Tres mujeres contra la mafia de Ciutat Vella

?Qu¨¦ tienen en com¨²n Itziar Gonz¨¢lez, Merc¨¨ Massa y Lourdes Conesa? Que son mujeres, que trabajaban en el distrito barcelon¨¦s de Ciutat Vella, que decidieron acabar con la supuesta corrupci¨®n que imperaba en la concesi¨®n de licencias para apartamentos tur¨ªsticos y hoteles y que, por ello, sufrieron serias amenazas de muerte, por tel¨¦fono o carta, as¨ª como otras acciones de extorsi¨®n para que tirasen la toalla. Barcelona no es Sicilia, pero los m¨¦todos empleados con ellas lo recuerdan. As¨ª se explica que los Mossos d'Esquadra afirmen en un escrito dirigido a la juez Elisabet Castell¨® el 28 de agosto de 2009: "De la investigaci¨®n se desprende claramente que no se trata de unas amenazas aisladas, sino que existe un proceso de extorsi¨®n con la intenci¨®n de presionar y desestabilizar al personal de la actual concejal¨ªa de Urbanismo de Ciutat Vella". La explicaci¨®n, a?ade la polic¨ªa auton¨®mica, es que los autores de las amenazas "habr¨ªan visto perjudicados sus intereses econ¨®micos, as¨ª como la dilataci¨®n o denegaci¨®n de licencias".

"Yo llevo 22 a?os en el Ayuntamiento, tengo muchos amigos", dijo Qu¨ªlez

Los Mossos destacan que estas amenazas coinciden con un cambio en el personal acordado por Itziar Gonz¨¢lez a los pocos meses tomar posesi¨®n como concejal de Ciutat Vella. Tres inspectores t¨¦cnicos abandonaron sus cargos y fueron recolocados el jefe del departamento de licencias e inspecciones, as¨ª como Heliodoro Lozano, director de servicios t¨¦cnicos. Lozano estuvo seis meses en prisi¨®n por su supuesta vinculaci¨®n con la trama de extorsi¨®n que investiga el Juzgado de Instrucci¨®n 33 de Barcelona en la concesi¨®n de licencias a cambio de diversas cantidades de dinero y est¨¢ acusado de varios delitos de cohecho y contra la Administraci¨®n p¨²blica.

El ingeniero Joaquim Qu¨ªlez, que emit¨ªa informes para el distrito, tambi¨¦n estuvo en prisi¨®n y est¨¢ acusado de formar parte de esa trama, pero, adem¨¢s, los Mossos consideran que las amenazas sufridas por las tres mujeres responden a una "estrategia de intimidaci¨®n presuntamente protagonizada" por ¨¦l. La juez del caso ha avalado la investigaci¨®n policial y Qu¨ªlez est¨¢ siendo investigado tambi¨¦n por amenazas o extorsiones.

La tesis de la juez es que Qu¨ªlez podr¨ªa haber actuado as¨ª al existir sospechas fundadas contra ¨¦l de que hab¨ªa actuado il¨ªcitamente en la concesi¨®n de licencias. La justicia investiga ahora las grabaciones telef¨®nicas realizadas a Qu¨ªlez y los DVD extra¨ªdos del disco duro de su ordenador cuando los Mossos registraron su despacho profesional, el 31 de marzo de 2009.

Las tres mujeres que sufrieron las amenazas ha acudido al juzgado para ejercer la acusaci¨®n particular en el caso. Su abogado, Llu¨ªs Maria Anglada, admite: "amenazar es m¨¢s sencillo que identificar al autor".Las amenazas a las tres mujeres empezaron en junio de 2008 y la primera que las sufri¨® fue la arquitecta t¨¦cnica del distrito de Ciutat Vella, Lourdes Conesa. Fueron llamadas an¨®nimas a su domicilio, hasta que la noche del 18 de julio cogi¨® el tel¨¦fono. El mensaje era claro: recomendaci¨®n de abandonar su cargo p¨²blico bajo amenazas de que si no, tendr¨ªa problemas. La mujer acudi¨® a los Mossos y denunci¨® los hechos, pero el caso qued¨® archivado por falta de autor conocido.

En esas mismas fechas, mantuvo una discusi¨®n laboral con el ingeniero Joaquim Qu¨ªlez, que emit¨ªa informes para el Ayuntamiento y que deambulaba por el distrito como Pedro por su casa, ojeando expedientes de licencias sin estar autorizado para ello. La arquitecta le afe¨® su conducta y Qu¨ªlez le respondi¨®: "Yo llevo 22 a?os en el Ayuntamiento, tengo muchos amigos y si puedo evitarlo, t¨² nunca ser¨¢s nadie en este Ayuntamiento".

De las llamadas telef¨®nicas se pas¨® a las cartas amenazadoras. El 11 de noviembre de 2008, Conesa recibi¨® un sobre en su domicilio que reivindicaba las llamadas, insistiendo en que abandonara el cargo y con una fotograf¨ªa de su vivienda. Se daba a entender as¨ª, dicen los Mossos, que estaba vigilada y que "ser¨ªa vulnerable en cualquier momento". Por esas fechas, su motocicleta fue manipulada y le extrajeron varios tornillos intencionadamente. El 30 de noviembre de 2008 abandon¨® el cargo y se march¨® a otro distrito. Dos meses despu¨¦s, el 20 de febrero de 2009, recibi¨® la carta de agradecimiento que se transcribe ¨ªntegramente en esta p¨¢gina.

Ese mismo d¨ªa, los autores de las amenazas iniciaron el acoso a la gerente del distrito, Merc¨¨ Massa, con una carta muy extensa, de dos p¨¢ginas, en la que se profieren todo tipo de amenazas de muerte si no abandona el cargo y deja de firmar acuerdos "prevaricadores" referidos a la denegaci¨®n de licencias. Los Mossos destacan que esas amenazas coinciden en el tiempo con la ausencia de la concejal Itziar Gonz¨¢lez por problemas de salud.

Quienes redactan las amenazas conocen al detalle la vida personal de las mujeres. Se ensa?an especialmente con la concejal Itziar Gonz¨¢lez, a la que el 23 de julio de 2009 env¨ªan a su domicilio una carta con insultos irreproducibles y hasta regocij¨¢ndose por el mal momento de salud que pas¨®. En la carta se habla directamente de "eliminarlas", en alusi¨®n a ella y a su "amiga Merc¨¨", en referencia a la gerente. Meses despu¨¦s, Gonz¨¢lez sufri¨® un robo en su vivienda, los ladrones se llevaron su ordenador. Al final arroj¨® la toalla, pero fue por el hotel del Palau de la M¨²sica, un proyecto que nunca vio bien.