No diga calentamiento global
El t¨¦rmino "calentamiento global", que ha cuajado tanto en los medios de comunicaci¨®n, en el mundo de la pol¨ªtica, a nivel popular y, por qu¨¦ no decirlo, tambi¨¦n entre los cient¨ªficos, me hace reflexionar acerca de lo que realmente significa y si realmente se est¨¢ utilizando correctamente.
Lo primero que hay que exponer es que el t¨¦rmino original, global warming, fue introducido por un cient¨ªfico, Wallace S. Broecker, hace ya bastantes a?os en el art¨ªculo Climate Change: are we on the brink of a pronounced global warming? publicado en la prestigiosa revista Science all¨¢ por 1975. Seguramente Broecker no se imagin¨® en su d¨ªa lo que parte del t¨ªtulo de ese art¨ªculo llegar¨ªa a representar. Cuando el a?o pasado gan¨® la primera edici¨®n del ya prestigioso premio de la Fundaci¨®n BBVA Fronteras del Conocimiento, en su categor¨ªa de Cambio Clim¨¢tico, con sus primeras declaraciones coment¨® que ser¨ªa una l¨¢stima que se le fuera a recordar ¨²nicamente por haber acu?ado ese t¨¦rmino. Y tiene raz¨®n; su obra es muy extensa y de gran calidad, lo cual fue valorado por el jurado -del que tuve el honor de formar parte-, y le llev¨® a conseguir el premio frente a una impresionante constelaci¨®n de competidores.
La subida junto al suelo de la temperatura del aire es s¨®lo una de las manifestaciones del cambio
El primer comentario que me viene a la cabeza es lo mal que, en este contexto, "asimilamos" en castellano la palabra "global". Se trata de un calificativo de globo (por supuesto referido al planeta Tierra). Su sin¨®nimo m¨¢s pr¨®ximo ser¨ªa "mundial" y el significado en calentamiento global lleva impl¨ªcito un valor medio, un promedio, ya que es imposible que el mundo se caliente por igual en todas sus partes. Ser¨ªa absurdo pensar que el planeta tenga un rico mosaico de climas y que, por arte de magia, fueran a cambiar todos de la misma forma. El siguiente comentario hace referencia a la propia medida de la temperatura. Cuando se dice que la temperatura en Lisboa es de 14,5¡ã C se interpreta, sin excepci¨®n y correctamente, que esa temperatura corresponde al aire cerca del suelo. Volviendo al objeto del t¨¦rmino que origina mi comentario, deber¨ªa entonces interpretarse como "calentamiento medio mundial del aire cerca del suelo". Ya entiendo que cambiar a estas alturas la interpretaci¨®n que se hace de calentamiento global es imposible y por esa raz¨®n propongo su eliminaci¨®n del lenguaje ordinario. A sabiendas de que voy a tener poco ¨¦xito con mi propuesta, insisto, deber¨ªamos quitarnos de encima ese calentamiento global.
El problema es que dar una alternativa tambi¨¦n es dif¨ªcil, pero lo voy a intentar, al menos. Empiezo por reconocer que la insistencia del IPCC en utilizar la temperatura para hablar del cambio clim¨¢tico, cuando resume sus informes de evaluaci¨®n con el fin de llegar a los responsables de las pol¨ªticas, a los medios de comunicaci¨®n y a la sociedad en general, ha favorecido el uso indebido del t¨¦rmino calentamiento global. Un cambio de clima en el planeta Tierra afecta a otras muchas variables -precipitaci¨®n, viento, humedad, nubosidad, etc¨¦tera-, no s¨®lo del aire en las capas bajas, y no s¨®lo a sus valores medios sino tambi¨¦n (y esto es muy importante) a su variabilidad tanto temporal como espacial. Miren, la temperatura, por ejemplo, ya que estamos con ella, no tiene por qu¨¦ aumentar lo mismo siempre y en todo lugar. Incluso podr¨ªa disminuir en alg¨²n lugar y en alg¨²n momento. Curiosamente, ese "siempre y en todo lugar" es lo que muchas veces se toma como ¨²nica acepci¨®n de "global" y eso es simplemente indebido.
Lo que propongo es utilizar como alternativa "cambio clim¨¢tico", pero con una condici¨®n. Mi an¨¢lisis vuelve a estar centrado en el t¨¦rmino en ingl¨¦s de donde ha derivado su incorporaci¨®n a nuestro lenguaje. Se habla en los documentos oficiales originales de climate change, no de climatic change, lo que ocurre es que se a?ade que est¨¢ referido a su origen en la actividad humana. Posiblemente la traducci¨®n mejor hubiera sido cambio de clima, y a?adir, de origen antr¨®pico, pero esto tambi¨¦n es imposible de cambiar. As¨ª se estar¨ªa cumpliendo con el hecho de que el clima en la Tierra siempre ha cambiado (de forma natural) y con la situaci¨®n problem¨¢tica actual de estar haci¨¦ndolo como consecuencia de la actividad humana.
Una de las manifestaciones del cambio de clima de origen antr¨®pico, o cambio clim¨¢tico, es la tendencia positiva observada en la temperatura media del aire junto al suelo, pero eso s¨®lo es una de las manifestaciones. Por hacer un peque?o resumen, ese calentamiento es mayor en las regiones polares y sobre los continentes que en el resto; la temperatura media de la estratosfera presenta tendencia negativa; los patrones de viento est¨¢n cambiando, lo mismo que el r¨¦gimen mundial de precipitaci¨®n, con un incremento medio; la humedad media est¨¢ aumentando; los ciclones tropicales atl¨¢nticos est¨¢n siendo cada vez m¨¢s potentes; se est¨¢n fundiendo los hielos continentales; se est¨¢ elevando el nivel medio del mar... y otras muchas cosas.
Hoy d¨ªa sabemos que todo eso es consecuencia de la actividad humana y que dicha actividad, de continuar, acentuar¨¢ mucho m¨¢s lo que ya hemos observado. Si quieren, a todo eso le pueden llamar calentamiento global, yo prefiero llamarle cambio clim¨¢tico, que resulta m¨¢s corto y c¨®modo de decir que cambio de clima de origen antr¨®pico del planeta Tierra. Eso, al fin y al cabo, es lo que significa.
Sergio Alonso Oroza es catedr¨¢tico de F¨ªsica de la Tierra de la Universidad de las Islas Baleares y profesor visitante en la Universidad de Lisboa.
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