Despacio, entramos en Horta
Un tranquilo paseo por el barrio de Barcelona, entre jardines, parques y mas¨ªas medievales. Caminamos desde la plaza de Ibiza en busca de locales como Bodega Massana y Quimet
Retiro terap¨¦utico y vacacional de burgueses e intelectuales en el siglo XIX, a Horta hay que ir a prop¨®sito. Situado en el extremo noreste de Barcelona, no se uni¨® a la ciudad hasta 1904. Recogido en s¨ª mismo, el barrio conserva un aire rural poco frecuente en las grandes urbes. Mas¨ªas, casas unifamiliares de principios de siglo, jardines y peque?os huertos conviven en armon¨ªa con buenos restaurantes y bares musicales. Horta tiene otro ritmo.
La plaza de Ibiza es el centro neur¨¢lgico del barrio. Antigua plaza del mercado (el de hoy est¨¢ a menos de 100 metros, en la vecina calle del Tajo), tambi¨¦n ha sido parada final de los medios de transporte -diligencias, tranv¨ªas, autobuses y metro- que hist¨®ricamente han unido Horta con la lejana Barcelona. Aqu¨ª se halla uno de los bares emblem¨¢ticos del barrio: el Quimet. Abierto desde 1927, es un lugar de encuentro por excelencia de los hortenses. Son famosos sus bocadillos de chapata. Otro buen sitio para picar algo es el Frankfurt, un bar de dos pisos con vistas a la plaza por el que, seg¨²n atestiguan las paredes, han pasado actores espa?oles como Gabino Diego, Juan Echanove o Santiago Segura.
Cerca de all¨ª est¨¢ la calle de las Santes Creus, que lleva a la plaza del mismo nombre. Con sus antiguas casas bajas, esta calle merecer¨ªa la pena s¨®lo por la Bodega Massana. Barricas a la entrada, botas de piel a la venta, parroquianos y ambiente de familiaridad para beber un buen vaso de vino de Priorato seco por 50 c¨¦ntimos de euro. Se puede comprar vino a granel (se venden denominaciones como Gandesa, Pened¨¨s o Priorato a menos de un euro y medio el litro) o tomar algo en una de las mesas cubiertas con mantel de hule. Al final de la calle se encuentra la plaza. Si cae la noche sobre Horta, aqu¨ª est¨¢ el Samba Brasil, bar de copas con discoteca y un patio interior en forma de invernadero adornado con plantas.
El ocio del barrio ha encontrado su estandarte en el Louise Se Va, un peque?o bar musical de luz tenue que tiene su ¨¢lter ego nocturno en el Louise Se Va Nit, una discoteca de rock and roll que algunos jueves organiza conciertos de rumba fusi¨®n en la plaza de Bacard¨ª. Esta plaza, que vive como escondida, es similar a otras de la ciudad, como las m¨¢s conocidas del barrio de Gr¨¤cia. Durante el d¨ªa es el lugar perfecto para sentarse en un banco y observar a los transe¨²ntes. Es f¨¢cil que entren ganas de quedarse a vivir en Horta.
Volviendo a la plaza de Ibiza, pero est¨¢ vez hacia arriba, encontramos varias calles peatonales con algunas de las instituciones hist¨®ricas del barrio. En la calle de Pere Pau est¨¢ el Ateneu Hortenc, fundado en 1864 y en la actualidad reducto para el ocio de los vecinos de m¨¢s edad. Muy cerca, el Foment Hortenc ofrece representaciones teatrales desde principios del siglo pasado. Su aspecto adusto esconde una joya: el bar-restaurante. Regentado desde hace poco por un italiano, destaca la relaci¨®n calidad / precio del men¨², pero no tanto como la pasta que hace Andrea: exquisita.
Magnolios y olivos
Siguiendo el paseo por la calle d'Horta, llaman la atenci¨®n los jardines privados con mandarinos, magnolios y olivos que nos hacen olvidar que estamos en Barcelona. Tambi¨¦n se conserva alg¨²n colmado tradicional, reliquia de la vida de anta?o. La calle de Campoamor ofrece una colecci¨®n, con estilos arquitect¨®nicos variados, de las casas de veraneo que los barceloneses pudientes se constru¨ªan hace un siglo en esta zona, antes boscosa, situada en las estribaciones de la sierra de Collserola. Como en otros lugares catalanes hist¨®ricos de veraneo, muchas construcciones est¨¢n coronadas por peque?as torres. Algunas de ellas son hoy residencias de la tercera edad o centros escolares. Otras, lujosas viviendas en las que no faltan los cuidados jardines y los coches caros aparcados en la puerta.
Las mas¨ªas medievales son, sin embargo, las edificaciones emblem¨¢ticas de Horta. Quedan ocho en todo el barrio. No hay que perderse Can Cortada, en la avenida del Estatut, con sus arcos de piedra y ventanales g¨®ticos, y cuyas estructuras m¨¢s viejas datan del siglo XI. Desde 1994 es un restaurante que combina la cocina tradicional catalana con platos m¨¢s modernos. Siguiendo el paseo de Maragall, a unos 400 metros de la plaza de Ibiza, se encuentra la otra joya de origen medieval del barrio: Can Fargas. Construida a partir de una torre de defensa, est¨¢ bastante bien conservada. Tiene dos jardines, uno del siglo XVIII y otro del XIX, con esculturas y bancos de piedra rodeados por cipreses. El Ayuntamiento de Barcelona la ha comprado y pronto ser¨¢ la sede de la escuela de m¨²sica del distrito.
El deslumbrante parque del Laberinto forma parte del conjunto de parques hist¨®ricos de la ciudad y contiene el jard¨ªn m¨¢s antiguo de Barcelona, un espacio neocl¨¢sico del siglo XVIII. Perteneci¨® al marqu¨¦s de Llupi¨¤ -su medio abandonada residencia puede verse a la entrada-, pero desde la d¨¦cada de 1970 es propiedad del Ayuntamiento. Es un lugar silencioso y poco frecuentado, de gran sensualidad, plasmada en la Isla del Amor o la estatua de Eros. Rodea a la estatua un laberinto vegetal de cipreses. Cuenta tambi¨¦n con un jard¨ªn rom¨¢ntico del siglo XIX y es el mejor lugar del barrio para la reflexi¨®n o los escarceos amorosos, como explica uno de sus jardineros. La entrada es gratis los mi¨¦rcoles y los domingos.
M¨¢s propuestas e informaci¨®n en la Gu¨ªa de Barcelona
Gu¨ªa
Visitas
Parque del Laberinto de Horta. Paseo de Castanyers, 1-17. Horta. En abril abre de 10.00 a 20.00; de mayo a septiembre hasta las 21.00. Entrada, 2,17 euros; mi¨¦rcoles y domingos, entrada gratuita. Visita guiada, 1,80 euros.
? Can Cortada (934 27 23 15). Avenida del Estatut de Catalunya, s/n. Horta. Precio medio para comer, unos 40 euros por persona.
Informaci¨®n
? Oficina de Turismo de Barcelona (933 68 97 00).
? La web de Barcelona (www.bcn.es) tiene un espacio dedicado al barrio de Horta-Guinard¨®.
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