Reactivar Europa

La presentaci¨®n del informe del grupo de reflexi¨®n para el futuro de la Uni¨®n Europea presidido por Felipe Gonz¨¢lez no puede ser m¨¢s oportuna. M¨¢s all¨¢ de la coincidencia festiva de que hoy, 9 de mayo, D¨ªa de Europa, se celebre el 60? aniversario de la Declaraci¨®n Schuman para impulsar la creaci¨®n de una Europa unida, la reflexi¨®n de los sabios aterriza en un momento de turbulencias econ¨®micas sin precedentes que ponen a prueba la fortaleza de la UE y muestran descarnadamente todas sus debilidades. Es una circunstancia virtualmente capaz de hacer de la necesidad virtud y de lograr que las recetas propuestas no caigan en saco roto. Llega, adem¨¢s, en plena presidencia espa?ola, lo que, unido al nombre de Gonz¨¢lez, es un doble s¨ªmbolo de la apreciada y reconocida aportaci¨®n espa?ola a la arquitectura europea.

Sobre un diagn¨®stico sombr¨ªo por realista ante la p¨¦rdida de relevancia del Viejo Continente y las amenazas que se ciernen sobre el modelo social europeo, el informe de los sabios propone recetas que no por conocidas son menos importantes. Al contrario. La virtud de las mismas radica en retornar a lo fundamental, en ese llamamiento a refundar la Uni¨®n consolidando sus cimientos para afrontar los desaf¨ªos a los que est¨¢ expuesta. Ese retorno a lo esencial se propone como una tarea urgente e ineludible y requiere una recuperaci¨®n de objetivos que la miop¨ªa de los l¨ªderes europeos ha llevado a abandonar en el camino. As¨ª, el documento apuesta por reducir la dependencia energ¨¦tica, promover una inmigraci¨®n ordenada con pol¨ªticas de integraci¨®n o recuperar el alma europea que sustentaba el proyecto de la Constituci¨®n europea y que el Tratado de Lisboa dej¨® atr¨¢s, fomentando un mayor sentimiento de pertenencia entre los ciudadanos. En definitiva, m¨¢s Europa para que todos salgamos ganando.

Se echan en falta propuestas concretas para mejorar la toma de decisiones, lo que probablemente es una ausencia calculada para evitar nuevas reformas de los tratados. Es, en todo caso, una debilidad subsanable en la medida en que los mandatarios ya est¨¢n tomando conciencia estos mismos d¨ªas de la necesidad de evitar errores como la lentitud demostrada para afrontar la crisis griega y los consiguientes embates contra el euro. La reacci¨®n del Eurogrupo ya es una buena se?al en este sentido.