Una de arte (marcial) y ensayo
Llega 'Airbender' precedida de malas cr¨ªticas en EE UU - M. Night Shyamalan, realizador de 'El sexto sentido', defiende sus "superproducciones de autor"
"La cat¨¢strofe no es su concepci¨®n es su ejecuci¨®n", sentencia The New York Times. "Enormemente decepcionante", comenta Variety. "Fea", resume LA Weekly. No se trata de la ¨²ltima de Adam Sandler. Es la nueva pel¨ªcula del responsable de El sexto sentido (1999) y, hoy por hoy, uno de los realizadores m¨¢s reconocibles del g¨¦nero fant¨¢stico en el mundo. M. Night Shyamalan visit¨® Espa?a para promocionar Airbender, el ¨²ltimo guerrero y defender su producci¨®n m¨¢s ambiciosa hasta la fecha: la adaptaci¨®n al cine de la serie de animaci¨®n para ni?os Avatar: the last airbender. O, lo que es lo mismo, el nuevo cap¨ªtulo -tras los sonoros abucheos a La joven del agua (2006) y El incidente (2008)- en la tortuosa relaci¨®n de la cr¨ªtica con un cineasta tal vez demasiado autor para Hollywood.
"Los que me rodean dicen que mis filmes no se ver¨¢n igual dentro de 10 a?os"
"Quiz¨¢ me mude a Madrid y haga una con Almod¨®var; es lo que quiere mi esposa"
?rase una vez las naciones Tierra, Mar, Aire y Fuego. Las cuatro viv¨ªan en armon¨ªa hasta que la naci¨®n del Fuego les declar¨® la guerra. Tras casi un siglo de lucha, el peque?o Aang (Noah Ringer) es la ¨²nica persona capaz de manipular los cuatro elementos y, as¨ª, volver a restablecer el equilibrio entre las cuatro naciones a pesar de las p¨¦rfidas t¨¢cticas del malvado Pr¨ªncipe Zuko (Dev Patel). ?rase una vez, tambi¨¦n, 120 millones de euros puestos a disposici¨®n de M. Night Shyamalan para la adaptaci¨®n al cine se una serie para ni?os del canal Nickelodeon que a primera vista podr¨ªa parecer el cruce entre La guerra de las galaxias con una pel¨ªcula de Bruce Lee de est¨¦tica similar a la de Bola de Drag¨®n pero que, como dice Shyamalan, tras un visionado "activo" quiz¨¢ se trate de "una obra sobre la idea de que existe un dise?o superior". ?Demasiado para preadolescentes en plena dispersi¨®n estival?
"La gente que me rodea piensa que mis pel¨ªculas se ver¨¢n con ojos muy distintos dentro de 10 a?os. Tal vez porque son demasiado personales. Pero eso es algo que le aseguro no hace la traves¨ªa mucho m¨¢s f¨¢cil". Y lo dice con semblante serio mientras cita a Alfred Hitchcock o a la escritora Emily Bront? como ejemplos de artistas que contaron con un limitado respeto por parte de sus coet¨¢neos. "El 99% de las cosas que me rodean son maravillosas. Pero ese 1% restante, las cr¨ªticas demoledoras en Estados Unidos, son una locura". Pone el acento en "Estados Unidos" porque en Europa y en el resto del mundo, sus pel¨ªculas son valoradas como arriesgadas obras de autor dentro de la maquinaria de Hollywood. "El contexto es el problema", resume.
Por ello, si su mastod¨®ntica ensalada de artes marciales aderezada con abundantes parrafadas new age, cocinada parcialmente en Groenlandia y engordada in extremis a las tres dimensiones no ha sido recibida como ¨¦l esperaba, ser¨¢ porque Shyamalan es autor en pa¨ªs equivocado. "En Espa?a, Francia o Jap¨®n es algo mucho m¨¢s com¨²n. Y no se trata de un tema de ego, se trata de crear una relaci¨®n especial y directa con el p¨²blico". Un p¨²blico que responde fielmente a las propuestas de este realizador y de cuyo paso por la taquilla mundial depende que su primera incursi¨®n en el cine infantil se quede sin las otras dos partes de lo que podr¨ªa ser la primera trilog¨ªa fant¨¢stica de artes marciales para ni?os. De autor.
Una situaci¨®n que el realizador relativiza con un poco de cinismo y una de esas sorpresas al final de la cinta como las que le dieron la historia: "Anoche, cenando, pensaba: 'Puede que con otras cinco pel¨ªculas me tomen en serio'. As¨ª que vivo con esa esperanza. Si no, quiz¨¢ me mude a Madrid y haga una pel¨ªcula con Pedro Almod¨®var. Que, por cierto, es precisamente lo que quiere que haga mi mujer".
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