Adi¨®s a Molowny, "un l¨ªder moral"
El Mangas, una instituci¨®n del Madrid como jugador y t¨¦cnico, fallece a los 84 a?os
A Santiago Bernab¨¦u no se le escap¨® el talento de un tinerfe?o que despuntaba en el Marino de Las Palmas. Era Luis Molowny Arbelo, un joven de 21 a?os y ascendencia irlandesa, con gran facilidad para el pase, precisi¨®n en el regate e internadas letales. Corr¨ªa 1946 y el m¨ªtico dirigente del Madrid gan¨® la partida al Barcelona con su fichaje. As¨ª lleg¨® El Mangas, como se conoc¨ªa a Molowny por jugar con las manos metidas dentro de la camiseta, al equipo al que consagr¨® 30 a?os de su vida. El viernes por la noche falleci¨® en Las Palmas a los 84 a?os de edad y ayer fue incinerado ante una amplia representaci¨®n del mundo del f¨²tbol.
Polivalente en el campo y fuera de ¨¦l, Molowny comparti¨® vestuario con Gento, Puskas o Di St¨¦fano, a quien le uni¨® una gran amistad. M¨¢s tarde sigui¨® como director deportivo del Madrid a talentos como Butrague?o o M¨ªchel y ejerci¨® de entrenador de Camacho, Hugo S¨¢nchez o Valdano, que ayer resalt¨®: "Ha fallecido un madridista que marc¨® la historia del club, un hombre bueno al que homenajearemos como se merece". Hasta en cuatro ocasiones ocup¨® el banquillo (entre 1971 y 1990). Siempre que las urgencias lo requirieron cambi¨® el traje de directivo por el ch¨¢ndal.
El influjo del canario se ve en Del Bosque, producto de su forma de entender el f¨²tbol
"Molowny ha sido una figura muy importante. Una gran persona con una habilidad especial para sacar lo mejor del equipo y con una gran psicolog¨ªa. Acudi¨® al rescate en situaciones delicadas y siempre gan¨®". Butrague?o recordaba as¨ª las habilidades de un entrenador que se adelant¨® a su tiempo. Fue un apagafuegos de lujo que estableci¨® un modelo de autogesti¨®n del que emergieron caracteres como el de Camacho, l¨ªder de las remontadas que dieron la Liga 1985-86. Como t¨¦cnico logr¨® tres Ligas, dos Copas de la UEFA y dos de Espa?a.
Antes de subir al avi¨®n para participar en el funeral, Butrague?o habl¨® de la influencia en su carrera del canario: "Le ten¨ªa un gran afecto porque, adem¨¢s, tuvo mucho que ver con que yo continuara en el Madrid. Cuando ten¨ªa 18 a?os, su decisi¨®n fue clave para mi futuro".
Pero si en alguien se ve claro el influjo de Molowny es en Vicente del Bosque. "Fue un l¨ªder moral, un hombre bueno, recto, ¨ªntegro y austero. Lo ten¨ªa todo. Fue alguien que en este mundo tan medi¨¢tico cada d¨ªa lo pasar¨ªa peor. En lo deportivo era listo. Conoc¨ªa bien el f¨²tbol, sab¨ªa elegir a los jugadores y hacerlos jugar de la manera m¨¢s sencilla", declar¨®.
Ambos jugaron en el Madrid hasta su retirada -Molowny, de 1946 a 1957 y Del Bosque de 1973 a 1984- y lograron grandes ¨¦xitos deportivos vestidos de corto -en sus 198 partidos, Molowny logr¨® dos Ligas, una Copa de Europa y una Copa mientras que Del Bosque se hizo con cinco Ligas (dos con el canario como entrenador) y cuatro Copas. M¨¢s tarde, ambos dirigieron al Madrid y fueron seleccionadores. Pese a todo, Del Bosque establece diferencias: "Nosotros no le llegamos ni a la suela de los zapatos". Manuel Vel¨¢zquez, uno de sus jugadores en el Madrid de los a?os 70, destac¨® su car¨¢cter "agradable": "Eso no es tan f¨¢cil de encontrar en el mundo del f¨²tbol".
Una carrera de casi 50 a?os le permiti¨® conocer diferentes formas de gesti¨®n, entender el negocio y aprender a convivir con todos. As¨ª lo recuerda el seleccionador: "Molowny fue muy de Bernab¨¦u, pero tambi¨¦n abraz¨® la causa de Luis de Carlos y Ram¨®n Mendoza. Era de pocas palabras, pero cuando hablaba siempre dec¨ªa lo que ten¨ªa que decir".
En el Bar?a lamentaron su desaparici¨®n: "M¨¢s all¨¢ de los t¨ªtulos que gan¨®, y lo gan¨® todo como jugador y entrenador, Molowny fue un mito para el Madrid porque siempre supo respetar los valores que hicieron grande a ese club", dijo Guardiola.
Informaci¨®n elaborada por Rosa Sulleiro, Diego Torres y Cayetano Ros.
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