Las memorias obreras de Toxo

Ignacio Fern¨¢ndez Toxo ten¨ªa 19 a?os cuando la polic¨ªa franquista comenz¨® en Ferrol a disparar a ciegas contra los trabajadores de la antigua Baz¨¢n la ma?ana del 10 de marzo de 1972. Negociaban un nuevo convenio para el astillero y la cosa se torci¨®. Los grises llegaron por centenares, tomaron la ciudad y emboscaron a centenares de manifestantes en el barrio de Recimil para darles un escarmiento ejemplar a esos obreros ilustrados que osaban desafiar al r¨¦gimen.

Treinta y ocho a?os despu¨¦s, de pie en el mismo lugar en el que fueron abatidos sus compa?eros Amador Rey y Daniel Niebla, el l¨ªder de CC OO se sum¨® a los actos del D¨ªa da Clase Obreira Galega en su ciudad natal y rememor¨® un pasaje de su historia que marc¨® su futuro sindical. "Aqu¨ª nos par¨® la polic¨ªa y empezaron a disparar indiscriminadamente. Murieron dos e hirieron a m¨¢s de 40", se?al¨®. El azar evit¨® una masacre mayor. Recuerda la bala que se estrell¨® en el pecho de Julio Aneiros -hist¨®rico l¨ªder sindical- que durante semanas se debati¨® entre la vida y la muerte, y se?al¨® el lugar en el que otro compa?ero, ya af¨®nico, se encaram¨® a un cami¨®n llamando a la huelga general.

Con 19 a?os, vio como la polic¨ªa franquista mataba a dos compa?eros "

De la sangre de Amador y Daniel ha salido un pa¨ªs fuerte"

Ese d¨ªa, la polic¨ªa descabez¨® al movimiento obrero ferrolano, encarcelando a todos sus l¨ªderes. Toxo era entonces un jovenc¨ªsimo aprendiz de la Baz¨¢n destinado a ser montador-ajustador, enrolado en la Liga Comunista Revolucionaria (de tendencia trostkista) y acostumbrado a desfilar por la comisar¨ªa por lanzar panfletos, pintar consignas y colocar c¨®cteles motolov contra los intereses de la dictadura.

Por su participaci¨®n en la revuelta del 72, fue despedido, arrestado y huy¨® tras pasar por el penal coru?¨¦s. Durante los ¨²ltimos a?os del franquismo vivi¨® en la clandestinidad y se refugi¨® en el anonimato de un nombre falso, respondiendo como ?ngel Luna Gonz¨¢lez. "De la sangre de Amador y Daniel, de la etapa m¨¢s dura de la historia de Espa?a, ha salido un pa¨ªs fuerte y una democracia avanzada", manifest¨®. "Es un d¨ªa para el recuerdo de lo que no debe volver a pasar".

El l¨ªder sindical hizo malabarismos con su agenda y cogi¨® dos aviones en la misma ma?ana para asistir a la ofrenda floral que el Ayuntamiento ferrolano deposit¨® delante del monumento Dez do Marzal, que recuerda a los dos obreros ca¨ªdos en un tiroteo que combat¨ªan con piedras. Unas trescientas personas, entre pol¨ªticos y sindicalistas ferrolanos de distinta filiaci¨®n, rodearon el monolito para entonar el himno gallego, que s¨®lo Toxo y otros pocos corearon hasta la ¨²ltima estrofa.

El secretario general de Comisiones Obreras se?al¨® que el segundo acto de la tragedia del 72 tiene forma de c¨¢ncer silencioso llamado asbestosis y que en los ¨²ltimos a?os ya se ha cobrado la vida de decenas de trabajadores de los astilleros de la r¨ªa ferrolana.

Una de esas vidas truncadas de forma prematura fue la de Manuel Amor Deus, hist¨®rico sindicalista ferrolano y primer secretario de CC OO en Galicia, fallecido en 2007. Tres a?os despu¨¦s, recibi¨® el reconocimiento de la ciudad en forma de plaza p¨²blica en Esteiro, su barrio natal, frente a una de las puertas del astillero al que dedic¨® su vida. Su hijo Germ¨¢n descubri¨® la placa que honra al "trabajador, sindicalista comprometido, luchador antifascista, comunista de convicci¨®n y so?ador de un porvenir emancipado".

Ignacio Toxo convirti¨® el homenaje a Amor Deus, su amigo y compa?ero de batallas, en un reconocimiento a todo el movimiento obrero de la r¨ªa y a los que han sucumbido a la lacra del amianto. Este material cancer¨ªgeno se emple¨® durante d¨¦cadas como aislante en la construcci¨®n naval. Sus fibras inhaladas durante a?os de trabajo sin protecci¨®n colonizan y estrangulan los pulmones.

Toxo lament¨® la p¨¦rdida personal de "un mont¨®n de amigos" y confes¨® sus temores ante "lo que puede venir". "La sociedad est¨¢ obligada a reparar esta situaci¨®n que aflora con virulencia en Ferrol", proclam¨®, una ciudad donde los afectados por la asbestosis ya se cuentan por miles.El l¨ªder sindical rompi¨® una lanza en favor del juez Baltasar Garz¨®n "perseguido por su actitud en defensa de la memoria hist¨®rica de este pa¨ªs" y aprovech¨® para recriminar a la ciudad que haya tardado tantas d¨¦cadas en "reconciliarse con su pasado para tener gestos generosos". Y apel¨® a su condici¨®n de "ciudad obrera" para que se sobreponga a la crisis haciendo frente com¨²n.

Las manifestaciones que se celebraron por la tarde reunieron a 4.000 personas en Ferrol, 3.000 covocadas por CC OO y 1.000 por la CIG. En Vigo, 2.000 personas desfilaron por la calle, mientras que en A Coru?a hubo 500 asistentes, seg¨²n la Polic¨ªa Local.