La salvaci¨®n por el Mundial
N¨¦stor Kirchner aspira a la presidencia de Argentina en 2011 y, para ello, ha decidido ligar su futuro al gran dios del pa¨ªs: el f¨²tbol. Pretende rentabilizar un posible triunfo en Sur¨¢frica de la selecci¨®n de Maradona
Que la selecci¨®n argentina gane la copa mundial de f¨²tbol que comenzar¨¢ el 10 de junio de 2010 en Sur¨¢frica, tal vez sea el ¨²ltimo recurso que le quede a N¨¦stor Kirchner para retener el poder cuando su esposa y ac¨®lita Cristina Fern¨¢ndez deje la presidencia de su pa¨ªs en 2011. Tanto las elecciones legislativas de junio de 2009 como las encuestas recientes, muestran que se ha disipado la popularidad de la que gozaron los Kirchner.
Pero N¨¦stor Kirchner no es pol¨ªtico que baje los brazos. A falta de otras cualidades, nadie le niega su perseverante astucia. Kirchner se pregunt¨®: ?cu¨¢l es la pasi¨®n m¨¢s fuerte de mis compatriotas? No cabe duda, es el f¨²tbol. Y decidi¨® ligar su futuro -desea ser candidato en las presidenciales de octubre de 2011- al gran dios argentino, la pelota, ese icono al que Alfredo Di St¨¦fano ha dedicado una estatua de bronce, emplazada en el jard¨ªn de su casa, sobre una leyenda que reza: "Gracias, vieja".
La selecci¨®n ganadora ser¨¢ recibida por su Gobierno como Roma recib¨ªa a sus h¨¦roes
Argentina teme que la megaloman¨ªa de Maradona anule el genio de Messi
Al terminar el a?o 2001, tras una fenomenal crisis econ¨®mica, el presidente Fernando de la R¨²a huy¨® en helic¨®ptero de la Casa Rosada. Miles de argentinos, a quienes se les hab¨ªan confiscado los ahorros, clamaban en las calles. El marasmo que sigui¨® fue aprovechado por N¨¦stor Kirchner para llegar al poder. Se trataba de un oscuro pol¨ªtico que integraba el tropel de peronistas que acompa?¨® a Carlos Menem durante la d¨¦cada 1989-1999.
Tras gobernar entre 2003 y 2007, Kirchner, a dedo, design¨® sucesora a su propia esposa Cristina Fern¨¢ndez. Los argentinos, a¨²n espantados por la proximidad del infierno, la votaron. Pero los Kirchner cometieron en 2008 un error garrafal: aumentaron los impuestos a las exportaciones agr¨ªcolas, medida rechazada por los productores. La confrontaci¨®n entre el Gobierno y los agrarios fue manejada por los Kirchner con esquem¨¢tica rigidez. El pa¨ªs se polariz¨®. Desde entonces, baj¨® en picada la aceptaci¨®n popular hacia la pareja gobernante, como en la Argentina se conoce a los Kirchner, pues es vox populi que ¨¦l maneja el poder, aunque en la actualidad s¨®lo ocupe una banca de diputado y la jefatura interina del Partido Justicialista.
En los comicios de 2009 el Gobierno perdi¨® en los principales centros urbanos y sobre todo en el gran feudo peronista, la provincia de Buenos Aires. A pesar de los recursos volcados por el Gobierno en publicidad directa e indirecta, un advenedizo, el empresario Francisco de Narv¨¢ez, quien s¨®lo se dedica a la pol¨ªtica desde el a?o 2000, derrot¨® al propio Kirchner en su basti¨®n, el llamado conurbano, un cintur¨®n de comunas que rodean a la capital federal, y en el cual se api?an 11 millones de habitantes.
Pero a Kirchner no le falta inventiva. Su especialidad son los golpes de efecto que, a la manera de las carambolas del billar, permiten alcanzar diversos objetivos con una sola tacada. Esa tacada result¨® el f¨²tbol.
La maniobra tuvo dos partes. En octubre de 2008, la Asociaci¨®n del F¨²tbol Argentino (AFA) ech¨® al entrenador de la selecci¨®n Alfio Coco Basile y lo sustituy¨® por Diego Armando Maradona. El cambio ten¨ªa un fundamento futbol¨ªstico, pues la selecci¨®n de Basile, desde el comienzo de las eliminatorias para el Mundial de Sur¨¢frica, jugaba mal. Pero tambi¨¦n hab¨ªa un designio pol¨ªtico. Maradona, a pesar de que muchos de sus desplantes y monoman¨ªas han cansado a no pocos argentinos, a¨²n conserva el status de ¨ªdolo popular.
Con la designaci¨®n de Maradona, un notorio kirchnerista, el Gobierno se apropiaba de un eventual triunfo futbol¨ªstico para engrosar su patrimonio pol¨ªtico. Los planes estuvieron a punto de irse a pique porque la blanquiceleste s¨®lo consigui¨® clasificarse para Sur¨¢frica de manera angustiosa.
