Blanco asume el peso pol¨ªtico del pacto

Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero plante¨® el viernes, 12 de febrero, la necesidad de abrir una negociaci¨®n con los grupos pol¨ªticos para conseguir un acuerdo contra la crisis econ¨®mica. Cuatro d¨ªas m¨¢s tarde, comunic¨® los nombres de los tres miembros del Gobierno que formar¨ªan la comisi¨®n encargada de esa misi¨®n. La inclusi¨®n en ella del ministro de Fomento, Jos¨¦ Blanco, buscaba sumar a un negociador pol¨ªtico, compensar las tendencias liberales de la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, y del titular de Industria, Miguel Sebasti¨¢n y facilitar la interlocuci¨®n con los nacionalistas como titular de las infraestructuras, seg¨²n fuentes de La Moncloa.

Todos los viernes, el presidente se re¨²ne en torno a unas tazas de caf¨¦ con sus ministros antes de la reuni¨®n del Consejo. El 12 de febrero, les expres¨® sus dudas sobre la manera de articular la propuesta de acuerdo que iba a presentar el mi¨¦rcoles en el Congreso a las otras formaciones pol¨ªticas. Seg¨²n les dijo, tem¨ªa crear grandes expectativas en un tema tan sensible como la crisis y que luego no se cumplieran. Estaba convencido de que a Mariano Rajoy no le interesaba el acuerdo porque necesita la crisis como espacio de oposici¨®n.

El viernes 12, el presidente a¨²n ten¨ªa dudas sobre c¨®mo articular el acuerdo

Zapatero no impuso su presencia para no politizar mucho los encuentros

Manifest¨® que tampoco le gustaba la expresi¨®n Pacto de Estado, que el 8 de febrero plante¨®, por vez primera en relaci¨®n con la crisis econ¨®mica, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, por sus connotaciones grandilocuentes.

Durante el fin de semana, Zapatero realiz¨® varias consultas individuales. El debate entre el presidente y sus ministros continu¨® en la reuni¨®n de maitines del lunes, 15 de febrero, en la Moncloa. A ella asistieron los miembros de su n¨²cleo duro: los tres vicepresidentes (Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega, Elena Salgado y Manuel Chaves), los n¨²meros dos y tres del PSOE (Jos¨¦ Blanco y Leire Paj¨ªn), el portavoz parlamentario (Jos¨¦ Antonio Alonso) y su jefe de Gabinete (Jos¨¦ Enrique Serrano).

El presidente dijo que hab¨ªa decidido no plantear un Pacto de Estado porque, adem¨¢s, hab¨ªa tres cuestiones clave que deb¨ªan quedar fuera de una negociaci¨®n con los partidos: los impuestos, las pensiones y la reforma laboral. Las dos ¨²ltimas cuestiones ya ten¨ªan su cauce, el Pacto de Toledo y el di¨¢logo social entre patronal y sindicatos. En el caso de los impuestos, Zapatero expres¨® que, a su juicio, no existe margen para rebajarlos, como plantea Mariano Rajoy.

Sus interlocutores le animaron a intentar un acuerdo limitado porque, seg¨²n expusieron, hab¨ªa una demanda social favorable al pacto contra la crisis y porque, si sal¨ªa adelante, contribuir¨ªa a fortalecer la imagen de Espa?a en el exterior, que hab¨ªa sido cuestionada en semanas anteriores. Zapatero insisti¨® en la necesidad de que la propuesta tuviera un l¨ªmite temporal para darle credibilidad. Todos coincidieron en que las posibilidades de un acuerdo con CiU y PNV eran factibles, del mismo modo que ve¨ªan muy dif¨ªcil que el PP se sumase al mismo.

En la reuni¨®n se pusieron sobre la mesa los asuntos m¨¢s urgentes y susceptibles de acuerdo: la agilizaci¨®n del cr¨¦dito en el sistema financiero, el plan de austeridad, la pol¨ªtica industrial y la competitividad. Zapatero los seleccion¨® por su urgencia y por sus posibilidades de acuerdo. Para ello se pas¨® el fin de semana estudiando las propuestas de los grupos en los debates parlamentarios anteriores.

El presidente no dijo qui¨¦n se iba a encargar de la interlocuci¨®n con los partidos. Como no cit¨® ni la comisi¨®n negociadora ni su composici¨®n, y habl¨® en tono personal de la propuesta de acuerdo, algunos de los presentes interpretaron que iba a ser ¨¦l mismo el interlocutor.

Pero su idea era otra. El presidente no quer¨ªa politizar mucho los encuentros imponiendo su presencia, pero tampoco quer¨ªa devaluarla. Por eso eligi¨® una comisi¨®n gubernamental de alto nivel. El martes 16 comunic¨® los nombramientos individualmente a los interesados. Tambi¨¦n se los revel¨® a los integrantes de las reuniones de maitines.

Aunque la vicepresidenta primera, Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega, preside la mayor¨ªa de las comisiones del Gobierno y es la portavoz oficial del Ejecutivo, en el PSOE no llam¨® la atenci¨®n que Zapatero no la convocara para esta comisi¨®n crucial. Por su car¨¢cter econ¨®mico y porque apenas ejerce de portavoz.

Desde el verano, las voces del Gobierno se han multiplicado, como la del vicepresidente tercero, Manuel Chaves. Pero, por encima de todos, quien viene ejerciendo ese papel es el ministro de Fomento, Jos¨¦ Blanco.

Dada la importancia que Zapatero ha concedido a esta comisi¨®n, la interpretaci¨®n general en el PSOE es que sus miembros son ministros que, a ojos del presidente, est¨¢n muy fortalecidos. Pero nadie osa concluir que sea el embri¨®n de un nuevo n¨²cleo duro en el previsible cambio de Gobierno, tras la Presidencia europea.