Donde vive el ruido
El son¨®metro desborda los l¨ªmites saludables en la calle Quart de Valencia
Ocho restaurantes, tres tiendas de ropa, dos gimnasios, dos tiendas de bebidas y alimentos, dos discotecas, una inmobiliaria, una librer¨ªa, una autoescuela y una farmacia. Hasta aqu¨ª todo normal, una calle como otra cualquiera, si no fuera porque seg¨²n el estudio sonom¨¦trico que se realiz¨® entre mayo y septiembre en el barrio del Carmen de Valencia, esta calle, la de Quart, es la v¨ªa m¨¢s ruidosa del barrio.
La concejal socialista, Carmina del R¨ªo, afirm¨® el pasado mi¨¦rcoles que la calle super¨® los 65 decibelios, l¨ªmite que fija la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, entre el 21 de mayo y el 3 de septiembre de 2009, los 96 d¨ªas en que se realiz¨® el seguimiento.
El Ayuntamiento de Valencia acord¨® el pasado 30 de julio declarar el barrio Zona Ac¨²sticamente Saturada (ZAS), nueve meses despu¨¦s de que el juzgado n¨²mero cuatro de Valencia obligara al equipo de gobierno local a finalizar los tr¨¢mites para hacer efectiva la declaraci¨®n en este barrio de Ciutat Vella.
"Deber¨ªan cerrar los locales que no tengan todo en orden para dar ejemplo"
Concretamente, los vecinos que residen en la calle Quart aseguran que dormir es una cuenta pendiente desde hace a?os y que el ruido comienza desde las diez de la noche y se prolonga hasta la madrugada.
Acusan a las aglomeraciones de gente frente a los locales de ocio nocturno y exculpan al tr¨¢fico. Hasta hace unos meses un son¨®metro daba cuenta de los altos niveles de ruido que soportan los vecinos pero despu¨¦s lo retiraron sin previo aviso.
Del R¨ªo explic¨® que el tr¨¢fico rodado en esa calle, principal salida de El Carmen, es lo ¨²nico que podr¨ªa justificar registros por encima de los 60 decibelios a cualquier hora de la noche, siete d¨ªas a la semana y dice que habr¨¢ que esperar a que se aplique la restricci¨®n del tr¨¢fico a no residentes entre las 22.00 y las 8.00, una de las medidas incluidas en la ZAS, para comprobar la incidencia del tr¨¢fico en los niveles de ruido.
Otra de las medidas cautelares previstas que se pondr¨¢n en marcha a partir de septiembre ser¨¢ no conceder nuevas licencias para bares y tiendas de conveniencia. Pero mientras la declaraci¨®n no se publique en el Diario Oficial de la Comunidad Valenciana, las medidas no ser¨¢n efectivas. De momento, en la calle Quart ya se han concedido dos nuevas licencias para una hamburgueser¨ªa y una tienda de conveniencia.A¨²n as¨ª, los vecinos dicen que la calle de Quart no es la ¨²nica ac¨²sticamente saturada, sino que desde las calles de Bolseria, Quart y Caballeros se abre un abanico de gritos, canciones y motores de coche que desembocan en la plaza del Tossal para seguir creando un pasadizo de sonidos que los vecinos apenas son capaces de resistir.
"No es la fiesta, es el jaleo lo que molesta", dice una vecina que pasea a media ma?ana por la calle del Pintor Zari?ena. Pero al final sentencia que a ella le gusta vivir en El Carme "porque est¨¢ vivo". Y es que descanso y ocio son compatibles.
Dos amigos, tambi¨¦n vecinos de la zona, hablan cerca de la plaza del Tossal, ambos dicen que el problema es "la desidia municipal" y que la polic¨ªa est¨¢, pero "no hace nada". No est¨¢n descontentos con la vida del barrio, sino con la manera en la que el Ayuntamiento de Valencia hace "o¨ªdos sordos" a las quejas y denuncias de los que all¨ª viven y afirman que la calle de Quart es de las m¨¢s ruidosas, porque act¨²a de embudo hacia Guillem de Castro. A¨²n as¨ª, comentan que la plaza del Tossal es "el verdadero epicentro" de Ciutat Vella. Ellos llevan 30 a?os viviendo en El Carme y es ahora cuando est¨¢n pensando que "es el momento de irse", como otros tantos vecinos deciden abandonarlo cada semana debido a la incapacidad de descansar por las noches.
Toni Cassola, presidente de la asociaci¨®n Amics del Carme, pretende hacer del barrio un lugar agradable para vivir y no "una gran barra de bar". Cassola expres¨®, adem¨¢s, su indignaci¨®n hacia el olor que desprende la calle de Quart que parece "un meadero municipal". A¨²n as¨ª, para ¨¦l esta calle no es la m¨¢s ruidosa y se refiere a la plaza del ?rbol como una de las peores del barrio a nivel ac¨²stico.
Lo que realmente molesta a los vecinos es que no se cumplan las normas c¨ªvicas necesarias para la convivencia y una de las m¨¢s importantes ser¨ªa, seg¨²n el presidente de Amics del Carme, el cierre de locales que no cumplen los requisitos.
Otro vecino Juan Manuel Garc¨ªa est¨¢ de acuerdo con estas declaraciones: "No deber¨ªan poner multas a locales que no lo tengan todo en orden, deber¨ªan cerrarlos directamente para dar ejemplo", dice.
Seg¨²n Cassola, no existe una confrontaci¨®n entre vecinos y hosteleros. En general, todos est¨¢n de acuerdo: las terrazas y los locales dan vida. De hecho 400 vecinos han firmado a favor de las terrazas y locales en el barrio, seg¨²n un portavoz de la patronal de hosteler¨ªa. Una de las vecinas de la plaza del conde de Carlet recuerda que hace a?os la gente no se atrev¨ªa "ni a bajar a tirar la basura" y ahora, con los comercios, ha cambiado, aunque la delincuencia en esas calles todav¨ªa es latente y hay una falta de seguridad ciudadana".
A las cuatro de la ma?ana todav¨ªa hay vida en la plaza del Tossal, la gente se va moviendo y se desperdiga por las calles. Hablan, aunque todo parece m¨¢s o menos tranquilo. Y la polic¨ªa est¨¢ de guardia, por si acaso, sin actuar.
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