La noche m¨¢s demod¨¦ del a?o

Para olvidar. La ¨²ltima noche de 2009 y las primeras galas del nuevo a?o no pasar¨¢n a la historia por su vanguardismo. Quiz¨¢ por aquello del cambio de d¨¦cada, las cadenas pod¨ªan haberse estirado un poco. S¨®lo Bel¨¦n Esteban, con su cambio de look y sus perlas dial¨¦cticas, anim¨® las uvas.

TVE. Ni un euro en galas

El insistente y molesto amor al autohomenaje y la obligada convicci¨®n de TVE sobre la ancestral belleza de su ombligo, se encarga de recordarnos que es la televisi¨®n preferida de los espa?oles, que sus logros han sido infinitos y su ¨²nico compromiso es con la calidad. Tambi¨¦n en que nada va fallar en el 2010. La filantrop¨ªa de Sanitas nos asegura que en todo momento est¨¢ a nuestro lado. Esto ocurre antes de la trascendente medianoche y los maestros de ceremonias son Anne Igartiburu, se?ora rubia que hace muy bien su trabajo (su coqueter¨ªa le puede provocar un resfriado, ya que en noche tan heladora se empe?a en quitarse la chaqueta) y por Manuel Bandera, un mueble con sonrisa impostada que env¨ªa saludos y abrazos a su malague?a familia. No hay percances en las campanadas. Despu¨¦s festejan con ¨¦nfasis acad¨¦mico la presidencia espa?ola en la UE. Tambi¨¦n hay certidumbres osadas, como la de que la publicidad se va de esta televisi¨®n, pero siempre quedar¨¢ en nuestro coraz¨®n. Por si acaso, a la 1.00 introducen encubiertamente un publireportaje sobre las maravillas de Canarias en Navidad. El resto de la noche es un recordatorio sentimental de tal como ¨¦ramos en las Nocheviejas de TVE. Te sonroja la mayor parte del tiempo. Pero te reconcilias con el tiempo pasado al ver a Tip y Coll, Martes y Trece, Gila, Tony Leblanc, Serrat, Paco de Luc¨ªa, Sabina, a los benditos exorcistas de la mediocridad.

CARLOS BOYERO

ANTENA 3. 24 uvas

Gracias a Antena 3 me com¨ª veinticuatro uvas, las doce peninsulares y las doce canarias. Las uvas peninsulares las dieron desde Santiago de Compostela. Empieza el Xacobeo, dec¨ªan a¨²n con las uvas en la boca Antonio Garrido y Patricia Montero, as¨ª que fuera con la crisis. Y en la versi¨®n canaria de la cadena, una hora m¨¢s tarde, nos dieron las uvas envueltas en la historia de la ciudad de La Laguna, patrimonio de la Humanidad. Esta ¨²ltima ingesta de uvas dio la oportunidad de ver a una actriz, Viviana Monje, que parec¨ªa puesta ah¨ª para quitarle a la Nochevieja el aire de coros y danzas en que se convierte esta despedida del a?o. Se agradece el respiro; l¨¢stima que no lo vieran los peninsulares. En Antena 3 se pasaron la noche cantando y bailando. Antes de las uvas cantaron como pudieron; ah¨ª hab¨ªa humoristas (Pedro Reyes, que es una garant¨ªa) o cantantes (como Falete). Y despu¨¦s, Bailando al 2010. Como en Cuatro, la otra cadena que me toc¨® mirar, en la cadena del coraz¨®n domina el baile para atletas. Y para David Bisbal. ?ltimamente siempre que pongo una cadena sale Bisbal con una de sus 23 (o 23.000) canciones, y con su forma f¨ªsica formidable, se?alando al cielo como si de all¨ª le viniera la energ¨ªa. Entre Bisbal y Bisbal vi a Michael Jackson y a las falsas aut¨¦nticas Mamma Mia. Tanta alucinaci¨®n debi¨® ser producto de las veinticuatro uvas.

