Torres-Garc¨ªa estrena casa en el MNAC
El pintor uruguayo tendr¨¢ una sala con 14 obras de la colecci¨®n de sus nietos - Las obras explican la evoluci¨®n del artista en el primer tercio del siglo XX
Parec¨ªa inevitable que el Museo Nacional de Arte de Catalu?a (MNAC) hiciera sitio para el pintor uruguayo Joaqu¨ªn Torres-Garc¨ªa. "Adem¨¢s de en Montevideo, el sitio m¨¢s adecuado para Torres-Garc¨ªa es Barcelona", indicaba ayer el presidente del patronato del MNAC, Narc¨ªs Serra. El artista sudamericano -de padre catal¨¢n y madre uruguaya de origen canario- se destap¨® como artista en la capital catalana antes de dar el gran salto hacia las vanguardias parisinas. Y por eso, por esta etapa de Barcelona, el MNAC persigue con esta operaci¨®n "rellenar los vac¨ªos que tenemos en arte catal¨¢n del siglo XX", como dijo el mismo Serra. En total, lo que se puede contemplar son 14 obras -nueve pinturas y cinco objetos pl¨¢sticos-, gracias a la donaci¨®n de la Colecci¨®n Alejandra, Aurelio y Claudio Torres, nietos del artista. Concretamente, se trata de una cesi¨®n en dep¨®sito por un a?o prorrogable.
La sala monogr¨¢fica se encuentra al lado de las de Picasso, Gargallo y Gonz¨¢lez
Seg¨²n Alejandra Torres -nieta del pintor presente en la inauguraci¨®n de la sala monogr¨¢fica ayer-, las condiciones de la donaci¨®n comprenden un a?o de duraci¨®n, pero se espera que se pueda ver durante bastante m¨¢s tiempo, sin concretar. Eso s¨ª, la nieta del artista apunt¨® que ten¨ªa en mente hacer cambios en la exposici¨®n y facilitar m¨¢s piezas de la "¨¦poca de Barcelona".
Tiene miga la situaci¨®n de la sala Torres-Garc¨ªa, pared con pared con la sala de Pablo Picasso y vecina de la secci¨®n de esculturas de Pablo Gargallo y de Juli Gonz¨¢lez, "compa?eros de mi abuelo", reconoci¨® Alejandra Torres. En todo momento, la nieta del pintor mostr¨® su agradecimiento por "el trato que dispensa Barcelona a la obra de Torres-Garc¨ªa".
Hasta el momento, el museo radicado en el palacio nacional de la Exposici¨®n de 1929 -edificio que conoci¨® el propio Torres-Garc¨ªa- ya dispon¨ªa de un conjunto de 11 obras, la mayor¨ªa realizadas en Catalu?a, y representativas de su etapa noucentista. Pero esta sala monogr¨¢fica responde a la intenci¨®n del museo de la monta?a de Montju?c de representar en toda su complejidad la obra de Torres-Garc¨ªa, desde 1914 hasta 1938.
El consejero de Cultura, Joan Manuel Tresserras, se felicit¨® por la nueva conquista del MNAC y, parafraseando al recientemente fallecido hombre de letras Joan Triad¨², indic¨®: "En lo pl¨¢stico, y a pesar de las persecuciones, el siglo XX ha sido un siglo de oro para Catalu?a".
A pesar de que pueda parecer una muestra exigua -14 piezas- lo cierto es que esta monografica dispone de las obras necesarias para representar la trayectoria de Torres-Garc¨ªa. Por una parte, desde su concepci¨®n del noucentisme y su dominio de los fundamentos de la t¨¦cnica pict¨®rica hasta llegar al estallido del arte constructivo, un nuevo lenguaje ideado por el pintor que se nutri¨® de influencias precolombinas.
El recorrido "can¨®nico" que propone el MNAC, en palabras de Tresserras, podr¨ªa empezar con Maqueta d'arquitectura (1914), seguir con Paisatge amb carro vermell (1928) y Objecte pl¨¤stic. Vaixell constructiu (1930) y desembocar en Composici¨® c¨°smica amb home abstracte (1933) y Formes (1937).
La biograf¨ªa de Torres-Garc¨ªa es tambi¨¦n un libro de pistas de los derroteros art¨ªsticos. Despu¨¦s de casi 30 a?os en Barcelona, se decant¨® por las tendencias vanguardistas en boga en Europa y se instal¨® en Nueva York y en Florencia. En 1924 se traslad¨® a Par¨ªs donde se convirti¨® en uno de los padrinos de la abstracci¨®n geom¨¦trica.
Una d¨¦cada despu¨¦s, vivi¨® en Madrid, antes de regresar a Montevideo, donde muri¨® en 1949 tras varios intentos de difundir el arte constructivo en Sudam¨¦rica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.