Citro?n fabricar¨¢ en Vigo 10.000 furgonetas el¨¦ctricas durante 2012
PSA calcula en 2.000 euros el sobrecoste por unidad para adaptar la producci¨®n
El director de la f¨¢brica de Citro?n en Vigo, Pierre Ianni, sent¨® ayer a representantes del Gobierno central, la Xunta, la Zona Franca, el puerto y el ayuntamiento y les dijo algo que no suelen o¨ªr: "Todos ustedes se han apuntado y hemos dado una respuesta com¨²n al grupo. Eso ha sido tomado como el punto m¨¢s importante a la hora de tomar la decisi¨®n de fabricarlo aqu¨ª". El ejecutivo, que parad¨®jicamente no suele ser muy grandilocuente, elev¨® el anuncio a la categor¨ªa de "hist¨®rico", y lo compar¨® con el paso del coche de caballos a las cuatro ruedas de finales del siglo XIX.
El objetivo es que Galicia rentabilice esa inusual alianza pol¨ªtica forzada por la crisis. A partir de 2012, la f¨¢brica de Vigo se enganchar¨¢ a la producci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos adaptando dos modelos actuales: las furgonetas Partner y Berlingo. La multinacional estima que se montar¨¢n entre 10.000 y 15.000 unidades el primer a?o, un punto de partida modesto teniendo en cuenta que, a pleno rendimiento, la f¨¢brica de Bala¨ªdos puede producir 2.000 coches diarios. Pero lo importante es que Vigo se mantiene como una prioridad para el grupo y consolida una red de proveedores que seguir¨¢n alimentando las exportaciones. Antes, PSA Peugeot Citro?n tiene preparados varios lanzamientos mundiales de coches h¨ªbridos que probar¨¢n hasta qu¨¦ punto el mercado est¨¢ dispuesto a adaptarse a una nueva forma de entender el transporte. De ah¨ª las palabras de Ianni: "Si uno lo piensa bien, lo que estamos haciendo hoy es el inicio de una nueva era del autom¨®vil. Tenemos que tener eso en mente".El coste del desarrollo industrial para que la planta de Vigo ensamble furgonetas el¨¦ctricas en 2012 se estima en 2.000 euros por unidad, sin contar el precio de las bater¨ªas (es decir, entre 20 y 30 millones para arrancar con una producci¨®n de 10.000 ¨® 15.000 unidades). Como trasladarlo al precio final ser¨ªa un suicidio comercial, la multinacional est¨¢ pidiendo -y recibiendo- importantes apoyos del Ministerio de Industria y de la Xunta.
El paso al desarrollo el¨¦ctrico es una buena noticia que consolida la industria del motor gallega y que todav¨ªa ser¨¢ mejor si Mitsubishi Corporation decide finalmente emplazar en el pol¨ªgono de Salvaterra una f¨¢brica de bater¨ªas de litio. El anuncio oficial se est¨¢ haciendo esperar, y tanto el Ministerio como la Xunta piden cautela.
Fuentes del departamento que dirige Miguel Sebasti¨¢n admiten incluso estar sorprendidas porque se d¨¦ por hecha una decisi¨®n que s¨®lo depende de la empresa nipona. Pero preguntado por qu¨¦ pasar¨ªa si finalmente la operaci¨®n fracasa, al director de Citro?n se le escap¨® ayer una frase que disipa bastantes dudas: "No nos planteamos esa posibilidad", asegur¨®. Inmediatamente despu¨¦s matiz¨® que "si por mala suerte pasa eso", no afectar¨¢ al proyecto de la furgoneta el¨¦ctrica m¨¢s all¨¢ del coste log¨ªstico de importar ese componente. "Con calma, tranquilidad y serenidad eso terminar¨¢ con una conclusi¨®n favorable", zanj¨®.
S¨®lo esa nueva planta generar¨ªa, seg¨²n estimaciones del Cl¨²ster del Autom¨®vil, unos 1.500 puestos de trabajo (de ellos 400 los ocupar¨ªan ingenieros y titulados superiores) y m¨¢s de 8.000 contratos para construir las naves. La reserva de suelo, pendiente de una reparcelaci¨®n y de soluciones urban¨ªsticas complejas, abarca 200.000 metros cuadrados.
En cuanto al lanzamiento de las furgonetas el¨¦ctricas desde Bala¨ªdos, Pierre Ianni dio por hecho que se traducir¨¢ en una mayor carga de trabajo, algo que no tienen tan claro los sindicatos bas¨¢ndose en la experiencia previa de la planta.
Hace diez a?os, de la factor¨ªa salieron los primeros 7.500 coches impulsados por electricidad y fabricados en serie para un proyecto de movilidad apadrinado por la ciudad de La Rochelle. La cadena de montaje se adapt¨® pr¨¢cticamente con el mismo equipo humano. La diferencia es que entonces no hab¨ªa clientes preparados para pagar m¨¢s por un veh¨ªculo que no ten¨ªa las mismas prestaciones que otro convencional.
Con todo, la revoluci¨®n el¨¦ctrica no es tan inmediata. El propio Ianni, aseguraba en este peri¨®dico en una entrevista concedida en julio que el coche tradicional tiene "mucho futuro", gracias a que se han conseguido rebajar las emisiones de CO2 hasta la barrera de los 120 gramos (lo que se considera consumo ecol¨®gico) en cada kil¨®metro recorrido. Quedan, como poco, diez a?os por delante para terminar con la gasolina.
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