"Este 'abuelo' es capaz de todo"
Jim¨¦nez brilla a los 46 a?os al haberse adaptado a los nuevos tiempos divirti¨¦ndose
![Juan Morenilla](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2Fcc05e51d-51e4-4c32-ad92-d15e3cd15f02.png?auth=044c8016cfb06655ee2060b52d6f4a35f4a0e142eac19f5bc38b2e0af65e34ca&width=100&height=100&smart=true)
Viendo el carn¨¦ de identidad de Miguel ?ngel Jim¨¦nez, m¨¢s de uno le dar¨ªa por muerto como golfista profesional. El prototipo de jugador actual (joven, fuerte, pegador) nada tiene que ver con alguien de 46 a?os, fumador de habanos y con una saludable barriga. Pero que nadie se f¨ªe del documento ni se deje enga?ar por el abultado polo. El cuarent¨®n de la coleta es el ¨²nico golfista, junto al alem¨¢n Martin Kaymer, que este a?o ha ganado tres t¨ªtulos (Dubai, Francia y Suiza); es el ¨²nico espa?ol en la Copa Ryder, el bienal duelo Europa-Estados Unidos, que empezar¨¢ el viernes en Gales, y el ¨²nico entre los 30 mejores del mundo (26?), y ha conquistado 11 de sus 18 torneos con 40 a?os o m¨¢s. ?Qui¨¦n dijo viejo?
El andaluz ha ganado 11 de sus 18 t¨ªtulos a partir de los 40 a?os
"Tuve que prepararme m¨¢s, aunque el gimnasio me da alergia"
"Con 46 tacos, deber¨ªa estar de vuelta, pero aqu¨ª estoy. Este abuelo sigue siendo capaz de todo", avisa el feliz malague?o; "el secreto es que me encanta lo que hago. Tengo mucha ilusi¨®n por jugar, por mejorar, por trabajar. Estoy a gusto conmigo mismo y hago lo que m¨¢s me gusta en la vida. Siempre he disfrutado del golf, a los 25, a los 35 y a los 45. Que ahora me lleguen los resultados es algo at¨ªpico, o es normal lo que me pasa. Lo habitual es que las mentes y los cuerpos se cansen despu¨¦s de tantos a?os. Yo a veces me he notado cansado, pero cuando pongo la bola en el tee del uno... Eso es otra cosa, me sigue motivando. Y todo puede ocurrir mientras sigas divirti¨¦ndote".
El caso de Jim¨¦nez es ¨²nico en el golf mundial. El Pisha comenz¨® como caddie y se ha adaptado a los nuevos tiempos sin dejar de ser ¨¦l mismo ni perder competitividad. "Antiguamente, yo no hac¨ªa casi nada de preparaci¨®n f¨ªsica. Luego, te das cuenta de que viene gente muy preparada... Tuve que cambiar y prepararme m¨¢s. No es que me mate en el gimnasio, porque me da alergia. M¨¢s que nada, hago ejercicio cardiovascular, de mantenimiento, abdominales, lumbares... Que corra la sangre por el tronco. Lo m¨¢s importante es tener fondo. Pesas solo en invierno, para regenerar el tejido, pero ya est¨¢, no soy ning¨²n culturista".
Men¨², el mismo. "Dieta ninguna. Tenemos una dieta mediterr¨¢nea magn¨ªfica para ir priv¨¢ndome de cosas. Lo mejor est¨¢ en la variedad. Un d¨ªa unas sardinas, otro unas lentejas o unos garbanzos". As¨ª que nada m¨¢s clasificarse para su cuarta Copa Ryder hizo su pedido para el team room, el cuarto de los jugadores: un buen vino espa?ol, aceite de oliva, caf¨¦ expr¨¦s y habanos. Son muchas batallas en 25 a?os de profesional y Jim¨¦nez conoce su cuerpo tanto como su mente: "La preparaci¨®n mental no cambia. No hay nada como saber que le est¨¢s dando bien a la pelota. Es b¨¢sico tener confianza en ti mismo y eso te lo dan los a?os. Ahora tengo m¨¢s experiencia y tiro m¨¢s de lo que s¨¦. La madurez te da una tranquilidad important¨ªsima a la hora de afrontar una situaci¨®n, independientemente del resultado. La actitud que tienes es mejor, m¨¢s optimista".
Pese a esa filosof¨ªa desenfadada, l¨²dica, un amante de la buena vida, Jim¨¦nez es un currante a quien no se le ha olvidado que empez¨® cargando los palos de los dem¨¢s. Con 46 a?os, no se deja llevar por las facilidades de un palmar¨¦s y una cuenta corriente que le permitir¨ªan relajarse. En vez de eso, baja al putting green a echar horas. El hombre sigue con las mismas ganas que cuando era un chaval. Y, si cabe, con m¨¢s sacrificio. A mitad de temporada hizo cuentas y vio que peligraba su clasificaci¨®n para la Ryder. Sin dudarlo, llam¨® a su sobrino Fernando, uno de sus parientes m¨¢s cercanos, para decirle que se perder¨ªa su boda para jugar un torneo en Escocia y sumar unos puntillos. Entonces dijo: "No voy a dejar mi destino en manos de otros". Tuvo premio. Fue tercero en Escocia y se clasific¨® octavo del conjunto europeo. Es, claro, el abuelo del equipo.
"Este Pisha es sorprendente", cuenta ?lvaro Quir¨®s, golfista andaluz como ¨¦l; "aunque es un gran jugador, sorprende que a su edad est¨¦ a ese nivel. Miguel es un t¨ªo especial porque su actitud y su car¨¢cter son inmejorables. A eso le une el talento y que f¨ªsicamente est¨¢ entero. Lleva muchos a?os pegando palos por el mundo y este es muy especial para ¨¦l porque piensa que va a ser su ¨²ltima Ryder y ha luchado como un valiente. La ventaja que tiene sobre los novatos es que ¨¦l ha sabido acoplarse al nuevo profesionalismo divirti¨¦ndose, algo que a los j¨®venes nos cuesta mucho. Esa es su gran baza mental".
Jim¨¦nez suelta chistes fuera del campo, pero en el verde es el m¨¢s serio. Cuando no hay torneo, se toma dos o tres d¨ªas sin tocar los palos "porque el entrenamiento verdadero se hace compitiendo". Si no hubiera sido golfista, lo suyo era ser "piloto de carreras", le gusta apostarse unas cigalitas con amigos y esquiva los ordenadores: "No me gusta perder el tiempo delante de una m¨¢quina". Esa alegr¨ªa y su inconfundible imagen le hacen ser uno de los golfistas m¨¢s queridos del circuito. Aunque, como dice Olaz¨¢bal, ambos sean "unos dinosaurios" que resisten a codazos.
![Miguel ?ngel Jim¨¦nez, con la copa de ganador en Suiza.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/25SU27KLVOGGGU67OMULNRA2JU.jpg?auth=af0d8f4043acc79e4037790d96e4b3218ebdb07d7d56b5a5b5f91939d96c02f8&width=414)
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