Nacha Pop: 20 a?os no es nada
Los miembros de la banda recuerdan a Antonio Vega en la v¨ªspera de su homenaje
El 12 de mayo se cumple un a?o de la muerte de uno de los malditos geniales del pop espa?ol. Antonio Vega (Madrid, 1957-2009) cre¨® decenas de himnos y un estilo personal que sirvi¨® de inspiraci¨®n a bandas que ir¨ªan tras sus pasos y los de Nacha Pop, su formaci¨®n original. Ma?ana, en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid, sus tres compa?eros y todos sus amigos le rendir¨¢n un homenaje en el que 27 artistas interpretar¨¢n sus canciones. EL PA?S ha reunido a los supervivientes de aquel grupo para trazar un retrato de la ¨¦poca y del m¨²sico.
Pregunta. ?Qu¨¦ se ha ido con la muerte de Antonio?
Carlos Brooking. Un amigo con el que compart¨ª muchos a?os. ?ramos una familia, inseparables. Estuvimos 12 a?os tocando desde el colegio.
"Nos separamos para que Antonio reaccionara", recuerda su primo
?ete: "Fallaba en algunos conciertos, pero a la gente le daba igual"
Nacho Garc¨ªa Vega. Y una figura important¨ªsima de la m¨²sica. Los primeros d¨ªas fueron muy duros. Me cost¨® mucho concentrarme en lo que estaba pasando realmente. Le he echado mucho de menos. Y ahora me ha vuelto a salir todo preparando el concierto del viernes.
P. ?Por qu¨¦ cre¨¦is que fue tan especial la movida?
N. G. V. Ven¨ªamos de una ausencia de iniciativas art¨ªsticas. Fue una explosi¨®n. Hoy no se dan las condiciones. Esa ¨¦poca marc¨® muchas cosas de la vida cultural del pa¨ªs a trav¨¦s de varios conceptos: el atrevimiento, la alegr¨ªa, el desparpajo... Ahora todo tiene otro sentido.
C. B. Hab¨ªa grupos para todos los gustos. Las bandas se hab¨ªan basado en la reivindicaci¨®n. Pero empezamos a producir m¨²sica sin m¨¢s connotaciones que ser buena. Y esa fue la caracter¨ªstica de Nacha Pop. Las canciones eran un fin en s¨ª mismas.
P. ?Os arrepent¨ªs de algo?
C. B. Quiz¨¢, pero las circunstancias fueron esas, y hay que ir para adelante. Tuvimos una carrera con un buen balance.
N. G. V. ?ramos los que ¨¦ramos, no me arrepiento.
P. ?Las drogas dejaron un regusto amargo en la banda?
N. G. V. Eso era un caldo de supervivencia que hab¨ªa en ese momento. Pero no determin¨® nuestra carrera.
?ete. Para Antonio era un componente m¨¢s que tambi¨¦n hac¨ªa de ¨¦l lo que era.
N. G. V. Lo que s¨ª hubiera hecho distinto es saborear m¨¢s el momento, disfrutarlo. Pas¨® todo muy r¨¢pido. No nos d¨¢bamos cuenta de lo que suced¨ªa. Pero el sabor que nos qued¨® es bueno.
P. ?C¨®mo era el ambiente en el grupo al principio?
C. B. Fant¨¢stico. Nos reun¨ªamos cada d¨ªa para tocar en el local de ensayo...
?. Un d¨ªa mientras ensay¨¢bamos pas¨® lo de Tejero...
N. G. V. La persona que nos los dijo lo hizo con una sonrisa de oreja a oreja. Se nos pusieron de corbata y nos fuimos a casa.
C. B. Antonio era muy importante. Era un maestro musicalmente y ten¨ªa una personalidad muy atrayente. Muy inteligente y mucho sentido del humor.
?. Era un encantador. Y muy educado. Por eso mandaba el cari?o ante cualquier otra cosa.
C. B. Crecimos juntos, as¨ª que para nosotros era la persona, no el artista que est¨¢ en el altar. Ves como crece, y no te das cuenta de la altura que est¨¢ tomando.
