Sexo, entrenamiento y abusos
Cincuenta alumnos de una escuela de k¨¢rate grancanaria se declaran v¨ªctimas de abusos sexuales reiterados - El due?o y dos profesoras est¨¢n en prisi¨®n preventiva
"Para ser campe¨®n de k¨¢rate hay que mantener relaciones sexuales a menudo, al menos 10 veces a la semana". "El sexo es bueno". "Lo importante es el grupo. La familia no es nada". Los alumnos de la prestigiosa escuela de k¨¢rate Torres Baena, en Las Palmas de Gran Canaria, recib¨ªan mensajes como ¨¦stos a lo largo de sus a?os de entrenamiento, seg¨²n han asegurado a la justicia decenas de estudiantes. El due?o de la academia, Fernando Torres Baena, ex campe¨®n de Espa?a y presidente de la Federaci¨®n Gran Canaria de K¨¢rate, su pareja y una monitora, est¨¢n en prisi¨®n preventiva imputados por abusos sexuales continuados y corrupci¨®n de menores. Otros dos profesores se encuentran en libertad bajo fianza. M¨¢s de 50 supuestas v¨ªctimas, de 9 a 35 a?os, han descrito un panorama de abusos en la escuela a lo largo de 20 a?os en un ambiente de secta en el que se les ense?aba que el sexo era parte fundamental del entrenamiento; que s¨®lo siendo muy activos llegar¨ªan a ser grandes deportistas.
El principal imputado es un karateka de gran prestigio
Se le acusa de abusos continuados y corrupci¨®n de menores
Torres Baena llevaba a los chicos a su casa en Playa de Vargas
Los alumnos m¨¢s antiguos relatan abusos ocurridos hace 20 a?os
Las presuntas v¨ªctimas han relatado ante el juez -seg¨²n ha tenido conocimiento EL PA?S- que en la escuela se fomentaban las relaciones sexuales entre los menores y tambi¨¦n entre menores y adultos. Hombres con hombres, mujeres con mujeres y hombres con mujeres. Todos ni?os y j¨®venes guapos. En la casa del director en el municipio de Playa de Vargas, en una urbanizaci¨®n llamada El Ed¨¦n, se hac¨ªan tr¨ªos, cuartetos y quintetos. Torres Baena, nacido en 1956, ense?aba a masturbarse a chavales de 9 y 10 a?os, conforme a la declaraci¨®n de alumnos y ex alumnos, y habr¨ªa mantenido relaciones con penetraci¨®n con decenas de ni?os y ni?as.
Las dos mujeres imputadas, de 29 a?os, podr¨ªan haber sido, a su vez, v¨ªctimas de esta cadena de corrupci¨®n de menores y pasar al cabo de los a?os a ser agresoras. Una de ellas, Mar¨ªa Jos¨¦ G. P., es la actual pareja de Torres Baena y entr¨® en la escuela siendo preadolescente. Tambi¨¦n fue alumna desde peque?a otra de las monitoras imputadas, Ivonne G. H. Ambas karatekas participaron en un reportaje en la revista Intervi¨² en octubre de 2007 en el que aparec¨ªan desnudas y esculturales junto a otras dos alumnas y profesoras de la escuela, una de ellas campeona del mundo.
El procedimiento judicial est¨¢ en estos momentos bajo secreto de sumario -que las partes esperan que se levante la semana pr¨®xima- en el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 7 de Las Palmas. Los otros dos imputados son los entrenadores Juan Luis B. C. y Jos¨¦ B. P. Hay profesores que han declarado como v¨ªctimas.
Los relatos de los chicos, algunos menores y otros mayores de edad que pasaron por la escuela hace 10 o 20 a?os, son parecidos. Una chica de 26 que entr¨® a los 15 en la academia dice que tuvo relaciones consentidas con otros menores, pero que se vio obligada a mantenerlas con Fernando, Mar¨ªa Jos¨¦ e Ivonne. "Hab¨ªa que hacerlo", dice. Fernando, supuestamente, era el que decid¨ªa con qui¨¦n ten¨ªa que estar cada uno. "Y el premio era acostarse con ¨¦l". Un menor afirma, seg¨²n fuentes conocedoras del caso, que el director desde el principio le dijo que el sexo era "algo natural" y que a los 10 a?os empez¨® a iniciarlo con besos y felaciones. A los 11 a?os ya tuvo sexo completo con las dos imputadas, seg¨²n su versi¨®n. "Dec¨ªan que las relaciones eran buenas para el k¨¢rate". Otro chico relata que Fernando le dijo que le iba a hacer "el mejor regalo", que fue poder acostarse con la hermosa Mar¨ªa Jos¨¦, su pareja.
