"Najwa no es ni ser¨¢ la Juana de Arco del Islam"
Iv¨¢n Jim¨¦nez-Aybar, de 38 a?os, libra su segunda batalla por el derecho de las mujeres musulmanas a llevar el hiyab (pa?uelo isl¨¢mico). Este abogado zaragozano defiende a Najwa Malha, la alumna de 16 a?os expulsada de clase en un instituto de Pozuelo de Alarc¨®n (Madrid) por colocarse el velo en la cabeza. Hace tres a?os consigui¨® que las mujeres musulmanas pudieran aparecer en su DNI con hiyab. Este profesor de Derecho Eclesi¨¢stico del Estado en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona -especialista en Islam, que estudia desde hace m¨¢s de 20 a?os- reflexiona sobre d¨®nde poner el l¨ªmite (burka, niqab, poligamia), advierte de un posible efecto contagio y pide que nadie convierta a Najwa en un s¨ªmbolo.
"Quien quiera liderar la causa del 'hiyab' en la escuela que d¨¦ un paso al frente"
Pregunta. ?C¨®mo est¨¢ Najwa?
Respuesta. Pese a sus 16 a?os, tiene una madurez que sorprende. Le ha marcado ser la mayor de cuatro hermanos. Est¨¢ pendiente de las buenas formas, es una persona que dif¨ªcilmente te va a alterar la paz social en una clase. La vi tranquila, dentro de las circunstancias, y muy consciente de qu¨¦ se jugaba. Me qued¨® muy claro que la decisi¨®n de llevar hiyab fue voluntaria y consciente por su parte. La decisi¨®n de llevarlo fue suya y tambi¨¦n la decisi¨®n de cambiar de centro escolar. No se le ha presionado.
P. ?Cambiar de centro ha sido la mejor soluci¨®n?
R. Hay un principio b¨¢sico en derecho: primero cumples y despu¨¦s, en su caso, recurres. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n de la Comunidad de Madrid adopt¨® una resoluci¨®n administrativa recurrible en alzada. Desde un punto de vista jur¨ªdico, Najwa hizo bien. Ha dado un ejemplo que puede servir para callar a quienes dicen que los musulmanes en Espa?a se rigen por la sharia o por su estatuto personal.
P. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n considera que no se han vulnerado ning¨²n derecho de Najwa.
R. S¨ª que se han vulnerado. El art¨ªculo 32 del reglamento del centro dif¨ªcilmente se puede aplicar al caso del hiyab. Y otro art¨ªculo que no se ha mencionado es el que hace referencia a los criterios necesarios para imponer sanciones, como que nunca se haga atentando contra la dignidad de los alumnos. El derecho a la libertad religiosa, seg¨²n el Tribunal Constitucional, se fundamenta en la dignidad de la persona. La consejer¨ªa ha adoptado una sanci¨®n que vulnera la dignidad de Najwa.
P. Usted consigui¨® que las musulmanas pudieran llevar el hiyab en sus fotos del DNI.
R. El caso qued¨® entre las comunidades musulmanas para las que yo trabajaba y la Administraci¨®n. Llevamos la cuesti¨®n al Defensor del Pueblo, que emiti¨® un informe favorable. Quiz¨¢ en este caso, como no hubo presi¨®n social, el Ministerio de Interior cambi¨® su criterio y permiti¨® fotos con hiyab mientras dejaran al descubierto el ¨®valo de la cara. Quiz¨¢ si se hubiese mediatizado m¨¢s el asunto, la presi¨®n social habr¨ªa hecho que se metieran dentro del debate por qu¨¦ el hiyab s¨ª y no una gorra en el DNI.
P. ?Cree que ganar¨¢ el caso de Najwa?
R. Hay que diferenciar. En el caso de Najwa se aplica una norma de r¨¦gimen interno que ha llevado a que se le proh¨ªba el uso del hiyab y a que cambie de centro. Es un caso concreto. Otra cuesti¨®n es la causa del hiyab en la escuela p¨²blica. Najwa es la persona legitimada para recurrir la decisi¨®n de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n, pero no es ni quiere ser la Juana de Arco del Islam. Si alguna comunidad musulmana quiere seguir con la causa del hiyab en la escuela, que d¨¦ un paso adelante. Esa es una causa que no tienen por qu¨¦ protagonizar ella y sus padres. Despu¨¦s de lo ocurrido, lo que piden es tranquilidad.
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