Dos dirigen mejor que uno
La participaci¨®n de los empleados en el capital de sus firmas sirve para acelerar las ventas - Cualquier empresa puede aplicar el modelo
"Las empresas funcionan mejor cuando los empleados son due?os mayoritarios de las mismas", se?al¨® ayer a este peri¨®dico Loren Rodgers (Michigan, EEUU, 1968), director del National Center for Employee Ownership, el organismo estadounidense que engloba a las empresas con Participaci¨®n Accionarial de los Trabajadores (ESOP, en sus siglas en ingl¨¦s).
Rodgers se muestra convencido de que, aunque no haya datos que fijen a partir de qu¨¦ porcentaje de participaci¨®n se produce el cambio, "las organizaciones con participaci¨®n de trabajadores crecen en t¨¦rminos de ventas entre un 2,3% y un 2,4% m¨¢s r¨¢pido que en las que no existe".
El experto, quien participa hoy en unas jornadas organizadas por la Diputaci¨®n de Guip¨²zcoa para analizar las posibilidades de implantaci¨®n este modelo en el territorio y analizar sus caracter¨ªsticas, considera que las ESOP presentan beneficios notables. Por una parte, son "m¨¢s innovadoras". Adem¨¢s, mejora el clima interno y las relaciones jer¨¢rquicas. "En estas empresas hay m¨¢s permanencia de trabajadores y m¨¢s solicitudes cuando hay vacantes", a?ade Rodgers, quien solo resalta el posible problema de que "la dependencia de los trabajadores con la empresa aumente".
Rodgers: "Las empresas van mejor cuando los trabajadores son sus due?os"
La crisis ha afectado a este modelo por su dependencia con los bancos
Cualquier compa?¨ªa puede convertirse en una ESOP, en su opini¨®n. Para el estadounidense, la ¨²nica traba en este camino son aquellas organizaciones en las que se renueva constantemente la plantilla. Cuestionado acerca de si el tama?o de las empresas importa en este caso -la media del n¨²mero de trabajadores es de 100 a 300 trabajadores-, Rodgers record¨® que en su pa¨ªs hay una empresa de 140.000 empleados que ha tenido "mucho ¨¦xito". "Lo que influye m¨¢s es que la empresa sea p¨²blica. Por ejemplo, en las que salen a Bolsa, muy grandes y con mucha regulaci¨®n, la informaci¨®n que se puede dar a sus trabajadores es mucho menor", abunda.
En cuanto al caso de la corporaci¨®n Mondrag¨®n en Guip¨²zcoa, este especialista encuentra varias diferencias entre el modelo cooperativista y el de las ESOP. En primer lugar, la gesti¨®n que defiende promueve que "una acci¨®n equivale a un voto", mientras que en las cooperativas es "una persona, un voto".
Igualmente, el valor de lo que poseen los trabajadores en las ESOP se basa en el "estado de los mercados", cuando en las cooperativas radica "en la contabilidad". Por ¨²ltimo, en el modelo cooperativista los trabajadores compran la participaci¨®n, a diferencia de las ESOP, en las que la empresa pone el dinero para la participaci¨®n, as¨ª que, "si a la empresa le va bien, al trabajador tambi¨¦n, y viceversa".
El modelo que hoy defender¨¢ Rodgers depende de la coyuntura econ¨®mica, por lo que se ha visto muy afectado, especialmente en 2009, por la crisis. "Se basan en los cr¨¦ditos y son los bancos los que los conceden", explica.
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