Barroso: "O actuamos juntos o ellos se mover¨¢n sin Europa"
El presidente de la Comisi¨®n hace un llamamiento a reforzar la uni¨®n de los Veintisiete en la esfera internacional
El discurso se hab¨ªa presentado como el del "estado de la Uni¨®n 2010", primero de su especie, pero lo que ayer ofreci¨® Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, presidente de la Comisi¨®n, se pareci¨® m¨¢s a una relaci¨®n exhaustiva de actuaciones para la UE en el a?o pol¨ªtico entrante, un cat¨¢logo que prima un mayor activismo en lo econ¨®mico y un llamamiento a los 27 socios a comportarse m¨¢s en clave comunitaria en la escena internacional so pena de hundirse en la irrelevancia. "Si no actuamos juntos, Europa no ser¨¢ una fuerza en el mundo y ellos se mover¨¢n sin nosotros", advirti¨® Barroso en un solemne pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo. El resto del mundo ya avanza sin la UE, ausente, por hablar de lo ¨²ltimo, en las negociaciones de Oriente Pr¨®ximo, pese a contribuir anualmente con 1.000 millones de euros al sostenimiento de la Autoridad Palestina.
"Para ganar en competitividad debemos trabajar m¨¢s y m¨¢s tiempo"
"No tendremos el peso que queremos sin una pol¨ªtica com¨²n de defensa"
"Nuestros socios est¨¢n observando y esperan que actuemos como Europa, no como 27 pa¨ªses distintos", dijo ayer Barroso a una Euroc¨¢mara que s¨ª que desea fervientemente ver a la Uni¨®n actuar como tal, frente a lo que ocurre con los socios, cada cual celoso de su peque?a soberan¨ªa en la escena internacional, aparentemente irrenunciable. "Si no actuamos juntos, Europa no ser¨¢ una fuerza en el mundo y ellos se mover¨¢n sin nosotros: sin Europa y sin sus Estados miembros".
Barroso enfatiz¨® la necesidad de trenzar alianzas estrat¨¦gicas como Uni¨®n y puso como doloroso ejemplo el fiasco del pasado diciembre en las negociaciones sobre el cambio clim¨¢tico en Copenhague. "Copenhague demostr¨® que, pese a que otros no fueron tan ambiciosos como nosotros, no nos ayudamos nada al no hablar con una sola voz".
Con fuerte voluntarismo present¨® como herramienta para maximizar el papel europeo en el mundo el Servicio Europeo de Acci¨®n Exterior en ciernes, como ignorando que la pol¨ªtica exterior de la UE depende del consenso de sus 27 socios y que nada se puede hacer si uno de los grandes se opone. Fue m¨¢s all¨¢: "No nos hagamos ilusiones: no tendremos el peso que necesitamos en el mundo sin una pol¨ªtica com¨²n de defensa. Creo que ha llegado el momento de abordarla".
Los eurodiputados le recordaron con aprensi¨®n lo lejos que est¨¢n los deseos de las realidades, y c¨®mo mientras los dem¨¢s corren la Uni¨®n sigue mir¨¢ndose el ombligo. "Copenhague ha dejado un gusto amargo", apuntaron a Barroso desde su propio Partido Popular Europeo, que habl¨® de c¨®mo las donaciones de la UE a los pa¨ªses en crisis llegan en los aviones y helic¨®pteros de Barack Obama y Vlad¨ªmir Putin.
Los grupos parlamentarios apenas cuestionaron el amplio cat¨¢logo de intenciones del presidente de la Comisi¨®n para el ejercicio entrante -de hecho, se le emplaz¨® a un a?o vista para ver la suerte corrida por sus planes de ahora-, aunque le reprocharan que hiciera o¨ªdos sordos a la defecci¨®n de una opini¨®n p¨²blica cada vez m¨¢s fr¨ªa con el proyecto comunitario.
"Las perspectivas econ¨®micas para la UE son hoy mejores que hace un a?o, y ello gracias a nuestra decidida actuaci¨®n", dijo ya al principio un Barroso optimista y satisfecho con el trabajo realizado por los Veintisiete para capear la crisis econ¨®mica y financiera m¨¢s grave en d¨¦cadas. "El crecimiento ser¨¢ este a?o mayor de lo inicialmente previsto. La tasa de desempleo, aunque a¨²n demasiado alta, ha dejado de crecer".
Todav¨ªa en pleno sobresalto y apenas viendo la luz del final del t¨²nel, mayor para unos que para otros, hay que actuar de otro modo, sostuvo. Es hora de acabar con las muletas de la expansi¨®n presupuestaria de emergencia. "Los presupuestos insostenibles nos hacen vulnerables". Y a?ade Barroso: "Ha llegado la hora de modernizar nuestra econom¨ªa social de mercado". Y aceptar medidas inc¨®modas: "Si queremos ganar la batalla global de la competitividad no podemos hacerlo disminuyendo constantemente el tiempo de trabajo. Hay que tener el valor de decir que, si Europa quiere ganar la batalla de la competitividad, sobre todo frente a pa¨ªses emergentes, debemos trabajar m¨¢s y m¨¢s tiempo. Si alguien sugiere lo contrario, no dice la verdad".
Para ello la Comisi¨®n presentar¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 29 una bater¨ªa de propuestas destinadas a introducir controles en la econom¨ªa y en las finanzas, que, dice, los Estados est¨¢n m¨¢s dispuestos que nunca a aceptar. "A la uni¨®n monetaria responderemos con una aut¨¦ntica uni¨®n econ¨®mica", promete.
El socialista alem¨¢n Martin Shultz, pr¨®ximo presidente del Parlamento Europeo, fue duro con un Barroso al que acus¨® de llevar "mucho tiempo haciendo concesiones al directorio franco-alem¨¢n que rige" a los Gobiernos de la Uni¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.