La ONU da un ultim¨¢tum a Ir¨¢n
El Consejo de Seguridad aprueba las sanciones con el voto en contra de Brasil y Turqu¨ªa y la abstenci¨®n de L¨ªbano - Obama: "Las aplicaremos en¨¦rgicamente"
Rota toda posibilidad de di¨¢logo, frustradas todas las esperanzas de negociaci¨®n surgidas con la llegada de Barack Obama a la presidencia de Estados Unidos, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprob¨® ayer lo que el propio Obama calific¨® como "las m¨¢s duras sanciones que jam¨¢s ha soportado Ir¨¢n". Se trata del ¨²ltimo pelda?o que puede subir la comunidad internacional para evitar un conflicto militar por el programa nuclear de ese pa¨ªs.
Obama asegur¨® que "estas sanciones no cierran la puerta a la diplomacia", que son reversibles, que Ir¨¢n puede librarse de ellas si detiene sus ambiciones nucleares o pone sus proyectos a disposici¨®n del Organismo Internacional para la Energ¨ªa At¨®mica (OIEA). Pero Ir¨¢n, que ya ha insistido en m¨²ltiples ocasiones en que no lo har¨¢, repiti¨® ayer que todas las negociaciones sobre este asunto quedan congeladas, y lo que cabe esperar a partir de ahora es un incremento de la tensi¨®n hasta un punto imprevisible y dram¨¢tico.
Es dif¨ªcil que las medidas fuercen a Teher¨¢n a dejar su proyecto nuclear
La comunidad internacional pretende evitar un conflicto militar
La votaci¨®n respondi¨® a lo esperado de acuerdo con los movimientos diplom¨¢ticos de los ¨²ltimos d¨ªas. Un total de 12 pa¨ªses votaron a favor, entre ellos las cinco grandes potencias con derecho a veto. Se abstuvo L¨ªbano, donde la organizaci¨®n chi¨ª Hezbol¨¢, aliada de Ir¨¢n, tiene un gran peso. Votaron en contra Brasil y Turqu¨ªa, que hicieron juntos un ¨²ltimo y fracasado intento de soluci¨®n pac¨ªfica de las diferencias sobre el programa nuclear.
La actitud de estos dos pa¨ªses, dos potencias regionales emergentes, ha perjudicado la imagen de unidad que pretend¨ªa ofrecer la comunidad internacional en esta crisis y ha decepcionado particularmente a Estados Unidos, que ha tratado desesperadamente de estrechar la colaboraci¨®n con ellos. Con su voto negativo, Brasil y Turqu¨ªa incursionan en un terreno pol¨ªtico desconocido y, probablemente, de significativas consecuencias.
La resoluci¨®n ha tenido, no obstante, el apoyo de las principales potencias occidentales, de China y de Rusia, los dos ¨²nicos pa¨ªses que realmente pod¨ªan salvar a Ir¨¢n del aislamiento que estas sanciones representan.
El paquete aprobado no incluye el veto a las transacciones petroleras iran¨ªes y, por tanto, se le deja a Ir¨¢n ox¨ªgeno m¨¢s que suficiente para seguir alimentando su econom¨ªa. Pero se ampl¨ªa el embargo de armas hasta el punto de que Ir¨¢n solo podr¨¢ adquirirlas clandestinamente; se incorpora el derecho a inspeccionar barcos y aviones iran¨ªes si se sospecha de su carga y se ampl¨ªa a m¨¢s de 40 el n¨²mero de empresas y bancos con los que se proh¨ªbe hacer negocios.
Esta ¨²ltima sanci¨®n, aparentemente la que m¨¢s inquieta a Ir¨¢n, est¨¢ destinada a cortar las v¨ªas de abastecimiento que utilizan algunas instituciones del r¨¦gimen iran¨ª vinculadas al programa nuclear, especialmente los Guardias de la Revoluci¨®n, un ¨®rgano al que se cree responsable de los principales proyectos.
Aunque Obama dijo ayer que su pa¨ªs "se asegurar¨¢ de que las sanciones sean en¨¦rgicamente aplicadas", es dif¨ªcil que sirvan por s¨ª mismas para forzar a Ir¨¢n a renunciar a sus planes de nuclearizaci¨®n. Ir¨¢n ha desarrollado durante los cuatro a?os en los que ha estado sometido a otras sanciones internacionales, m¨¦todos suficientes para sortear el bloqueo sin graves da?os. Es m¨¢s, las sanciones pueden radicalizar el r¨¦gimen, estimular el patriotismo y acelerar el programa nuclear.
Todos esos son riesgos evidentes que la comunidad internacional corre con este paso. Pero las sanciones pueden tambi¨¦n agudizar la ruptura entre un Gobierno iran¨ª sin el carisma de otros tiempos y una poblaci¨®n de tradici¨®n cosmopolita que ya ha empezado a culpar a sus autoridades de los males del pa¨ªs.
Ese es el c¨¢lculo de Estados Unidos. "Si Ir¨¢n no temiera las sanciones no habr¨ªa hecho tanto por impedirlas", declar¨® ayer la embajadora norteamericana en la ONU, Susan Rice. Efectivamente, el r¨¦gimen iran¨ª se embarc¨® primero en negociaciones con el llamado P5+1 (los cinco grandes del Consejo de Seguridad m¨¢s Alemania) que obligaron al entonces responsable diplom¨¢tico de la Uni¨®n Europea Javier Solana a continuos viajes de ida y vuelta a Teher¨¢n con ofertas y contraofertas siempre frustradas. Intent¨® despu¨¦s el plan de Turqu¨ªa y Brasil. Y, seg¨²n ha trascendido, ayer mismo present¨® en Viena, horas antes del comienzo de los debates en Nueva York, una nueva propuesta a Estados Unidos, Rusia y Francia, con alguna concesi¨®n respecto al acuerdo con Brasil y Turqu¨ªa pero lejos a¨²n de las expectativas de la ONU.
"Este d¨ªa no era inevitable", manifest¨® Obama, "si ha llegado es porque Ir¨¢n se ha negado reiteradamente a colaborar con el OIEA y a cumplir con las resoluciones del Consejo de Seguridad". El ¨²ltimo informe del OIEA afirma que Ir¨¢n est¨¢ acelerando la producci¨®n de uranio enriquecido.
?Cu¨¢ndo estar¨¢ en capacidad de fabricar una bomba at¨®mica y cu¨¢nto esperar¨¢n Israel y Estados Unidos para parar el reloj? Esas son las preguntas pendientes tras la aprobaci¨®n de la resoluci¨®n. Si las sanciones no cumplen su objetivo, Washington podr¨ªa intentar reforzarlas con sanciones unilaterales. Pero ser¨ªa muy dif¨ªcil evitar, a medio plazo, una acci¨®n militar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.