"Ahora no hay ning¨²n problema con las lenguas en las aulas"
Se esfuerza por denominar "bases" al borrador de decreto de pluriling¨¹ismo que la Xunta present¨® a finales del a?o pasado. Anxo Lorenzo (Vigo, 1964), secretario general de Pol¨ªtica Ling¨¹¨ªstica, quiere dejar claro que est¨¢ abierto un di¨¢logo que comienza ma?ana con sindicatos, colectivos y partidos pol¨ªticos. Este socioling¨¹ista, ex colaborador del PSdeG, pone cuatro premisas irrenunciables: contar con la opini¨®n de los padres, equilibrio entre gallego y castellano, inclusi¨®n de una lengua extranjera y promoci¨®n del gallego.
Pregunta. ?Hay ahora alg¨²n problema en las aulas con los idiomas?
Respuesta. En las aulas no. Hay un decreto en vigor y se est¨¢ cumpliendo. En principio, problemas no detecto ninguno.
"Dar plazos para la implantaci¨®n del ingl¨¦s ser¨ªa poco realista"
"Estamos en los fuegos de artificio de la confrontaci¨®n partidaria"
P. ?Entonces, qu¨¦ necesidad hay de cambiar el decreto?
R. Fue una promesa electoral. Proponemos un nuevo decreto por una promesa electoral y porque hab¨ªa una serie de cuestiones de legalidad suscitadas por el informe del Consello Consultivo en 2007 que no se recogieron en el decreto. Por otra parte, se abri¨® un debate importante alrededor de los centros educativos y de las lenguas y consideramos que es el momento de cerrarlo.
P. Pero usted mismo hace poco m¨¢s de un a?o se mostraba contrario a cambiar el decreto.
R. Cada momento es cada momento. Hay una situaci¨®n pol¨ªtica diferente, una consulta que hicimos en junio a las familias de los 330.000 alumnos del sistema no universitario donde muestran un inter¨¦s por tener una ense?anza biling¨¹e y lo m¨¢s equilibrada posible entre las dos lenguas oficiales. Por otro lado, est¨¢ el tema del pluriling¨¹ismo.
P. ?No es ¨¦sa una excusa para que el gallego pierda peso?
R. No es excusa para nada. La reflexi¨®n que hacemos es: en el nuevo decreto tiene que estar resuelta la cuesti¨®n de las lenguas oficiales y la promoci¨®n de la lengua gallega. Pero es un decreto para la gran mayor¨ªa de la sociedad, queremos que perdure. Ofrecemos un modelo pluriling¨¹e, en el que blindamos el equilibrio entre las lenguas oficiales.
P. ?Qu¨¦ les dice a quienes piensan que con este decreto se desprotege el gallego?
R. Que no hay una igualdad social lo sabemos todos y por eso hay desde la Administraci¨®n de la Xunta una pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica para favorecer la adquisici¨®n de conocimiento en gallego. La oposici¨®n lo que hizo fue establecer el discurso de que este Gobierno va en contra del gallego y lo desprotege. Desde luego, nosotros lo que decimos es que este gobierno hace una pol¨ªtica de promoci¨®n.
P. Llaman ustedes al consenso, pero el ¨²nico que hay hasta ahora est¨¢ dentro del Gobierno y del PP. ?Fue muy dif¨ªcil conseguir ese consenso?
R. Bueno, la elaboraci¨®n de una norma de tanta relevancia tiene su complicaci¨®n. Ahora bien, sigo insistiendo en la cuesti¨®n del consenso. Presentamos unas bases, no un decreto. Pero no es s¨®lo cosa nuestra. Abrimos el tr¨¢mite de audiencia p¨²blica para poder recoger todas las opiniones, pedimos la opini¨®n a las dos instituciones de referencia en las cuestiones culturales y ling¨¹¨ªsticas. Y queremos saber tambi¨¦n la opini¨®n de las fuerzas pol¨ªticas. Ahora, para poder consensuar algo hay que tener inter¨¦s. Nosotros demostramos el nuestro. De otras fuerzas, adem¨¢s de enmiendas a la totalidad, esperamos que nos digan: en esto estamos de acuerdo, en esto no y en esto regular. Nosotros apostamos por un modelo de equilibrio, no de segregaci¨®n. Consideramos que responde a las expectativas del inter¨¦s de la mayor parte de la sociedad.
P. Pero la mayor parte de la sociedad se est¨¢ quejando.
R. Llevamos dos semanas, todav¨ªa no empezamos el tr¨¢mite de audiencia, hay mucho ruido de fondo. Nos parece dif¨ªcil de entender c¨®mo organizaciones pol¨ªticas, sindicales, sociales, etc. que est¨¢n de acuerdo en que tiene que haber competencia en las dos lenguas oficiales, en promocionar la lengua gallega y en que el tema de las lenguas extranjeras es importante, ni siquiera discutan qu¨¦ les gusta del decreto y qu¨¦ no. Adem¨¢s, el fomento del gallego es importante en la ense?anza, pero el foco fundamental del fomento est¨¢ en la sociedad.