JUAN CRUZ

CUATRO. La Roja

Sempr¨²n, el ¨²ltimo espa?ol que supo qui¨¦n era Di St¨¦fano, comentaba hace unos d¨ªas lo que sorprende que en esta Espa?a de tanta (o tan poca) memoria se diga como si nada La Roja para referirse a la selecci¨®n de f¨²tbol. Decimos ahora La Roja incluso en fin de a?o. Los Manolos, Lama y Carre?o, se fueron a Ciudad del Cabo a proclamar ese nombre como una apelaci¨®n al futuro cuando sonaban en la Espa?a peninsular las campanadas de medianoche. Antes y despu¨¦s de ese atragante (a Lama no se le escapan los corners, pero se le atragant¨® una uva, ¨¦l lo dijo), la cadena roja (ese color es su emblema) eligi¨® un programa que le da car¨¢cter para hacer que la gente se moviera: Paula V¨¢zquez, V¨ªctor Ullate y Fama le dieron tono de concurso de atletismo a la despedida, porque ese es un baile de atletas. Despu¨¦s Cuatro busc¨® su repertorio de surferos y se adentr¨® en 2010 con una antolog¨ªa de golpes conseguidos gracias a un zapping que engancha como los cacahuetes. De la noche me quedo con aquel grito de Los Manolos: "?Vamos a ser campeones!" Los r¨®tulos de la bienvenida al 2010 ("Feliz develop¨¦, pero sobre todo Feliz 2010") le dieron a la cadena roja el aire de que se adentra en el futuro con su color subido. Tendr¨¢ el Mundial. Los Manolos lo dijeron a su modo: "?Ganaremos!". Su optimismo sonaba a corte de mangas a las crisis del 2009.

J.C.

TELECINCO. Y se arm¨® el Bel¨¦n

Jorge Javier V¨¢zquez y Bel¨¦n Esteban fueron los protagonistas absolutos de la Nochevieja de Telecinco, una Nochevieja que ya empezaron con el S¨¢lvame de la tarde. Pero el s¨ªntoma m¨¢s grave de lo absorbidos que estaban en la emisora con el acontecimiento fue que la primera noticia del telediario de la noche fue nada menos que la pareja se estaba preparando para dar las campanadas. Y lleg¨® la hora. Bel¨¦n Esteban se veng¨® de los modistos que no quisieron vestir a "la princesa del pueblo" el d¨ªa de su boda dando el nombre del autor de su atuendo, ya fallecido y que, por lo tanto, no pod¨ªa quejarse (V¨¢zquez dixit). Hab¨ªa prometido que hablar¨ªa de su padre y se emocionar¨ªa e hizo ambas cosas, discretamente. Tambi¨¦n cit¨®, ?desafiante?, a su hija. Unas campanadas patrocinadas por una compa?¨ªa que sobreimpresion¨® su marca. Lo de saber qu¨¦ anuncio es el ¨²ltimo o el primero ya ha pasado a la historia. Ahora se solapa con las campanadas y ayuda a contabilizarlas. Un nuevo ejercicio de publicidad embebida. V¨¢quez y Esteban no se limitaron a narrar el acontecimiento. Deb¨ªan protagonizarlo. Y desde su balc¨®n saludaban a la gente de la plaza y a la colega de otra televisi¨®n.

TOM?S DELCL?S

LA SEXTA. Reloj estropeado

Las campanadas tuvieron el mismo patrocinador y no conectaron con ning¨²n lugar para celebrar en directo la fiesta. Se montaron una broma con un supuesto relojero ruso cuya m¨¢quina destroz¨® Berto y, por tanto, tuvieron que dar las campanadas sin reloj y con presentadores de la cadena haciendo un brindis virtual desde pantallas del escenario. Eran menos famosos que la pareja de Telecinco, pero hab¨ªa m¨¢s. Hubo una menci¨®n a la rival, Bel¨¦n Esteban. Berto, que iba con su nariz de siempre, pidi¨® a su audiencia que no les dejaran en el momento de las campanadas. Total, dijo, la nueva nariz de la Esteban ya hab¨ªa salido en Lecturas. El ¨¦xito de Bel¨¦n Esteban aturde. Antes de todo eso, un reportaje sobre las comilonas, desde las menguantes comidas de empresa a todo tipo de fiestorros. El mejor gag de la noche: un funcionario de un ministerio que tiene colapsadas las oficinas porque quiere imprimir... Internet.

T. D.