El universo del 'verdadero o falso'

Un peque?o ¨®leo, con la firma de Joaqu¨ªn Torres-Garc¨ªa, espera en el caballete la luz del l¨¢ser, que le llega a trav¨¦s de un cable de fibra ¨®ptica. Al entrar en contacto con la mol¨¦cula de pigmento el detector capta la informaci¨®n y la devuelve en forma de radiaci¨®n espectromagn¨¦tica, una onda coloreada que se comparar¨¢ con las de referencia. Para poder afirmar que los pigmentos no corresponden a los que se utilizaban en esa ¨¦poca y lugar, la operaci¨®n se repetir¨¢ m¨¢s de 300 veces. La obra tiene buenas probabilidades de ser falsa.

De hecho, al ser informado del resultado y quiz¨¢s temiendo las consecuencias o tan s¨®lo por la verg¨¹enza de admitir el timo, su propietario jam¨¢s volvi¨® a recogerla. As¨ª que ahora sirve como ejemplo a los ingenieros Sergio Ruiz y Alejandro L¨®pez-Gil, responsables del laboratorio Actio de la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a, donde desde 1994 se realizan an¨¢lisis de pigmentos para contribuir a fechar obras de arte y confirmar o establecer atribuciones.

El precio del estudio de expertizaci¨®n ronda los 1.500 euros

La ciencia no es suficiente para descubrir falsos con fines delictivos

"La espectroscopia Raman-L¨¢ser es una t¨¦cnica muy fiable, no invasiva y no destructiva, que combinamos con el an¨¢lisis visual a trav¨¦s del microscopio y la exposici¨®n a rayos infrarrojos", explican, rodeados por centenares de diminutas muestras de pigmentos de todas las ¨¦pocas y llugares.

En esos a?os, han pasado por el laboratorio de la UPC unas 300 obras de particulares, museos, fundaciones y entidades p¨²blicas, que han querido corroborar su documentaci¨®n con pruebas cient¨ªficas. El precio del estudio ronda los 1.500 euros, dependiendo de la dimensi¨®n, la ¨¦poca, el estado de conservaci¨®n y la t¨¦cnica, ya que seg¨²n los expertos, la acuarela es m¨¢s f¨¢cil de estudiar y el ¨®leo m¨¢s complicado debido a los aglutinantes.

"Los an¨¢lisis con espectroscopia Raman pueden resultar muy ¨²tiles en alg¨²n caso para descartar una hip¨®tesis o reforzarla, ya que aportan datos complementarios sobre la composici¨®n molecular de pigmentos, cargas, aglutinantes y barnices, pero constituyen un resultado parcial que se debe complementar y contrastar con otros ex¨¢menes para llegar a un diagn¨®stico que necesitar¨¢ la corroboraci¨®n de los historiadores del arte. Es un trabajo de equipo", asegura Mireia Mestre, jefe de Restauraci¨®n y Conservaci¨®n del Museo Nacional de Arte de Catalu?a (MNAC).

La ciencia, si bien resulta determinante para ampliar la informaci¨®n sobre los materiales de una obra, no es suficiente para determinar su autor o descubrir falsificaciones con fines delictivos. Tambi¨¦n hay otras posibilidades. "Es muy frecuente que obras de artistas importantes hayan sido copiadas por sus contempor¨¢neos sin ninguna mala fe y que a?os despu¨¦s estas copias hayan sido introducidas en el mercado del arte, convirti¨¦ndose en falsificaciones. En estos casos es muy ¨²til el an¨¢lisis con rayos X y reflectograf¨ªa, porque las copias no presentan el proceso creativo previo subyacente, que estos ex¨¢menes sacan a la luz", explica Mestre.

Cuando una obra debe ingresar en el MNAC, el museo realiza todos los ex¨¢menes en sus instalaciones y con personal propio. Primero se llevan a cabo los que no requieren extracci¨®n de micromuestras, como las radiaciones ultravioletas, infrarrojas y rayos X. Luego se emplean las t¨¦cnicas anal¨ªticas m¨¢s frecuentes: microscop¨ªa ¨®ptica y electr¨®nica para el estudio estratigr¨¢fico de las muestras, y distribuci¨®n y composici¨®n de los elementos qu¨ªmicos. "Tambi¨¦n se tienen en cuenta las alteraciones que sufren los materiales debido al envejecimiento intr¨ªnseco, el entorno o la interacci¨®n con elementos a?adidos en restauraciones posteriores", matiza Mestre.

Lo cierto es que, a medida que se refinan las t¨¦cnicas y se profundiza en la investigaci¨®n de los artistas con cat¨¢logos razonados y archivos documentales, es m¨¢s dif¨ªcil colocar falsos. "En los a?os inmediatamente posteriores a la muerte de Mir¨® hab¨ªa menos control, que ahora. Adem¨¢s hay cada vez m¨¢s coleccionistas que piden una expertizaci¨®n a la Fundaci¨®n antes de comprar. Este a?o hemos certificado m¨¢s de 250 obras y siempre hay algunos falsos", explica Rosa Maria Malet, directora de la Fundaci¨®n Mir¨® de Barcelona, que autentifica personalmente los grabados "a mano y directamente en el dorso", mientras que las obras ¨²nicas se examinan en Par¨ªs por un comit¨¦ formado por los nietos y la bisnieta del artista (que detienen el derecho moral sobre su obra), el experto Jacques Dupin, el galerista Lelong, Joanet Artigas, hijo del ceramista de Mir¨® y la propia Malet. "Cuando detecto un falso aviso la familia que bloquea la obra y presenta la denuncia pertinente, siguiendo un protocolo parecido al que aplican otras colecciones monogr¨¢ficas, como Chagall o Picasso", a?ade Malet.

"En este periodo de crisis est¨¢n apareciendo en el mercado obra de particulares, que no tienen pr¨¢cticamente historial expositivo. Puede haber piezas muy interesantes, pero hay que ser muy cautos y m¨¢s en el caso de una ¨¦poca tan controvertida y pol¨¦mica como la vanguardia rusa", afirma Rosario Peir¨®, responsable de colecciones del Museo Reina Sof¨ªa de Madrid. El Reina es muy prudente a la hora de comprar obras que tengan un pedigr¨ª reciente y prefieren tener documentaci¨®n que la relacione directamente con la ¨¦poca, m¨¢s all¨¢ de los materiales, ya que en el mercado negro se pueden adquirir telas, pigmentos e incluso pinceles de cualquier periodo.