"La aspiraci¨®n es conquistar lo cotidiano"
En la lucha por la conquista de derechos sociales y civiles, los discapacitados andaluces est¨¢n de enhorabuena. La mayor¨ªa de los 716.100 existentes -el 6,58% de la poblaci¨®n andaluza seg¨²n la ¨²ltima encuesta del Instituto Nacional de Estad¨ªstica de 2008-, celebra que, por primera vez, "uno de los suyos", ocupe un alto cargo en la Junta. Gonzalo Rivas (Jerez de la Frontera, 1959) acaba de ser nombrado director general de Personas con Discapacidad. ?l sabe bien lo que es eso. Desde que a los ocho meses de vida le diagnosticasen la polio, sus d¨ªas han transcurrido en varios hospitales primero y, despu¨¦s, a caballo de una silla de ruedas.
Pero Rivas es un fil¨®sofo. Y no s¨®lo por su condici¨®n de licenciado en esta disciplina por la Universidad de Sevilla, sino tambi¨¦n porque, como discapacitado, est¨¢ obligado a pensar cada d¨ªa en c¨®mo derribar las barreras que cercan al mundo.
"Ni queremos que se nos trate como VIP, ni como apestados"
"Queremos estar en la agenda pol¨ªtica de todas las administraciones"
Este jerezano optimista sue?a con otra forma de civilizaci¨®n y progreso. "Una ciudad de ciudadanos responsables", precisa, "en la que todos seamos conscientes de que los l¨ªmites urbanos no deben existir para nadie. ?L¨ªmites? S¨®lo los que cada uno se ponga; no los que nos impone la sociedad o los que la dirigen".
Por eso, nada m¨¢s comenzar la entrevista cita al cl¨¢sico Horacio, del que dice que reivindicaba "la dorada mediocridad". ?A qu¨¦ se refiere? "Nosotros", explica, "no queremos ser unos h¨¦roes; s¨®lo personas normales. Tenemos ciertas limitaciones, s¨ª; pero casi todo el mundo las tiene, ?no? Unos no saben ingl¨¦s y a otros les da miedo volar... Ni queremos que se nos traten como VIP, como se hac¨ªa en la Expo 92 cuando no hac¨ªamos colas; ni como apestados. Los discapacitados no queremos privilegios, s¨®lo que no se nos discrimine. Si pasamos desapercibidos es se?al de que estamos integrados".
La primera misi¨®n que se ha impuesto Rivas nada m¨¢s llegar a la direcci¨®n general ha sido la de desdramatizar la percepci¨®n que la sociedad tiene de la discapacidad. "La gente ha de entender que lo nuestro no es una condena; podemos ser tan felices como cualquiera. Hay ciegos geniales que tocan el piano, sordos virtuosos del lenguaje de signos o paral¨ªticos sabios como Stephen Hawking", dice. De ah¨ª que uno de sus proyectos m¨¢s inmediatos sea la firma de acuerdos con los ayuntamientos para que estos acerquen sus problema a la gente y se los hagan entender. "Queremos estar en la agenda pol¨ªtica de todas las administraciones como lo est¨¢n ya el medioambiente o la igualdad. Nuestra aspiraci¨®n es conquistar lo cotidiano; el detalle que nos d¨¦ normalidad. A veces, por una tonter¨ªa se estropea un buen proyecto. A nosotros nos perjudica igual un bordillo de tres cent¨ªmetros que de 30; o que las rejillas de desag¨¹e est¨¦n colocadas en la misma direcci¨®n que siguen las sillas de ruedas, podemos caernos. De nada sirve que un restaurante tenga cuarto de ba?o para discapacitados si luego lo utilizan de almac¨¦n; como es espacioso...", comenta riendo.
No pretende Rivas, sin embargo, darle la vuelta a la pol¨ªtica que la Consejer¨ªa de Igualdad y Bienestar Social promueve con los discapacitados. "Al contrario, siempre ha tenido una especial sensibilidad con nosotros", dice. "Por eso yo reivindico lo mismo ahora que antes de estar aqu¨ª". Y sobre la crisis que atenaza a la sociedad andaluza, su objetivo es conseguir que "la recesi¨®n econ¨®mica no sea tambi¨¦n ¨¦tica". Los 1.286 millones de euros que su direcci¨®n general gastar¨¢ este a?o nunca ser¨¢n suficientes, claro, aunque Rivas reconoce que hay partidas presupuestarias, como la destinada a subvenciones, que crecen un 16,6% o la destinada al envejecimiento y discapacidad, que lo hacen un 83,9%.
El empleo, aunque no dependa de ¨¦l, tambi¨¦n ocupar¨¢ un lugar destacado en su agenda. "Para una persona minusv¨¢lida es su certificado de ciudadan¨ªa", afirma Rivas. Conseguir m¨¢s empleos, especialmente para las mujeres minusv¨¢lidas, es un objetivo prioritario para este director general. "En una mujer", argumenta, "la discapacidad no duplica su marginalidad, la multiplica".
Rivas quiere llamar la atenci¨®n sobre las campa?as de tr¨¢fico que con frecuencia recurren al discapacitado como argumento para avisar del peligro. Sobre esto, se explica: "No creo que ser paral¨ªtico signifique que se acaba la vida; al contrario, a las v¨ªctimas de estos sucesos siempre le decimos que empiezan una nueva. Por tanto no me gusta que se diga, por ejemplo, que 'alcohol, igual a silla de ruedas...' No se pone a un gordo, por ejemplo, a la puerta de una pasteler¨ªa para que la gente no compre pasteles, digo yo".
Al final, c¨®mo no, el fil¨®sofo Gonzalo Rivas recurre a otro cl¨¢sico para resumir su ideario. Y cita a S¨¦neca: "De nada sirven los vientos favorables cuando no se sabe a qu¨¦ puerto te diriges". "En nuestro caso, el puerto est¨¢ marcado: intentamos conseguir la normalidad. Los discapacitados, antes que nada, luchamos por conquistar lo cotidiano. Por eso, por que s¨¦ a d¨®nde quiero llegar, no va haber discrepancias entre lo que antes defend¨ªa y lo que defender¨¦ a partir de ahora".
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