, una estrategia a seguir. Mezclan defensa con provocaci¨®n. En la pasada Feria de la Merc¨¨, Jos¨¦ Tom¨¢s tore¨® a favor de la fiesta en Catalu?a. Su triunfo fue contundente. Salvador Boix, su apoderado, lo celebr¨® con unas declaraciones envenenadas: "A ver si despu¨¦s de esto se atreven a prohibirlo".
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