"El cristianismo tambi¨¦n se est¨¢ radicalizando"
Darius Shayegan (Teher¨¢n, 1939) es fil¨®sofo y ejerce en Teher¨¢n. En 1976 empez¨® a proponer el "di¨¢logo de civilizaciones", incluso consigui¨® celebrar un encuentro internacional en la capital iran¨ª. "Luego la revoluci¨®n dio al traste con todo", explica. Ha viajado a Barcelona para participar en el noveno congreso de Ontolog¨ªa y defender, una vez m¨¢s, el entendimiento entre culturas. "El problema es c¨®mo integrar las diferencias en un mundo global. Todos los que vivimos en el planeta tenemos, queramos o no, una identidad moderna. El caso es c¨®mo ser modernos sin dejar de ser nosotros mismos" y no aceptarlo lleva al aislamiento de los talibanes o los salafistas.
De costumbres austeras, decide cenar ligero: un poco de agua, queso y aceitunas, junto al fil¨®sofo espa?ol V¨ªctor G¨®mez Pin, que opta por cerveza y jam¨®n. Ir¨¢n, explica, es un pa¨ªs especial, con una mayor¨ªa de j¨®venes que "quieren lo mismo que los j¨®venes de todo el mundo". El resultado es una doble vida en un pa¨ªs en el que casi todo est¨¢ prohibido "pero los deseos no desaparecen".
El fil¨®sofo iran¨ª impuls¨® el fracasado di¨¢logo entre civilizaciones
"La situaci¨®n en Ir¨¢n es de esquizofrenia cultural", asegura, evocando el t¨ªtulo de uno de sus libros. "En Occidente la religi¨®n es privada; en el islam no se da la separaci¨®n entre el poder espiritual y el temporal. El espacio p¨²blico est¨¢ ocupado por la religi¨®n, que lleg¨® al poder y se desvirtu¨®. Para regir un pa¨ªs como Ir¨¢n, el chiismo se convirti¨® en ideolog¨ªa frente a otras como el liberalismo o el marxismo, sin estar equipado para ello". La esquizofrenia no es solo un problema de Ir¨¢n. "Octavio Paz dice lo mismo de Am¨¦rica Latina", aunque "la situaci¨®n es diferente en un pa¨ªs cristiano, con un idioma occidental como el espa?ol".
Se pregunta qu¨¦ ha hecho que los derechos humanos hayan cuajado en Occidente y no en Asia. Defiende: "Revoluci¨®n e islam son t¨¦rminos incompatibles, porque la revoluci¨®n remite a la Ilustraci¨®n y sus consecuencias y el islam supone la sumisi¨®n a Dios".
La necesidad del di¨¢logo de civilizaciones es hoy m¨¢s urgente que nunca. "Hoy todo se radicaliza: el cristianismo e incluso el hinduismo, que es una religi¨®n muy tolerante. El radicalismo del islam contamina todo el mundo". La ventaja de Europa, sostiene, es que la potencia de las Iglesias ha caducado: "La Iglesia no volver¨¢ nunca al poder. El Papa puede clamar contra el preservativo, pero la gente hace lo que quiere y no puede ser sancionada. En Ir¨¢n, en cambio, una mujer puede ser condenada a la lapidaci¨®n". Y no quiere ni pensar en lo que hubiera pasado en Afganist¨¢n sin el freno al dominio de los talibanes con los que, afirma, "no se puede dialogar".
Explica que en Ir¨¢n "los libros de filosof¨ªa se venden m¨¢s que la novela" y que est¨¢n muy de moda autores como Jacques Derrida, Michel Foucault o Heidegger, conviviendo con la m¨ªstica de tradici¨®n isl¨¢mica. En el fondo, lo que domina es la tradici¨®n que deriva del fil¨®sofo hispano¨¢rabe Averroes: una cosa puede ser verdad en la filosof¨ªa aunque no lo sea para la teolog¨ªa. "Averroes", se?ala, "apenas tuvo influencia en el islam, pero el Par¨ªs del siglo XIII estaba lleno de defensores de la doble verdad. Y el problema pervive: tenemos que separar el mito de la raz¨®n". Y concluye: "Yo mismo soy esquizofr¨¦nico y me muevo entre la m¨ªstica y Hegel". Su trabajo ha recibido este a?o el primer premio Di¨¢logo Global que se da en Copenhague.
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