Sarkozy mantiene su pol¨ªtica de reformas pese al batacazo electoral
El presidente anuncia una nueva ley de pensiones y la prohibici¨®n del 'burka'
Tres d¨ªas despu¨¦s de su derrota electoral, Nicolas Sarkozy habl¨® y despej¨® el enigma. Despu¨¦s de reunirse con su nuevo Gobierno, ligeramente retocado con nuevas adquisiciones destinadas a contentar a su familia pol¨ªtica, el presidente de la Rep¨²blica Francesa se present¨® ayer delante de los periodistas y en una alocuci¨®n de 15 minutos le¨ªda, estudiada, televisada, poblada de sus acostumbradas expresiones grandilocuentes y sin que mediaran preguntas, asegur¨® que, a pesar del hundimiento en las urnas y la victoria de la izquierda, mantendr¨¢ la pol¨ªtica y las reformas econ¨®micas por las que fue elegido por los franceses en 2007.
Y lanz¨® mensajes con destinatarios claros: a los agricultores y ganaderos, que han sufrido en los ¨²ltimos a?os el desplome de los precios de venta, sobre todo en la leche, a los que asegur¨® defender aunque tenga que enfrentarse a la mism¨ªsima Uni¨®n Europea: "Ir¨¦ hasta la crisis con Europa si se tiende a la destrucci¨®n de la Pol¨ªtica Agr¨ªcola Com¨²n, no dejar¨¦ morir la agricultura francesa".
El El¨ªseo trata de recuperar el voto perdido entre los agricultores
Tambi¨¦n se refiri¨® a los que reclaman m¨¢s seguridad en colegios y campos de f¨²tbol, a los que prometi¨® resultados: "Los que esperan en esto una reacci¨®n de mi parte no saldr¨¢n decepcionados". Y a los partidarios de prohibir el velo integral para las mujeres musulmanas en las ciudades y pueblos franceses, a los que anunci¨® una ley pr¨®xima elaborada por el Gobierno.
En una palabra: Sarkozy no se dirigi¨® a los que votaron en masa a la izquierda el domingo, entreg¨¢ndoles 23 de las 26 regiones francesas y m¨¢s de un 54,6% de los votos, sino a los que considera suyos, a los que se quedaron en casa (la abstenci¨®n lleg¨® a un 48,1%) o le abandonaron para engordar el gran porcentaje del Frente Nacional, que alcanz¨® casi un 10%.
"Me elegisteis para terminar con un retraso. Por eso iniciamos un periodo de reformas. Hay quienes piensan que esas medidas no se notan, pero es debido a que estamos atravesando una crisis mundial. Yo comprendo su impaciencia. Pero no se puede cambiar el rumbo por una cita electoral. Parar ahora equivaldr¨ªa a arruinar los esfuerzos hechos", manifest¨® Sarkozy.
En 2007, el actual jefe del Estado se entroniz¨® con un eslogan liberal y clarificador: Trabajar m¨¢s para ganar m¨¢s. Y se aplic¨® a ello: reform¨® la ley para no gravar a los empresarios y empleados que no estuvieran de acuerdo con la jornada laboral de las 35 horas; estableci¨® un "escudo fiscal" destinado a que nadie (pero sobre todo los que m¨¢s ganaban, a los que iba destinada la ley) pagara m¨¢s del 50% del sueldo; decidi¨® recortar el n¨²mero de funcionarios para adelgazar el peso y el coste del Estado, etc¨¦tera.
Ahora, cuando Francia empieza, aunque a rastras, a salir de la crisis, con un crecimiento previsto para este a?o del 1,6%, un paro del 10% que a¨²n sube a raz¨®n de un 0,1% cada mes, y despu¨¦s del batacazo electoral del domingo, Sarkozy asegura que su deber es "escuchar el mensaje lanzado por los electores".
A su juicio, eso consiste en no dar golpes de tim¨®n: no subir los impuestos, esto es, mantener el "escudo fiscal"; "aligerar las cargas a empresas y trabajadores"; mantener las reformas econ¨®micas y abordar nuevas (en oto?o se modificar¨¢n las pensiones), y aparcar una tasa ecol¨®gica, la "tasa carbono", de la que muchos industriales y empresarios y su propia formaci¨®n parlamentaria de centro-derecha echaban pestes. A este respecto, los dirigentes ecologistas denunciaron ayer la, a su juicio, hipocres¨ªa y falta de principios de Sarkozy, al defender, hace meses, un impuesto ecol¨®gico "para atraerse votos" y luego abandonarlo al comprobar que la idea no ha dado mucho resultado.
