"Ya hay dos Iglesias paralelas"

"Su nombramiento fue un tremendo golpe psicol¨®gico porque nuestro obispo Uriarte hab¨ªa vuelto del Vaticano convencido de que su sucesor no ser¨ªa en ning¨²n caso Jos¨¦ Ignacio Munilla. Pens¨¢bamos que el nuevo ser¨ªa espa?ol y tendr¨ªa que aprender euskera, pero and¨¢bamos tranquilos, seguros de que Munilla estaba descartado", recuerda Xabier Andonegi, p¨¢rroco de Lasarte-Oria, uno de los 101 cargos pastorales de la di¨®cesis guipuzcoana que se alzaron contra su jerarqu¨ªa. El nombramiento de Jos¨¦ Ignacio Munilla como obispo de San Sebasti¨¢n abri¨® un cr¨¢ter de irritaci¨®n y desafectos que no ha sido rellenado aunque han pasado ocho meses desde la difusi¨®n de aquella carta suscrita por el 77% de los p¨¢rrocos. Muchos de ellos practican ahora la obediencia debida. En los templos y sacrist¨ªas de la di¨®cesis hoy sigue crepitando aquella frase incendiaria: "Hemos recibido con dolor y profunda inquietud la designaci¨®n", que produjo entonces estupor, agitar de p¨²rpuras cardenalicias y reprobaci¨®n en los ¨¢mbitos de la Iglesia oficial.

"Munilla no es la persona id¨®nea para desempe?ar el cargo de obispo"

"Esas txapelas ensoberbecidas que quieren otorgarse la potestad de nombrar a sus obispos" (...) "Han cambiado la cruz por el lauburu (esv¨¢stica curvil¨ªnea utilizada como s¨ªmbolo por el nacionalismo)" (...) "?Pero no quer¨ªan un pastor euskald¨²n?", reprochaban voces acompasadas con el frufr¨² de las sotanas. Para esc¨¢ndalo de quienes esperaban del clero actitudes m¨¢s piadosas y menos beligerantes, el escrito desautorizaba con crudeza al nuevo prelado. "Conocemos de cerca la trayectoria personal de D. Jos¨¦ Ignacio Munilla como presb¨ªtero, profundamente marcada por la desafecci¨®n y falta de comuni¨®n con las l¨ªneas diocesanas. Consideramos que en modo alguno es la persona id¨®nea para desempe?ar el cargo", se afirmaba en la carta del 14 de diciembre de 2009.

"Es que le conoc¨ªamos, y demasiado, desde que fue p¨¢rroco de Zum¨¢rraga (Guip¨²zcoa)", subraya Xabier Andonegi. "Sab¨ªamos de sus virtudes: cari?oso, servicial con dotes de comunicador, pero tambi¨¦n que produjo una ruptura entre los j¨®venes cat¨®licos porque les exig¨ªa que rezaran, fueran a Lourdes y a las procesiones y que nunca quiso participar en las asambleas del Consejo Episcopal, ni aplicar sus decisiones". Opuesto como era a la l¨ªnea de "pacificaci¨®n y reconciliaci¨®n" del obispo Uriarte que inclu¨ªa el rechazo a la ley de partidos que ha dejado fuera del tablero democr¨¢tico a Batasuna, Jos¨¦ Ignacio Munilla tampoco distribu¨ªa entre los feligreses los textos que a ese prop¨®sito preparaba el Obispado.

?La carta fue una reacci¨®n nacionalista apoyada por los sacerdotes contrarios al viento integrista que sopla desde el Vaticano? "La cuesti¨®n nacionalistas-no nacionalistas estuvo presente, pero sobre todo fue un asunto de modelo y l¨ªnea eclesial. El Papa apuesta por el catecismo y el culto, quiere volver al rezo del rosario y apoyarse en grupos anti intelectuales de obediencia ciega a la jerarqu¨ªa como los Kikos, los carism¨¢ticos, el Opus... No quieren cristianos formados, quieren devotos". Dice el p¨¢rroco de Lasarte que la calma que se respira hoy en la di¨®cesis es m¨¢s aparente que real y que aunque la catedral del Buen Pastor de San Sebasti¨¢n est¨¢ mas llena que nunca, hay miles de catequistas y de grupos de liturgia tentados por la idea de ignorar la actual l¨ªnea eclesial.

La censura del libro del anterior vicario Jos¨¦ Antonio Pagola y los ataques al te¨®logo franciscano Jos¨¦ Arregui no han contribuido precisamente a pacificar los esp¨ªritus, ni tampoco la acusaci¨®n, negada por el ahora obispo, de que cuando oficiaba en Zum¨¢rraga elabor¨® un fichero que bajo el t¨ªtulo "Mafia" catalogaba doctrinal e ideol¨®gicamente a sus hermanos en Cristo. El diablo anda suelto en la di¨®cesis y no se sabe a qu¨¦ juega y de qu¨¦ se disfraza. Munilla ha nombrado vicarios a dos curas nacionalistas y a decir de quienes le tratan habla con todos y se maneja delicadamente, con afecto e inteligencia. Pese a eso, Xabier Andonegi cree que las aguas terminar¨¢n desbord¨¢ndose. "Va a ocurrir, ya est¨¢ ocurriendo, que habr¨¢ dos Iglesias paralelas", asegura. Unos y otros necesitar¨¢n ese aliento del Esp¨ªritu Santo al que invocaba la carta del pasado a?o.