P. Dice el PP que quienes est¨¢n en contra son los extremos. ?Son extremos las instituciones culturales, los sindicatos, profesores, partidos de la oposici¨®n?
R. Yo digo que est¨¢ pensado para la mayor¨ªa gallega y que escapa de los extremismos, que para m¨ª son los que quieren la ense?anza s¨®lo en castellano o s¨®lo en gallego.
P. ?Un extremo ser¨ªa Galicia Biling¨¹e?
R. Aquellos que apuestan por una ense?anza s¨®lo en castellano est¨¢n en un extremo.
P. ?Y Galicia Biling¨¹e?
R. Ellos sabr¨¢n.
P. Su nombramiento fue una forma de buscar consenso en este decreto. ?Si no consiguen un amplio apoyo, incluyendo al PSdeG, ser¨¢ un fracaso?
R. Yo vine aqu¨ª para ayudar a solucionar todo el debate que se est¨¢ produciendo en la lengua gallega. ?Ser¨ªa un fracaso no conseguir consenso? Eso es cosa de muchas partes. Me da la impresi¨®n que las fuerzas pol¨ªticas no entraron en el fondo, estamos en los fuegos de artificio de la confrontaci¨®n partidaria.
P. ?Qu¨¦ est¨¢n abiertos a cambiar para llegar al consenso?
R. Tenemos los principios de equilibrio, promoci¨®n de la lengua gallega, pluriling¨¹ismo y contar con la opini¨®n de las familias. En cuanto al resto, si en aras del consenso hay que buscar f¨®rmulas que supongan alg¨²n tipo de modificaci¨®n, pues adelante.
P. ?Por ejemplo, que no sea vinculante la votaci¨®n de los padres?
R. Prefiero no dar ning¨²n ejemplo. Dir¨ªa que con esos principios se pueden hacer cambios.
P. Tal y como est¨¢ planteado ahora, un ni?o en Educaci¨®n Infantil, puede cambiar cada a?o de lengua oficial.
R. S¨ª, pero en Infantil habr¨¢ una lengua predominante, pero no ¨²nica. Queremos que la lengua predominante sea la de la mayor¨ªa, pero que la otra tambi¨¦n est¨¦ presente.
P. Se cambia el enunciado que establec¨ªa el gallego como lengua preferente para sugerir que se fomente. ?Qu¨¦ medidas tomar¨¢n para que se fomente?
R. La idea es que el gallego siga siendo la lengua de la administraci¨®n educativa, pero optamos por una f¨®rmula propositiva, promotora y fomentadora. Damos a entender que los centros deben hacer todo lo posible para fomentar la lengua gallega.
P. ?Qu¨¦ utilidad tiene que los padres elijan la lengua oficial de matem¨¢ticas y conocimiento del medio?
R. La cuesti¨®n de fondo que esta detr¨¢s es: ?la familia debe tener opini¨®n directa o no? En las bases nosotros decimos que s¨ª. Consideramos que darle voz vinculante a las familias ser¨ªa interesante cada cuatro cursos.
P. ?Es simb¨®lica esa elecci¨®n?
R. Hombre, entre no dar voz y dar voz... y si das voz, que en algunos casos es vinculante, no dir¨ªa que es simb¨®lica. A muchos les parece excesivo. Y a otros, poco.
P. ?Y con qu¨¦ criterio puede un padre decidir si es mejor que las matem¨¢ticas sean en gallego o en castellano?
R. A ver, nosotros lo que formulamos en estas bases es la idea de equilibrio entre gallego y castellano y poder llegar a un tercio en lengua extranjera. Dentro de ese marco quisimos darle flexibilidad para que cada centro manejase esa situaci¨®n teniendo en cuenta la opini¨®n de las familias y la disponibilidad de los recursos. La alternativa ser¨ªa hacer un sistema tremendamente r¨ªgido.
P. ?Y no va a suponer esto un conflicto para los profesores?
R. Cuando lo proponemos consideramos que no. Ahora, una vez que escuchemos todas las opiniones de los equipos directivos, el profesorado, fuerzas sindicales, haremos una valoraci¨®n.
P. ?Cu¨¢ndo estar¨¢ completamente implantado el tercio en lengua extranjera?
R. Nosotros hacemos una foto de llegada. Partimos de la existencia de muy pocas horas semanales en lengua extranjera. La foto de llegada es ese tercio. Es un objetivo para cumplir. No se trata de poner de un curso para otro ese tercio, sino abrir ese proceso. Seguramente hay que explicarlo m¨¢s y con m¨¢s claridad. ?Cu¨¢ntos cursos necesitamos? No lo sabemos. Lo que tenemos claro es el objetivo y que vamos a poner los medios para que ese periodo sea el menor posible, formando al profesorado y al alumnado. Marcar un plazo es poco realista.
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