La izquierda, en general, fue muy dura con Sarkozy. Le acusaron de sordera y de indiferencia al resultado de las elecciones, de afirmar que escucha pero sin cambiar nada, de volver al mismo discurso de hace tres a?os y, sobre todo, de pensar m¨¢s en su propia formaci¨®n que en un pa¨ªs que sale de la crisis con muchos costurones a cuestas.
Jean-Christophe Cambadlis, diputado socialista, asegur¨® a la cadena de televisi¨®n LCI: "Es una simple operaci¨®n de reconquista del electorado de derecha. Busca eso m¨¢s que restablecer la competitividad internacional de Francia".
Trabajar m¨¢s a?os para jubilarse
Hay una reforma clave e ineludible que Francia afrontar¨¢ antes de que termine el a?o, que ha condicionado la ¨²ltima crisis de Gobierno y que va a condicionar la vida pol¨ªtica desde ahora hasta el oto?o: la reforma de las pensiones. A mediados de febrero, Sarkozy ya avis¨® de que ten¨ªa pensado acometer el asunto en oto?o: en septiembre, el Gobierno enviar¨¢ a la Asamblea Nacional una nueva ley con los cambios.
Actualmente, los trabajadores franceses se pueden jubilar a los 60 a?os (una de las edades m¨¢s tempranas en Europa). Ahora bien, para que obtengan la pensi¨®n m¨¢xima a la que por ley tienen derecho, deben haber cotizado durante 40 a?os. Esto explica que, en realidad, la edad media de jubilaci¨®n en Francia suba a los 62 a?os.
Pero, seg¨²n los c¨¢lculos del Ministerio de Econom¨ªa franc¨¦s, dados el envejecimiento de la poblaci¨®n y la mayor esperanza de vida, esto ya no es viable. O no va a ser viable muy pronto. La ministra de Econom¨ªa, Christine Lagarde, asegur¨® hace dos semanas a este peri¨®dico que con una deuda p¨²blica que este a?o trepar¨¢ hasta el 87% y un d¨¦ficit que coquetea con el 8,2%, la reforma es ineludible, casi urgente y que todos los par¨¢metros pueden moverse y bailar excepto el de la cuant¨ªa del importe que se cobra y se cobrar¨¢, que permanecer¨¢ inamovible por orden expresa del presidente Sarkozy. Todo apunta a que el Gobierno propondr¨¢ retrasar la edad legal en dos a?os, hasta los 62, pero los sindicatos lo rechazan de plano.
Ayer, el jefe del Estado franc¨¦s asegur¨® que para defender las pensiones es necesaria esta reforma, que no pretende imponerla por la fuerza, que est¨¢ dispuesto a negociar, pero que en septiembre ser¨¢ un hecho.
El peque?o pero sintom¨¢tico retoque gubernamental hecho p¨²blico el lunes vino condicionado tambi¨¦n por esta reforma. El ex ministro de Trabajo Xavier Darcos, se vio de repente desautorizado para llevarla a cabo dado el nefasto resultado que obtuvo en la regi¨®n de Aquitania, donde se presentaba como cabeza de lista. Su sucesor, Eric Woerth, ex ministro del Presupuesto, con experiencia a la hora de negociar con los sindicatos, ser¨¢ ahora el encargado de pilotarla. Ya hay medios de comunicaci¨®n que sugieren que, si la lleva a buen puerto, gozar¨¢ de posibilidades como para convertirse en el pr¨®ximo primer ministro.
De momento los sindicatos le dieron el martes un aviso de lo que le espera: una huelga general, no muy seguida pero sintom¨¢tica, que no ser¨¢ la ¨²ltima en esta primavera francesa caliente.
Gasto en pensiones
- El gasto p¨²blico en pensiones en Francia representa un 12,4% del producto interior bruto (PIB), frente al 7,2% de media de los pa¨ªses de la OCDE. Ese nivel s¨®lo se ve superado en Italia (14% del PIB) y Austria (12,6%).
- La esperanza de vida en Francia es de casi 81 a?os, mientras la media de la OCDE es de casi 79.
- Los ingresos medios de un pensionista en Francia son de 31.000 euros, frente a la media de 28.600 de la OCDE.
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