Detenido un proxeneta por ordenar el asesinato de una prostituta en Brasil

Un asesino a sueldo mat¨® en Brasilia a Leticia Peres, de 31 a?os, en marzo de 2009. Ella hab¨ªa sido durante varios a?os prostituta en Espa?a, donde denunci¨® al due?o de un burdel en Tarragona por imponerle condiciones esclavistas. Volvi¨® a su pa¨ªs porque ten¨ªa miedo; dec¨ªa recibir constantes amenazas del hombre al que denunci¨®. Cuando el sicario fue detenido por la polic¨ªa brasile?a, confes¨® que el crimen fue encargado en nombre de un espa?ol que ten¨ªa problemas con la justicia por culpa de Peres, como cont¨® EL PA?S el 29 de noviembre. Tras meses de investigaci¨®n, la polic¨ªa detuvo ayer en Tarragona a Miguel Arufe, de 41 a?os, como sospechoso de inducci¨®n del asesinato de Leticia. En Brasil, el fiscal del caso ya lo hab¨ªa se?alado p¨²blicamente. Se le acusa tambi¨¦n de delitos de prostituci¨®n forzada, blanqueo de capitales y asociaci¨®n il¨ªcita.

Leticia Peres, brasile?a, muri¨® en su pa¨ªs a manos de un mat¨®n

Al explotador le ped¨ªan 28 a?os de c¨¢rcel por las acusaciones de ella

Junto a Arufe, la Polic¨ªa detuvo ayer a otras 22 personas relacionadas con la red de explotaci¨®n sexual y tr¨¢fico de mujeres asentada en Tarragona y Barcelona. Los agentes desmantelaron casi 20 locales, en su mayor¨ªa pisos dedicados a vender servicios sexuales. Se registr¨® incluso un barco en Melilla, propiedad de uno de los detenidos. La operaci¨®n policial se arm¨® con el principal objetivo de hallar pistas que incriminaran a Arufe como inductor del asesinato, seg¨²n revelaron fuentes pr¨®ximas al caso. La Jefatura Superior de Polic¨ªa declin¨® comentar la investigaci¨®n, que sigue abierta y bajo secreto de sumario.

La trama internacional se asent¨® en el centro de Tarragona a finales de los noventa y ha extendido sus contactos por Brasil y Europa del Este. La agresividad de la red, que ofrec¨ªa servicios sexuales 24 horas al d¨ªa por s¨®lo 25 euros, propici¨® su expansi¨®n a Barcelona, Reus, Sabadell, Tortosa y Vilanova i la Geltr¨². Los registros realizados en estas localidades permitieron la liberaci¨®n de una treintena de mujeres que se prostitu¨ªan bajo las ¨®rdenes de la trama. La mayor¨ªa proceden de Suram¨¦rica y de pa¨ªses de Europa del Este y se hallan en situaci¨®n irregular.

El Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 5 de Tarragona, que dirige el caso, conf¨ªa en que los relatos de las mujeres sirvan para incriminar a la red. Se trata del mismo juzgado que instruy¨® la causa denunciada por Peres a?os atr¨¢s. Entonces no impuso medidas preventivas como el cierre de los locales o la prisi¨®n preventiva de los miembros de la red, pese a que al testimonio de Leticia se unieron los de otras siete mujeres que relataban hechos similares. Los imputados siguieron en libertad y sus burdeles abiertos durante cinco a?os m¨¢s. Hasta ayer.

La red se nutr¨ªa de mujeres captadas en todo el pa¨ªs con una intensa rotaci¨®n entre los distintos locales de la trama. La mayor¨ªa pasaba un m¨¢ximo de tres semanas en el piso que se les asignaba y sufr¨ªa condiciones abusivas. Eran obligadas a hacer hasta 40 servicios sexuales al d¨ªa y apenas pod¨ªan salir del piso. Las multaban si rechazaban a un cliente, sal¨ªan a comer sin autorizaci¨®n o si dorm¨ªan m¨¢s de lo estipulado.

El juzgado abri¨® un procedimiento tras la declaraci¨®n de Leticia y sus compa?eras e imput¨® a Miguel Arufe; a su socia, Carolina Jim¨¦nez; a tres encargadas de los burdeles, extranjeras; a un responsable de los pisos, Juan Jos¨¦ Gallardo; y a dos lituanos, Ramaz Mukhigulashvili y Virginijus Gustis. El fiscal pidi¨® el archivo de las actuaciones respecto de estos tres ¨²ltimos por falta de pruebas, pero ahora han sido de nuevo detenidos por la Polic¨ªa. Para Arufe y Jim¨¦nez solicit¨® 28 a?os de c¨¢rcel por proxenetismo. El caso estaba pendiente de que se se?alara fecha para el juicio.

Cuando la polic¨ªa supo del asesinato de Leticia, reabri¨® la investigaci¨®n. Se intervinieron los tel¨¦fonos de los sospechosos y se buscaron nuevas pruebas contra la red de prostituci¨®n. Las mujeres que all¨ª trabajan relataban hace unos meses a este diario historias parecidas a la de Leticia.

Los detenidos pasar¨¢n a disposici¨®n judicial probablemente el mi¨¦rcoles. "No entendemos las acusaciones de incitaci¨®n al homicidio, porque no hay pruebas", defendi¨® ayer Tom¨¤s Gilabert, letrado del presunto l¨ªder de la trama. Allegados de Peres celebraron a medias el golpe policial. "La mejor noticia tras a?os de amenazas y la tragedia de Leticia", se?al¨® una ex pareja sentimental de la fallecida, que lament¨® la lenta desarticulaci¨®n de la red.