Wagner, seg¨²n La Fura

A Wagner le sienta bien la atm¨®sfera futurista dise?ada por La Fura dels Baus en su exitoso montaje de El anillo del nibelungo. La propuesta esc¨¦nica multimedia firmada por Carlus Padrissa, muy h¨¢bil en el uso de las tecnolog¨ªas de vanguardia para narrar con inusitada fluidez la historia oper¨ªstica m¨¢s grande jam¨¢s contada, sit¨²a al montaje coproducido por el Palau de les Arts de Valencia y el Maggio Musicale Fiorentino entre los m¨¢s logrados espect¨¢culos wagnerianos de la d¨¦cada. Tras el ¨¦xito internacional de su estreno teatral, las dos primeras entregas de la Tetralog¨ªa, El oro del Rhin y La Walkyria, acaban de aparecer en DVD y Blue-Ray en el nuevo sello Cmajor, distribuido en Espa?a por Ferysa. La fuerza visual del espect¨¢culo y la espl¨¦ndida calidad de la Orquesta de la Comunidad Valenciana -ya es, sin duda, la mejor orquesta espa?ola (tambi¨¦n la m¨¢s cara), a un nivel s¨®lo comparable con los mejores fosos europeos- son las grandes bazas de una versi¨®n dirigida con acierto y admirable transparencia sonora por Zubin Mehta.

La est¨¦tica visual m¨¢s genuinamente furera e ¨ªntimamente ligada a la fuerza f¨ªsica de los actores convive con las proyecciones de alta definici¨®n en perfecta alianza teatral, forjando una recreaci¨®n virtual que no deja de asombrar en muchas escenas por su fidelidad a las intenciones wagnerianas. El impacto visual -fant¨¢stica labor de Franc Aleu en la creaci¨®n videogr¨¢fica- parece ser la principal se?a de identidad de este Anillo del siglo XXI, capaz de seducir tanto al p¨²blico joven acostumbrado a los c¨®digos visuales de filmes como La guerra de las galaxias como a los wagnerianos ¨¢vidos de montajes innovadores.

La fascinaci¨®n visual, sin embargo, no basta para explicar teatralmente una ¨®pera. El universo l¨ªrico de Wagner reclama mayores dosis de poes¨ªa y exige m¨¢s grandeza dram¨¢tica que despliegues tecnol¨®gicos. Faltan matices en la definici¨®n de los personajes, ideas y armas m¨¢s s¨®lidas en la direcci¨®n de actores; en ese sentido, las ya cl¨¢sicas lecturas de Harry Kupfer o Patrice Ch¨¦reau logran m¨¢s tensi¨®n y veracidad teatral sin tantos efectos. En el foso, Zubin Mehta tambi¨¦n apuesta por el Wagner m¨¢s directo y brillante, l¨ªrico y efusivo, de explosivas din¨¢micas, aunque sin el alto voltaje dram¨¢tico que consegu¨ªa Georg Solti y lejos de la grandeza y humanidad que anta?o transmit¨ªa Knappertsbusch.

En las voces se disfruta un buen nivel medio. Dentro de sus l¨ªricos recursos, el Wotan del bajo-bar¨ªtono Juha Uusitalo est¨¢ muy bien cantado, aunque en el cap¨ªtulo de voces masculinas quienes obtienen los ¨¦xitos m¨¢s rotundos son el gran bajo Matti Salminen y el tenor Peter Seiffert, un Siegmund de hermosa voz e intensos acentos. La muy notable Br¨¹nnhilde de la soprano Jennifer Wilson, la conmovedora Siegliende de la tambi¨¦n soprano Petra Maria Schnitzer y la soberbia Fricka de la mezzosoprano Anna Larsson elevan el list¨®n vocal de unos repartos de buen nivel medio cuyo principal escollo es el tosco Alberich interpretado por el bar¨ªtono Franz-Josef Kapellmann. La calidad t¨¦cnica en imagen y sonido es magn¨ªfica. La filmaci¨®n, dirigida por Tiziano Mancini, se realiz¨® en directo en abril-mayo de 2007 en el Palau de les Arts Reina Sofia y el sello Cmajor anuncia el lanzamiento internacional a finales de enero de las dos ¨²ltimas jornadas del monumental ciclo wagneriano, Sigfrido y El ocaso de los dioses.