"Con suerte, las adolescentes de dentro de tres a?os no sabr¨¢n qui¨¦n soy"
Hugo Silva llega a la cita con el pelo largo y enmara?ado y con un hermoso mech¨®n de canas. No, no le ha dado por someterse a un cambio radical ni es v¨ªctima de un envejecimiento repentino. El actor, de 32 a?os, luce extensiones y tinte por requisitos de su pr¨®ximo personaje, Antonio P¨¦rez, el secretario de Felipe II y amante de la princesa de ?boli (Ana de Mendoza de la Cerda), cuya historia llevar¨¢ a la peque?a pantalla un telefilme que empieza a rodarse la semana que viene. Pero antes, el actor que un d¨ªa se baj¨® del andamio para inscribirse en una escuela de teatro, el ex heavy por el que suspiran adolescentes y no tan adolescentes, estrena Karabudjan, la nueva apuesta de Antena 3 para el horario estelar que se estrena el pr¨®ximo martes (a las 22.15).
"Karabudjan' es para televisi¨®n, pero ha sido como un rodaje de cine"
Antena 3 y Notro Films (Cuesti¨®n de sexo, La familia Mata) han elegido un formato novedoso para la ficci¨®n, que consta s¨®lo de seis episodios de 70 minutos de duraci¨®n que ya est¨¢n rodados. Para grabarlos el equipo pas¨® cuatro meses en Colombia, rodando en diversas localizaciones: Bogot¨¢, Barranquilla o en el desierto de La Guajira.
Pregunta. ?Qu¨¦ es eso de Karabudjan?
Respuesta. Es la clave de la historia. No se puede desvelar. Es como matrix en Matrix. Si lo explico, destripo la serie.
P. Sabe bien c¨®mo funcionan las series espa?olas. Ha trabajado en Al salir de clase, Paco y Veva o Los hombres de Paco. ?Por qu¨¦ dice que ha sido diferente rodar Karabudjan?
R. La diferencia b¨¢sica es que, al rodarse de una vez, sab¨ªa c¨®mo empezaba mi personaje y c¨®mo iba a acabar. En televisi¨®n casi nunca sabes por d¨®nde va a ir y a veces depende de encuestas con p¨²blico. En ese sentido, Karabudjan, que es para televisi¨®n, ha sido como un rodaje de cine.
P. Se ha rodado con dos c¨¢maras y en exteriores.
R. S¨ª, como en una pel¨ªcula. Los tempos, de hecho, eran id¨¦nticos: se tardaba en iluminar, se repet¨ªa la escena. Y lo mejor: hemos recorrido todo Colombia.
P. Una serie de seis episodios es algo nuevo en un sector en pleno revulsivo.
R. En la tele cada vez somos m¨¢s atrevidos. Para sorprender al p¨²blico se arriesga m¨¢s. Y eso es cojonudo.
P. Tambi¨¦n hay cada vez m¨¢s gente del cine en el sector.
R. No digo que sea por eso, pero tanto en Karabudjan, que dirige Koldo Serra [Bosque de sombras] como en La princesa de ?boli, que dirige Bel¨¦n Mac¨ªas [El patio de mi c¨¢rcel], me estoy encontrando con directores con criterio que imponen su punto de vista, y eso te da seguridad. Un actor necesita que alguien le diga "s¨ª" o "ni de co?a".
P. En Karabudjan es Diego, "un ejecutivo con un turbio pasado".
R. Es un tipo con poder sobre los dem¨¢s y con mucho encanto personal. Es un personaje oscuro, incluso poco humano. Pero a ra¨ªz de la desaparici¨®n de la mejor amiga de su hermana se le revuelve algo dentro y empieza a cambiar poco a poco.
P. Algunas escenas que supuestamente suceden en Madrid se han rodado en Bogot¨¢.
R. Podr¨ªa ser cualquier gran ciudad. Estamos hartos de la t¨ªpica escena de coches dando vueltas en Cibeles para ubicarte en Madrid. Esta serie tiene un aire m¨¢s internacional.
P. ?Hay posibilidad de segunda temporada?
R. No. Est¨¢ cerrada, que yo sepa.
P. ?Qu¨¦ ha supuesto en su carrera Lucas, su personaje en Los hombres de Paco?
R. Bueno, hace tres a?os que dej¨¦ la serie.
P. Como espectador es dif¨ªcil de decir, porque de vez en cuando vuelve a rodar episodios.
R. A Lucas le debo mucho, pero lo dej¨¦ porque me agot¨®. Eso no quiere decir que no le tenga cari?o. A nivel medi¨¢tico me ha disparado. Pero me quedo con lo que he aprendido con actores como Paco Tous, Juan Diego, Adriana Ozores...
P. Lucas le ha convertido en un fen¨®meno de fans.
R. La fama sucede. No es algo que pueda controlar. A veces es inc¨®modo. Eso, a poco que uno se ponga en mi piel, lo entiende. Pero aprendes a llevarla. Tampoco tiene mucha importancia, es algo que va y viene. Con suerte las adolescentes de dentro de tres a?os no sabr¨¢n qui¨¦n soy.
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