N. G. V. Pero no hab¨ªa jerarqu¨ªa. Eramos un grupo de amigos, como en Uno de los nuestros.
P. ?Y por qu¨¦ se acab¨®?
N. G. V. En parte fue un ultim¨¢tum, bueno, o unas ganas de que Antonio reaccionara ante una forma de vida que nos preocupaba mucho. Pensamos que eso podr¨ªa espolearle un poco.
?. No se pod¨ªa mantener la situaci¨®n as¨ª.
N. G. V. Y la gran preocupaci¨®n era ¨¦l, el amigo. Nos pareci¨® que era una buena opci¨®n para avisarle de que el grupo no pod¨ªa seguir en aquellas condiciones. Nos preocupaba aceptar eso como algo que formaba parte del grupo. Pero no hab¨ªa mal rollo.
?. Una pata cojeaba. Nos ¨ªbamos a meter en una historia de la que hab¨ªa que responder a nivel profesional.
N. G. V. Y ten¨ªamos que responder por ¨¦l. Defendi¨¦ndole. Ten¨ªa implicaciones externas y nos preocupaba. Nos encontramos muy a menudo defendiendo una situaci¨®n que no quer¨ªamos defender.
P. ?Qu¨¦ tal se lo tom¨® ¨¦l?
N. G. V. Pens¨® que en algunos aspectos le est¨¢bamos abandonando, cuando era lo contrario. Luego busc¨® su camino y tom¨® las decisiones en solitario. Y le fue muy bien.
C. B. Llev¨¢bamos ya diez a?os. Necesitas crecer e investigar. Y aunque los cambios producen convulsiones, para Antonio fue una oportunidad.
P. ?Era consciente de la importancia de su obra?
N. G. V. S¨ª. Se fue sabiendo c¨®mo hab¨ªa calado. Pero no le ayud¨® la autocomplacencia. Su p¨²blico le perdon¨® en exceso determinadas cosas. Ve¨ªa que cualquier cosa que hiciera entraba dentro de lo aceptado. Hab¨ªa un ramalazo que nunca me gust¨®, y que hablamos mucho. Le falt¨® presi¨®n.Ten¨ªa demasiado consentimiento.
?. Fallaba en algunos conciertos y a la gente le daba igual. Pero eso tambi¨¦n est¨¢ al alcance de pocos. A Lou Reed le tiramos el equipo por el escenario por hacer chorradas. (Se r¨ªen).
N. G. V. No le llevabas f¨¢cilmente a tu terreno. Lo cual no quita que no hiciera cosas por los dem¨¢s.
P. ?Era realmente "ese chico triste y solitario"?
N. G. V. Sobre todo, introvertido.
?. Era un espectador. Un gran observador. Luego escrib¨ªa lo que escrib¨ªa, claro.
N. G. V. Hac¨ªa lo que le daba la gana. No era caprichoso, pero s¨®lo hac¨ªa lo que quer¨ªa. Lo otro ni lo intentaba.
P. ?Y qu¨¦ le interesaba en la ¨²ltima ¨¦poca?
R. Estaba obsesionado con su guitarra. Los ¨²ltimos a?os le ped¨ª que prestara m¨¢s atenci¨®n al Antonio cantante m¨¢s que al guitarrista. No estaba muy por la labor.
P. ?Por qu¨¦ os juntasteis otra vez hace tres a?os? (S¨®lo lo hicieron Nacho y Antonio).
N. G. V. Ten¨ªamos muchas ganas y nos lo estaba pidiendo el p¨²blico. No hab¨ªa motivos para no juntarnos. Fue estupendo. Antonio estuvo muy bien el primer a?o. Pero el segundo se diluy¨® la ilusi¨®n y empez¨® a sentirse inc¨®modo con el rigor de la profesi¨®n. No quer¨ªa alguien al lado dici¨¦ndole qu¨¦ no pod¨ªa hacer.
P. El viernes es la primera vez en 20 a?os que toc¨¢is los tres juntos. ?Qu¨¦ sensaci¨®n hab¨¦is tenido en las pruebas?
N. G. V. De la hostia. Hemos flipado con ?ete, sigue igual que cuando lo dejamos. Carlos y yo nos vemos m¨¢s, pero es un placer volver a tocar con ?ete. He tenido sensaciones que tuve hace 20 a?os. Es lo m¨¢ximo a lo que puedes aspirar. Tiene que ver con la qu¨ªmica de las personas y de la m¨²sica. Es aut¨¦ntico.
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