La abstenci¨®n marca los comicios regionales en Italia
"Espero que el odio no prevalezca sobre el amor", declar¨® Berlusconi tras votar
Italia vivi¨® ayer la primera de las dos jornadas de elecciones regionales, y los primeros datos de afluencia a las urnas confirmaron la anunciada ca¨ªda de la participaci¨®n: a las 19.00, se registraba un descenso de siete puntos respecto a la cita de hace cinco a?os. A esa hora hab¨ªa votado el 35,1% del censo, compuesto por 41 millones de electores, mientras que, en 2005, la participaci¨®n alcanzaba a esa hora el 42,7%. Las proyecciones auguran una ca¨ªda final de la participaci¨®n cercana a 10 puntos. En 2005 vot¨® en las regionales el 70,5% del censo.
Las urnas, que cerraron anoche a las 22.00, reabrir¨¢n hoy desde las siete de la ma?ana hasta las tres de la tarde; los resultados se conocer¨¢n a ¨²ltima hora de la tarde. Los datos provisionales de participaci¨®n permit¨ªan deducir un aumento general del descontento. La abstenci¨®n crec¨ªa en las 13 regiones en juego, pero se notaba mucho menos en el pr¨®spero norte que en el olvidado sur del pa¨ªs.
La participaci¨®n cay¨® siete puntos con respecto a 2005 en el primer d¨ªa de voto
En L'Aquila, la ciudad destruida por el terremoto del a?o pasado, cuya reconstrucci¨®n se convirti¨® durante meses en el argumento favorito de Silvio Berlusconi, y donde se vota esta vez s¨®lo para renovar el Gobierno provincial, la afluencia a las urnas se hundi¨® casi un 50% respecto a la cita anterior. Calabria, la regi¨®n m¨¢s pobre y feudo pol¨ªtico de la 'Ndrangheta, registraba la afluencia m¨¢s baja del pa¨ªs, junto a Campania, Basilicata y Pulla. Mientras Emilia Roma?a, donde naci¨® el l¨ªder de la oposici¨®n, Pierluigi Bersani, registraba la asistencia m¨¢s alta, cercana al 40%.
Los sondeos han previsto que votar¨¢n entre uno y dos millones de electores menos que en 2005, aunque la cifra final depender¨¢ del ¨²ltimo impulso del gran n¨²mero de indecisos. Las encuestas han anunciado tambi¨¦n un castigo al Pueblo de la Libertad de Silvio Berlusconi, lo que explicar¨ªa la fren¨¦tica actividad televisiva del magnate milan¨¦s en los ¨²ltimos d¨ªas de campa?a. El sur sancionar¨ªa al primer ministro absteni¨¦ndose, mientras en el norte, vaticinan los sondeos, la Liga recoger¨ªa muchos votos disidentes del socio de Gobierno.
Las regiones decisivas, Lacio y Piamonte, que se anuncian muy ajustadas y pueden inclinar la balanza general hacia uno u otro lado, registraron retrocesos mayores que la media. En el Lacio, donde el PDL present¨® sus listas fuera de plazo, la ca¨ªda era de 10 puntos, una de las mayores del pa¨ªs.
Marina Russo, una profesora de espa?ol de 43 a?os residente en Roma, decidi¨® ir a votar en su colegio del barrio de Testaccio a las siete de la tarde. "Hay que votar", explicaba, "para cumplir con el deber c¨ªvico, para poner orden en esta regi¨®n ca¨®tica, y para mandar un mensaje a Berlusconi. ?l y su partido han jugado sucio con las listas electorales".
Russo eligi¨® a Emma Bonino, la candidata radical adoptada por el Partido Democr¨¢tico, ante la candidata de la derecha, Renata Polverini. ?Por qu¨¦? "Polverini significa corrupci¨®n e ignorancia. Bonino es seria, honesta y digna. No ha gastado dinero en publicidad, no ha atacado a su rival... Es un ejemplo de moralidad y normalidad. Y una persona laica: hay que lanzar un recado a la Iglesia, recordarle que el aborto es un derecho que no se toca".
Berlusconi, que deposit¨® su voto en Mil¨¢n, aprovech¨® la presencia de periodistas para vulnerar otro poco las normas electorales, tras la invasi¨®n de los telediarios del viernes, repitiendo el estribillo del amor y el odio. "Espero que el odio no prevalezca sobre el amor", declar¨®, y a?adi¨®: "Hay que votar que si no nos encontramos a un Di Pietro", en referencia al l¨ªder de Italia de los Valores.
Si el PDL pierde las regionales, hab¨ªa advertido al cerrar la campa?a el primer ministro, el resultado no tendr¨¢ "ning¨²n efecto" sobre su Gobierno. En su editorial dominical, Eugenio Scalfari explicaba ayer en La Repubblica cu¨¢les ser¨¢n esos efectos: "Si Berlusconi pierde, el fin de r¨¨gne sufrir¨¢ una fuerte aceleraci¨®n; si gana, los empujones hacia el destrozo constitucional por un r¨¦gimen autoritario ser¨¢n devastadores".
El partido de Santoro
LUCIA MAGI | Bolonia
Una mega pantalla, bares ambulantes, carreteras cortadas, camiones de televisiones y radios, enjambres de periodistas y mucha, much¨ªsima gente. El jueves pasado, la explanada frente al polideportivo Pala Dozza, en el centro de Bolonia, parec¨ªa esperar un concierto de los Rolling Stones o un derbi entre los equipos locales de baloncesto. Al rev¨¦s, fue escenario de la emisi¨®n de Anno Zero, tertulia pol¨ªtica conducida en la segunda cadena p¨²blica por el periodista y presentador Michele Santoro, suspendida por el Consejo de Administraci¨®n de la RAI durante toda la campa?a electoral, en nombre del respeto a la pluralidad.
Exiliado de la televisi¨®n estatal, Santoro marc¨® su gol en Bolonia. Con el apoyo de los sindicados de periodistas y otros conductores de debates pol¨ªticos silenciados, organiz¨® RAI per una notte, un programa especial que se ha transformado en una etapa m¨¢s de aquella revuelta democr¨¢tica contra la censura, la impunidad y las leyes cortadas a medida del presidente del Ejecutivo, Silvio Berlusconi. 125.000 visitas en internet, 6.000 en Bolonia, millares frente a megapantallas en las plazas. Un movimiento civil que mueve sus pasos en la web y no pierde ocasi¨®n para manifestar su contrariada exasperaci¨®n, no s¨®lo hacia la mayor¨ªa de Gobierno, si no tambi¨¦n - y en igual medida - hacia una oposici¨®n desubicada y ausente. El vi?etista Vauro cierra la noche con un dibujo: "Encendamos las luces contra la oscuridad de la censura", dice un personaje. Otro replica: "Mejor que no, sino el partido democr¨¢tico no puede seguir durmiendo". La ovaci¨®n es casi una liberaci¨®n.
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