A 200 metros del puerto y sin poder atracar

Con 350 toneladas de t¨²nidos en las bodegas y tras cuatro meses en alta mar, el atunero vasco Bermeotarrak IV cumple hoy 16 d¨ªas fondeado entre las m¨¢s de 2.200 bateas que mecen las aguas de la r¨ªa de Arousa. Capitan¨ªa Mar¨ªtima le neg¨® la entrada al puerto de A Pobra do Carami?al el pasado d¨ªa 13, tras notificar el Juzgado N¨²mero 2 de A Coru?a la orden de embargo que pesa sobre la armadora Pesqueras Bermeanas de T¨²nidos S.A. (Pebertu) por 400.000 euros de deuda. En medio del proceso judicial, los 29 tripulantes (cuatro de ellos abandonaron ya el barco sin autorizaci¨®n) afrontan una tensa espera sin apenas agua ni combustible.

El capit¨¢n del buque, Juan Garc¨ªa, lo vive con preocupaci¨®n: "No podemos dejar el barco, no s¨®lo por cobrar, tambi¨¦n por orgullo. No queremos causar destrozos y da?ar a terceras personas que nada tienen que ver con esto". Se refiere Garc¨ªa a las bateas que circundan la nave, fondeada en la r¨ªa m¨¢s mejillonera de Galicia. Los fondos arenosos impiden una buena sujeci¨®n del ancla y ya se ha producido el primer susto, despu¨¦s de que la nave alcanzara una batea sin mayores consecuencias. Corrigieron el rumbo a tiempo porque est¨¢n de guardia "las 24 horas". M¨¢s ahora que la Agencia Espa?ola de Meteorolog¨ªa activ¨® para hoy la alerta amarilla en la costa gallega con vientos que pueden alcanzar fuerza 7 en esa zona. Capitan¨ªa Mar¨ªtima de Vilagarc¨ªa entiende, sin embargo, que "no hay peligro" alguno y se?ala que el barco seguir¨¢ sin tocar tierra "a la espera de que se resuelva el problema judicial". Desde el puerto, una lancha de la Guardia Civil vigila los movimientos de los tripulantes.

El declive de Alfageme asest¨® un golpe brutal a la empresa

Entre tanto, la mariner¨ªa est¨¢ "como en una c¨¢rcel", lamenta el capit¨¢n, a quien pesa, sobre todo, la situaci¨®n de los africanos -s¨®lo seis son espa?oles: dos vascos y cuatro gallegos-. "Est¨¢n deprimidos, casi no salen de los camarotes", relata. De hecho, cuatro de ellos se escaparon durante el pasado fin de semana. "No s¨¦ c¨®mo", dice el capit¨¢n. "El resto desesperamos y nos aburrimos, en condiciones infrahumanas" y sin disponer de agua para el aseo. El presidente de la Asociaci¨®n de Titulados N¨¢utico-Pesqueros, Jos¨¦ Manuel Mu?iz, denuncia que el atunero se ha convertido en "una c¨¢rcel flotante" e insta a las autoridades a mediar.

Otro problema lo constituyen las capturas. Con gasoil para mantener operativos los refrigeradores de las bodegas durante apenas cuatro d¨ªas, peligra el fruto de cuatro meses de trabajo porque si no descargan, no cobran. Si nadie interviene, los oficiales del buque se enfrentar¨¢n a una dif¨ªcil encrucijada: o utilizan el combustible para conservar el pescado o para esquivar las bateas en el caso de que el barco vuelva a moverse.

Garc¨ªa tacha la situaci¨®n de "rid¨ªcula" y aboga por descargar la pesca para recaudar "lo que se pueda" y enviar a la tripulaci¨®n a casa. Al capit¨¢n, que es natural de A Pobra, le separan de su casa 200 metros de agua. ?sta es la primera, y parece que la ¨²ltima, marea para el gallego con la armadora vasca. Una empresa "familiar" a la que el declive de la conservera Alfageme asest¨® un golpe brutal para una firma que "vive al d¨ªa". Perdieron "una carga completa", cuenta Garc¨ªa, y la firma de Bermeo no ha podido salir a flote.