Algunos alumnos hablan de felaciones y penetraciones anales y vaginales. Otros -los menos- s¨®lo de tocamientos. Uno de los chicos asegura que se neg¨® a mantener relaciones sexuales, que fue marginado y que acab¨® dejando la escuela. Casi todos dicen que se acostaron, aparte de con el director y monitores, con un mont¨®n de alumnos; a veces libremente y otras incitados por alguno de los imputados.
El gimnasio Torres Baena, cerrado en estos momentos, estaba en un barrio c¨¦ntrico de Las Palmas y cerca de tres institutos. Los monitores iban captando alumnos de las escuelas, menores que ve¨ªan con posibilidades de llegar a ser buenos deportistas. Algunos de los alumnos han llegado a ser campeones de Europa y del mundo en su especialidad.
Aparte de los entrenamientos en el gimnasio, Fernando organizaba concentraciones de fin de semana y de verano en su casa de Playa de Vargas, un pueblo cercano al aeropuerto de Las Palmas, a una media hora de la capital. El director tiene dos casas comunicadas por el jard¨ªn trasero en la urbanizaci¨®n El Ed¨¦n, cerca del mar y entre palmeras. All¨ª los alumnos entrenaban y viv¨ªan. ?se era el lugar en el que, seg¨²n las presuntas v¨ªctimas, se propiciaba ese modo de vida centrado en el sexo y el k¨¢rate.
Uno de los vecinos de Playa de Vargas que conoce a Torres Baena desde hace m¨¢s de 20 a?os duda de la versi¨®n de los alumnos: "Conozco a Fernando de toda la vida y mis hijos, ya mayores, han estado en esa casa muchas veces. Nunca han visto nada raro. Por otro lado, ?c¨®mo es posible que durante 20 a?os todos hayan guardado silencio? Si fuera cierto, alguien habr¨ªa dicho algo; se habr¨ªa sabido antes".
Otra vecina, sin embargo, asegura que sus hijos, que frecuentaron la casa cuando eran adolescentes, ve¨ªan revistas y pel¨ªculas pornogr¨¢ficas al alcance de los ni?os y que ella ve¨ªa a las ni?as ba?¨¢ndose medio desnudas en la piscina. "No s¨¦, yo pensaba que era un ambiente de mucho libertinaje y que los ni?os hac¨ªan lo que quer¨ªan entre ellos. Una hija de Fernando se qued¨® embarazada a los 16 a?os de otro alumno del k¨¢rate. Pero no imagin¨¦ que los adultos tambi¨¦n participaran, la verdad". Torres Baena estuvo casado antes de conocer a Mar¨ªa Jos¨¦, y tiene tres hijos de su ex esposa.
La investigaci¨®n judicial tendr¨¢ que concluir qu¨¦ pasaba en la casa de Playa Vargas, en el altillo del gimnasio de Las Palmas y en los otros lugares en los que, seg¨²n los alumnos, los imputados les ense?aban desde muy peque?os, a algunos con 9 y 10 a?os, a ser expertos amantes.
"Ha estado con m¨¢s de 100 ni?os"
"Fernando ha estado con m¨¢s de 100 ni?os", asegura una de las presuntas v¨ªctimas, que conoce al imputado desde hace una d¨¦cada. Un menor, muy peque?o, relata as¨ª su corta experiencia en el gimnasio Torres Baena: "Entrenaba con Fernando. Era cari?oso". Despu¨¦s explica que el director, Mar¨ªa Jos¨¦ e Ivonne le chupaban el pene y que ¨¦l le ten¨ªa que hacer felaciones a Fernando.
La polic¨ªa hizo un llamamiento ciudadano una vez abierta la investigaci¨®n para que las v¨ªctimas pudieran ir a declarar. Por eso se hicieron p¨²blicas las detenciones. Aparte de los menores que entrenaban ahora en el centro, algunos adultos en la treintena tambi¨¦n acudieron al llamamiento para contar lo que les hab¨ªa sucedido a?os atr¨¢s.
Los testimonios coinciden en una cosa: Fernando Torres Baena ejerce y ejerci¨® una notable influencia en los chavales a los que entrenaba, entre los que despertaba un profundo respeto y tambi¨¦n miedo.
El miedo es la raz¨®n que aducen para no haber hablado antes. Los alumnos lo admiraban; una menor que asegura que mantuvo relaciones sexuales con ¨¦l lo exculpa acto seguido diciendo que fue idea tanto de ella como de ¨¦l.
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