Lo pi de Cadaqu¨¦s
"Mon cor estima un arbre! M¨¦s vell que l'olivera/ m¨¦s poder¨®s que el roure, m¨¦s verd que el taronger/ conserva de ses fulles l'eterna primavera/ i lluita amb les ventades que atupen la ribera,/ com un gegant guerrer". As¨ª cantaba Costa i Llobera, el poeta rom¨¢ntico mallorqu¨ªn, al pino que, solitario, desafiaba al cielo y la escasa tierra en los acantilados de Formentor. El que me ha robado a m¨ª el coraz¨®n, aunque noble y hermoso, no est¨¢ en posici¨®n tan m¨ªtica. Se encuentra en el jard¨ªn particular de una casa situada justo en las escaleras de acceso a la peque?a playa de Sa Cueta, en Cadaqu¨¦s, lo que permite disfrutarlo, de lejos, en toda su protegida majestuosidad.
Este invierno tambi¨¦n ¨¦l ha tenido que luchar contra los temporales que han asolado la ribera. Sigue en pie, afortunadamente, pero ha resultado malherido. Las hojas tienen menos brillo, como si estuvieran alica¨ªdas, y una rama rota cuelga ya seca sobre una copa plagada de pi?as viejas y grises. Otras dos ramas est¨¢n tocadas gravemente y una tercera, que directamente cay¨® por el peso de la nieve, ha dejado como testigo mudo el mu?¨®n punzante de la madera fresca amenazando a los gorriones y las t¨®rtolas que sol¨ªan anidar a su sombra.
No ha sido la ¨²nica v¨ªctima. Muchos de sus cong¨¦neres han ca¨ªdo abatidos por el viento o, sobre todo, la nieve traicionera de marzo. Los restos de la masacre son visibles en todas partes, pero sobrecogen a¨²n m¨¢s cuando, en la subida de las curvas de Cadaqu¨¦s o en el camino de Cala Nans, a veces se confunden con los de los incendios m¨¢s o menos recientes que han ido tintando de negro los troncos de los escasos ¨¢rboles supervivientes. Da miedo pensar lo que puede pasar este verano con tanta le?a seca as¨ª desparramada.
A¨²n no ha acabado la limpieza de los destrozos que provocaron los temporales de 2009 y se asume que las 120.000 hect¨¢reas afectadas por los de este a?o tampoco estar¨¢n restauradas cuando aprieten los calores. ?L¨¢stima que ahora ya no est¨¦n los tiempos para reeditar un Plan E en el que en lugar de cemento se planten pinos como los que mon cor estima!
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