El dolor como quinto signo vital

La temperatura corporal, el pulso, la presi¨®n sangu¨ªnea, la frecuencia respiratoria y el dolor son los primeros cinco signos vitales que deben ser considerados por los m¨¦dicos en sus pacientes. A pesar de que nueve millones de espa?oles sufren dolor cr¨®nico, s¨®lo el 10% de los facultativos de atenci¨®n primaria emplean escalas de medici¨®n del dolor para su mejor abordaje terap¨¦utico. Un problema que provoca que hasta en la mitad de los casos ese dolor pueda llegar a ser un s¨ªntoma mal tratado.

Sin embargo, a pesar de la dificultad de medir el dolor, existen herramientas para hacerlo. Una de ellas es la llamada escala visual anal¨®gica (EVA), creada por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). Es una herramienta de sencillo manejo que eval¨²a el dolor del 1 al 10 para, as¨ª, cuantificar la intensidad y el tipo de dolor de cada paciente. Una escala que mejorar¨ªa la atenci¨®n de muchos enfermos. Y es que el 83% de los espa?oles que padecen dolor cr¨®nico son atendidos en el ¨¢mbito de la atenci¨®n primaria y no en unidades especializadas de dolor. All¨ª s¨®lo el 10% de los m¨¦dicos usa herramientas como la EVA.

Nueve millones de personas sufren este problema de forma cr¨®nica

La Plataforma SinDOLOR (constituida en 2007 por las fundaciones para la Investigaci¨®n en Salud y la Gr¨¹nenthal) ha desarrollado estos meses la I Campa?a de Sensibilizaci¨®n de la Importancia del Dolor, para concienciar a los profesionales sanitarios y a la sociedad de que hoy en d¨ªa, con los avances en medicina, el dolor puede y debe controlarse. De que merece la pena intentar que no se sufra por dolor, sea agudo o cr¨®nico. Una iniciativa que, con el lema cada dolor tiene su historia. EVAl¨²alo, ha contado con el apoyo del Ministerio de Sanidad, las consejer¨ªas de Salud y numerosas sociedades cient¨ªficas.

Tener en cuenta el dolor como quinto signo vital "facilita en la mayor¨ªa de los casos el diagn¨®stico etiol¨®gico o causal del proceso que est¨¢ desencadenando el cuadro doloroso en el enfermo", apunta Guillermo Castillo, director de la Fundaci¨®n Gr¨¹nenthal. La sensibilidad de los m¨¦dicos hacia los pacientes en torno al sufrimiento a pelo o poder controlar el dolor con los medios disponibles ha experimentado un giro copernicano en los ¨²ltimos a?os. De hecho, han sido prolijas, complejas y ricas las investigaciones en analg¨¦sicos y f¨¢rmacos que, por distintas v¨ªas, act¨²an para calmar el dolor.

En el ¨²ltimo Congreso Europeo del Dolor, celebrado en Lisboa, se present¨® tapentadol para el dolor agudo y cr¨®nico. El primer analg¨¦sico que aparece en 25 a?os de una nueva generaci¨®n que marcar¨¢ un antes y un despu¨¦s en el control de ese problema. Se trata de un opioide, o derivado de la morfina, que act¨²a sobre el sistema nervioso central, con una gran potencia analg¨¦sica y un buen perfil de tolerancia. Los expertos aseguraron en Lisboa que se inicia una nueva era en el manejo dif¨ªcil del dolor agudo y cr¨®nico.

El dolor es el s¨ªntoma m¨¢s universal de cuantos puede padecer el ser humano. La OMS advierte de que, cuando se cronifica, puede convertirse en una enfermedad en s¨ª misma y que, adem¨¢s de una gran carga de sufrimiento, es responsable, en t¨¦rminos econ¨®micos, de unos costes elevad¨ªsimos por la imposibilidad de trabajar de quienes lo sufren.