Piel suave como la seda

Lo siento por las esteticiennes, pero ya no me ver¨¢n m¨¢s en sus centros de belleza. Llevo un mes probando Lumea, la fotodepiladora casera de Philips, y a¨²n no salgo de mi asombro: es muy f¨¢cil de usar y est¨¢ dando resultados espectaculares en axilas, ingles y piernas. Lucen suaves como la seda en las dos ¨²nicas sesiones realizadas, cada 15 d¨ªas, de momento.

Y lo m¨¢s milagroso: ?sin dolor!

Como la mayor¨ªa de las mujeres he pasado regularmente por la camilla, potro de tortura, del centro de belleza para quitarme el vello de las piernas y, c¨®mo no, de mis zonas ¨ªntimas. El esclavizante ritual, una vez al mes y cada 15 d¨ªas en verano, empez¨® en la adolescencia.

A lo largo de estos a?os he ido probando todo tipo de sistemas (maquinillas de usar y tirar, cera caliente, papeles o cremas depilatorias) y artilugios que la t¨¦cnica a puesto a mi alcance. Sola, con amigas o en centros de est¨¦tica. La ¨²ltima, la depilaci¨®n con l¨¢ser, y la peor, sin duda, la el¨¦ctrica. S¨®lo fui a una sesi¨®n: oler a pollo quemado era desagradable, por no hablar del dolor, aunque me pusieron anestesia local.

Vayamos a Lumea. Detesto los libros de instrucciones, pero en este caso conviene leerlo. La m¨¢quina no sirve para el rostro ni funciona en alg¨²n tipo de piel, color del vello ni -lo siento, pero poco- en hombres. Es, pues, un aparato exclusivo para las mujeres. Lumea tiene un cuadro de mandos para ajustar la intensidad de la luz (cinco grados) y un bot¨®n que, cuando se aprieta, como si fuera el gatillo de una pistola, dispara destellos de luz que producen calor sobre la piel y debilitan la ra¨ªz del vello. T¨¦cnicamente se llama luz pulsada intensa. Es la misma que se emplea profesionalmente, seg¨²n Philips.

Antes de utilizar el aparato por primera vez y cuando se repite la operaci¨®n cada 15 d¨ªas, hay que afeitarse la zona que tratar. Despu¨¦s, simplemente, se empieza a fotodepilar colocando el aparato perpendicularmente sobre la piel. En las axilas es f¨¢cil. Con un par de minutos (25 disparos) para cada una, termina la operaci¨®n. Para las piernas (medias) es m¨¢s largo: 15 minutos (incontables disparos). Ah¨ª va la primera cr¨ªtica. Como tiene poca autonom¨ªa el¨¦ctrica, te quedas con una pierna suave y la otra peluda hasta que se vuelve a cargar el aparato (unas cuatro horas). La zona m¨¢s ¨ªntima, las ingles, es donde la cosa se complica y una termina siendo bastante contorsionista. Pero, lo aseguro, no duele.

Eso s¨ª, segunda cr¨ªtica: aunque Philips dice que no es necesario ponerse gafas protectoras, les recomiendo que al menos cierren los ojos cada vez que disparan Lumea si no quieren terminar deslumbradas.

Producto: Lumea. Empresa: Philips. Precio: 499 euros. Sitio: www.philips.es