El FBI detiene a nueve extremistas cristianos en EE UU
Los detenidos planeaban atentados para hacer caer el Gobierno de Obama
Nueve militantes de extrema derecha han sido detenidos en una operaci¨®n del FBI en tres Estados contra milicias y grupos cristianos fundamentalistas que planeaban atentados contra polic¨ªas y funcionarios. Esta acci¨®n coincide con un clima de preocupaci¨®n creciente por el tono radical que se ha impuesto en algunos ¨¢mbitos de la pol¨ªtica y los medios de comunicaci¨®n de EE UU.
El fen¨®meno de las milicias populares no es nuevo en el pa¨ªs. Es tan antiguo como la misma revoluci¨®n americana y su legitimidad est¨¢ refrendada en la Constituci¨®n. Las milicias est¨¢n integradas por grupos de ciudadanos que comparten su amor por las armas y su voluntad de mantenerse en permanente alerta por si el pa¨ªs (o las fantas¨ªas que ellos tienen sobre el pa¨ªs) necesitara sus servicios. Su ideolog¨ªa consiste, b¨¢sicamente, en la defensa de la libertad individual frente a cualquier supuesta amenaza procedente del Estado, ya sea un recaudador de impuestos, un agente del censo o un polic¨ªa.
El FBI mantiene a estas milicias bajo observaci¨®n, pero por lo general, aparte de intimidar a los vecinos, no representan un gran peligro. Espor¨¢dicamente, sin embargo, las milicias sirven como escondites para asesinos o como pretexto para serias operaciones de desestabilizaci¨®n. Ya ocurri¨® en 1995, cuando se supo que el autor del atentado de Oklahoma, Timothy McVeigh, hab¨ªa tenido contactos con la Milicia de Michigan, una de las m¨¢s grandes del pa¨ªs.
Y puede volver a ocurrir ahora, un tiempo de gran agitaci¨®n pol¨ªtica en el que, a la elecci¨®n de un negro como presidente, se ha sumado la aparici¨®n de un movimiento ultraconservador, el Tea Party, que impone una oratoria inflamatoria en la oposici¨®n.
Es imposible olvidar, tras las detenciones anunciadas ayer, el t¨ªtulo del mensaje que Sarah Palin publicaba la semana pasada en su p¨¢gina de Facebook: "Recarga" (reload, volver a cargar un arma de fuego).
Tampoco es f¨¢cil separar esta operaci¨®n del FBI de la reciente encuesta que revelaba que una cuarta parte de los votantes del Partido Republicano creen que Obama es el anticristo.
El grupo intervenido por el FBI, precisamente en Michigan, se llama Hutaree y, como se puede leer en su p¨¢gina web, en la que exhiben una foto de sus miembros armados y en traje de camuflaje, sigue al pie de la letra las ense?anzas de la Biblia en pasajes como este: "Creemos que un d¨ªa, como afirma la profec¨ªa, llegar¨¢ un anticristo. Jes¨²s quiere que estemos preparados para defendernos usando nuestras espadas".
Los fiscales acusaron ayer a los detenidos y a su l¨ªder, David Brian Stone, cuyo hijo ha logrado escapar, de "imponer una guerra contra Estados Unidos y oponerse por la fuerza a la autoridad del Gobierno de EE UU".
Hutaree planeaba, seg¨²n la investigaci¨®n, provocar una matanza de polic¨ªas y desencadenar, de esa manera, una cadena de violencia que hiciese caer el poder federal en Washington.
Parecen alucinaciones de un grupo de fan¨¢ticos sin conexi¨®n con la realidad. Y lo ser¨ªan si no hubiera antecedentes graves y si el lenguaje de ese grupo aparentemente terrorista no coincidiese casi milim¨¦tricamente con el que se escucha en las reuniones del Tea Party y en otros actos pol¨ªticos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.