En agosto de 2009 se llev¨® a cabo el segundo cap¨ªtulo del plan kirchnerista: Julio Grondona -un dirigente que hace 31 a?os preside la AFA- rescindi¨® el contrato que ligaba a la Asociaci¨®n con la empresa Torneos y Competencias, ¨²nica autorizada para emitir im¨¢genes televisivas de los partidos por los campeonatos Apertura y Clausura. De inmediato, la AFA concedi¨® al estatal Canal 7 el derecho de difundir f¨²tbol en directo. Desde 1991, Torneos y Competencias ten¨ªa la exclusividad para transmitir algunos partidos a trav¨¦s de la televisi¨®n de pago. Los domingos a las diez de la noche, por un canal de la televisi¨®n abierta, se brindaba un resumen de la fecha, con la filmaci¨®n de todos los goles. Esa emisi¨®n, llamada F¨²tbol de primera, fue durante a?os una de las m¨¢s populares de la televisi¨®n argentina.
?Qu¨¦ ganaba Kirchner apropi¨¢ndose del f¨²tbol televisado? Torneos y Competencias pertenece al Grupo Clar¨ªn, un multimedios cuya cabeza es el peri¨®dico matutino hom¨®nimo, el de mayor circulaci¨®n en la Argentina. Kirchner, por razones a¨²n oscuras para la opini¨®n p¨²blica, lo ha erigido en su principal antagonista. Al privar al Grupo Clar¨ªn de la exclusividad de transmitir f¨²tbol, el Gobierno no s¨®lo golpe¨® las finanzas del multimedio, sino que transfiri¨® varios millones de telespectadores hacia el canal del Estado. Lo que los aficionados argentinos s¨®lo pod¨ªamos ver a las diez de la noche y por un canal privado, ahora podemos verlo en directo a cualquier hora. Y no s¨®lo los goles... tambi¨¦n los partidos completos, ya que el Canal 7 transmite los 10 partidos de primera divisi¨®n, que se juegan a lo largo de la semana, por la tarde o por la noche.
El Gobierno adujo que tales emisiones no le costar¨ªan un centavo al Estado, ya que los derechos que cobra la AFA, estimados en 720 millones de pesos (unos 138 millones de euros) ser¨ªan cubiertos por publicidad comercial. Sin embargo, ello no se ha concretado y los 10 partidos s¨®lo van acompa?ados por una profusa propaganda del Gobierno. Los relatores, mientras narran el partido, recalcan una y otra vez que se trata de un logro extraordinario: el f¨²tbol para todos. Seg¨²n el Gobierno, se trata de una revoluci¨®n, ya que el f¨²tbol est¨¢ ahora al alcance del pueblo y ya no es como antes un privilegio de los ricos. Por su parte, la oposici¨®n acus¨® al Gobierno por un gasto dispendioso en un pa¨ªs donde uno de cada cinco ni?os padece hambre y 2.920 de ellos mueren cada a?o por desnutrici¨®n.
Para los argentinos el f¨²tbol es un tel¨®n de fondo omnipresente, que multiplica al infinito la definici¨®n de Rafael S¨¢nchez Ferlosio: "F¨²tbol es sustituci¨®n de todo designio por una expectativa recurrente, rotatoria, sin fin". Para hacer lugar al f¨²tbol, el canal estatal confin¨® sus pocas emisiones culturales a horarios inveros¨ªmiles. Por ejemplo: el programa de libros Los siete locos, creado hace m¨¢s de 20 a?os por Tom¨¢s Eloy Mart¨ªnez, se emite la noche del domingo al lunes... ?a las dos de la madrugada!
Con estos ingredientes suplementarios, el despliegue de madurez futbol¨ªstica que est¨¢ mostrando Lionel Messi ha provocado un inter¨¦s enorme en la Argentina. Ahora, todas las miradas est¨¢n puestas en la relaci¨®n Messi-Maradona. Se teme que la megaloman¨ªa de Maradona, espante las genialidades de la Pulga. Esto ya pas¨® con Riquelme, el mejor futbolista que hoy trota por las canchas de la Argentina. El veterano Riquelme, cansado del egocentrismo de Maradona, renunci¨® a la selecci¨®n.
El Mundial de Sur¨¢frica, ese gran Teatro del Mundo que concitar¨¢ a cientos, miles de millones de telespectadores, ser¨¢ por un mes el centro de la atenci¨®n universal. No hay gobernante en el mundo que no persiga las hilachas de esa centralidad. Y la selecci¨®n ganadora del Mundial -sea ella la que fuere- ser¨¢ recibida por su gobierno como recib¨ªa Roma a los h¨¦roes que volv¨ªan coronados por sus triunfos en las guerras imperiales.
Pero para los Kirchner en las canchas de Sur¨¢frica estar¨¢ en juego mucho m¨¢s que un resultado deportivo.
?lvaro Ab¨®s es escritor argentino.
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