El Palau pagaba 50.000 euros a la familia Millet para gastos dom¨¦sticos

La casa era grande y no reparaba en gastos. El Palau de la M¨²sica ha estado pagando durante a?os entre 40.000 y 50.000 euros mensuales para sufragar todo tipo de gastos dom¨¦sticos del saqueador confeso F¨¨lix Millet y de las familias de sus dos hijas. Ese es el dato que ayer revel¨® en el Juzgado de Instrucci¨®n 30 de Barcelona la que fue secretaria de Millet durante 35 a?os, Elisabet Barber¨¤, y que declar¨® como testigo en la causa que investiga el juez Juli Solaz.

El dinero con el que se efectuaban esos pagos proced¨ªa de las cuentas del Palau, que se nutre de subvenciones p¨²blicas y de las aportaciones de los socios, aunque Barber¨¤ explic¨® ayer que desconoc¨ªa ese extremo. Lo que s¨ª declar¨® sin dudas, seg¨²n explicaron fuentes judiciales, es que Millet era la persona que introduc¨ªa el dinero en met¨¢lico en la caja fuerte del Palau y que de all¨ª lo extra¨ªa ella cada mes para preparar a su jefe los sobres correspondientes con las cantidades que este le hab¨ªa indicado.

Uno de esos pagos mensuales eran 3.000 euros y ten¨ªa como beneficiaria a Marta Vall¨¨s, esposa de Millet y propietaria de numerosos bienes, que tambi¨¦n est¨¢ imputada en la causa. Laila y Clara, las dos hijas del saqueador, tambi¨¦n percibieron esos sobres mensuales, aunque la testigo no precis¨® la cantidad que ten¨ªan asignada. Con esos sobres tambi¨¦n se pag¨® en dinero negro al jardinero, al servicio dom¨¦stico de la casa de Millet y de las hijas y las guarder¨ªas de los nietos.Barber¨¤ explic¨® tambi¨¦n que esos pagos realizados con sobres eran anotados por ella misma en un libro de contabilidad, aunque se ignora su paradero. "Yo no lo he visto", confes¨® ayer Pau Molins, abogado defensor de Millet. Es el segundo libro que puede ser prueba inculpatoria del que se conoce su existencia, pero que no est¨¢ a disposici¨®n de la justicia. El primero es el libro de actas en el que el Orfe¨® aprob¨® en 1990 una cl¨¢usula que permit¨ªa a Millet cobrar el 10% del presupuesto si la entidad registraba super¨¢vit y que permiti¨® que el saqueador y Jordi Montull, su mano derecha, se embolsaran m¨¢s de un mill¨®n de euros como incentivos en 2008. Cuando los estatutos del Orfe¨® se escrituraron y se llevaron al Departamento de Justicia de la Generalitat se suprimi¨® esa cl¨¢usula.

Barber¨¤, que era secretaria de la Fundaci¨®n y del Consorcio del Palau, cobraba cerca de 6.000 euros mensuales y fue despedida por los nuevos gestores. La justicia declar¨® improcedente la medida y orden¨® su readmisi¨®n o que se la indemnizara con m¨¢s de 109.000 euros, de la que habr¨ªa que detraer los 56.000 que ya le pag¨® el Palau al ser despedida. La sentencia est¨¢ recurrida.

Ayer por la ma?ana se esperaba que tambi¨¦n declarase en el juzgado Salvador Oller, representante de las empresas de propaganda electoral New Letter y Letter Graphic, dos sociedades que trabajaron para CiU y que facturaron casi un mill¨®n de euros al Palau entre 2006 y 2009 por buzoneo de actividades. El testigo no acudi¨® porque no fue posible notificarle la citaci¨®n en el domicilio que facilit¨® Pedro Luis Rodr¨ªguez cuando declar¨® el pasado 23 de abril en nombre de esas sociedades y declin¨® cualquier responsabilidad en esos pagos. El juez se enter¨® ayer de que no se hab¨ªa encontrado al testigo y hasta que no tenga constancia oficial de la citaci¨®n fallida no decidir¨¢ nada, seg¨²n explicaron fuentes judiciales.

Quien s¨ª acudi¨® fue Manuel Parra, administrador de Hispart, una empresa de montajes audiovisuales que, junto con su matriz, Stereo Rent, tambi¨¦n ha trabajado en campa?as electorales para CiU. Como si de una calculada estrategia de defensa se tratara, Parra coincidi¨® con la explicaci¨®n que ofreci¨® al juez hace un mes Pedro Luis Rodr¨ªguez y declar¨® que su empresa no pod¨ªa aportar los presupuestos realizados para el Palau porque el sistema inform¨¢tico est¨¢ configurado de tal manera que cuando se aceptan los trabajos solo quedan las facturas.

Las sospechas de los nuevos gestores, que fueron los que descubrieron esos pagos, es que las empresas cobraron por trabajos no realizados y de dif¨ªcil justificaci¨®n. Se trata de siete facturas por m¨¢s de 600.000 euros giradas entre 2005 y 2009 y que, como en el caso de las empresas de propaganda electoral, se pactaron con Jordi Montull.