Obama abronca a las petroleras por el vertido

El presidente americano dio ayer rienda suelta a un enfado que puede que lleve acumulando cerca de un mes. Si empez¨® su comparecencia ante la prensa con su habitual calma y su tono did¨¢ctico, Obama fue encendi¨¦ndose para acabar abroncando a las compa?¨ªas petroleras, a las que acus¨® de haber dado "un espect¨¢culo rid¨ªculo" durante las audiencias llevadas a cabo estos d¨ªas en el Congreso para investigar el vertido de crudo en el golfo de M¨¦xico. "Se tiene que acabar eso de se?alarse unos a otros con el dedo", dijo. "Hay suficientes responsabilidades por asumir para todos".

En aquellas comparecencias, BP acus¨® a la compa?¨ªa que operaba la plataforma, Transocean, de no haber tenido en cuenta "lecturas an¨®malas" de la presi¨®n del oleoducto; Transocean replic¨® que BP tom¨® decisiones err¨®neas y busca las causas del suceso en los trabajos de cimentaci¨®n encargados a la empresa Halliburton. Esta dijo que sigui¨® las ¨®rdenes de BP y que Transocean empez¨® a trabajar antes de que el cemento cuajara.

La mancha podr¨ªa ser mayor de lo que ha reconocido la Administraci¨®n

Obama anunci¨® el fin de la "¨ªntima" relaci¨®n entre las petroleras y las agencias gubernamentales reguladoras y comunic¨® que hab¨ªa ordenado una profunda revisi¨®n de las directivas que dicta la agencia estatal que controla las perforaciones. "Ya no va a valer con confiar, vamos a verificar" que lo que afirman las compa?¨ªas -que desarrollan sus perforaciones con seguridad- sea cierto. "Conf¨ªa pero verifica", ese ser¨¢ el lema a partir de ahora.

Obama estaba muy enfadado, y asumi¨® que el pueblo norteamericano, tambi¨¦n. Dijo que no cre¨ªa que nadie estuviera contento con lo que se hab¨ªa visto y escuchado esta semana en el Capitolio. "Desde luego yo no lo estoy". Fuentes cercanas a la Casa Blanca especulaban estos d¨ªas con que la paciencia del presidente se estaba agotando, que estaba frustrado y decepcionado con el desarrollo de los acontecimientos. Ayer fue manifiesto. Los periodistas que asist¨ªan a la comparecencia se miraban sorprendidos ante el brote de mal humor que mostr¨® el presidente -no casa con su car¨¢cter-.

Distintas informaciones de la prensa norteamericana hablan de que la mancha de crudo en el golfo de M¨¦xico podr¨ªa ser mucho m¨¢s grande de lo que reconoce la Administraci¨®n -5.000 barriles de crudo al d¨ªa-. El presidente dijo que, debido a que no hay manera de llegar hasta el foco del vertido, habr¨¢ que esperar para saber qu¨¦ pasa.

Mientras el presidente se despachaba, robots submarinos trataban de conectar un tubo al conducto que derrama petr¨®leo en un nuevo intento por reducir la fuga que ha dejado escapar m¨¢s de 17,6 millones de litros de crudo. El objetivo es que ese tubo succione el crudo hacia un buque cisterna.