63 empresas, 11.714 empleos

Las 66 personas que trabajan para el INCAVI, dependiente de la Generalitat, pasar¨¢n a ser empleados del IRTA. Los 350 trabajadores de Adigsa ser¨¢n empleados de la Agencia Catalana de Vivienda, de nueva creaci¨®n. Y varios entes ser¨¢n vendidos. En total, la reorganizaci¨®n de empresas p¨²blicas, consorcios y fundaciones que el Gobierno anunci¨® ayer afectar¨¢ de alg¨²n modo a 11.714 personas, que trabajan en las mismas seg¨²n se desprende de los presupuestos de la Generalitat de 2010.

Hasta 63 organismos desaparecer¨¢n. Muchos ser¨¢n absorbidos o hermanados con otros mayores. Pero unos pocos simplemente ser¨¢n disueltos o vendidos. Cerca de una veintena, la mayor¨ªa fundaciones, correr¨¢n esta suerte. Aunque s¨®lo nueve de ellos tienen actualmente empleados, seg¨²n se desprende de los presupuestos, hay en total 2.657 personas que no se sabe d¨®nde recalar¨¢n. Como los ocho empleados del Instituto Universitario de Estudios Europeos, los cinco de la Agencia de Patrocinio y Mecenazgo y los m¨¢s de 2.100 del Consorcio de Prevenci¨®n y Salud de Terrassa, que seg¨²n el plan de "racionalizaci¨®n de la Administraci¨®n" sufrir¨¢ "desvinculaci¨®n o venta" por parte de la Generalitat. El consejero de Econom¨ªa y Finanzas, Antoni Castells, no especific¨® ayer ni el n¨²mero de afectados ni si habr¨ªa despidos.

La medida pretende poner orden en la amalgama de organismos dependientes de la Generalitat, que ascienden en total a 254. El ahorro de las fusiones y las disoluciones no ser¨¢ muy significativo. Seg¨²n Castells, se acercar¨¢ a los 25 millones de euros. Lo que no sobra, dijo, son departamentos. O al menos, se?al¨®, "no tiene sentido eliminarlos a pocos meses de las elecciones auton¨®micas".