?Qu¨¦ es una sanci¨®n "inteligente"?
Las sanciones internacionales tienen mala reputaci¨®n. La idea de que un pa¨ªs o grupo de pa¨ªses impongan represalias diplom¨¢ticas o embargos econ¨®micos a otro pa¨ªs para hacerle cambiar de conducta es muy impopular. Algunos critican las sanciones porque penalizan a las poblaciones, y no a sus Gobiernos. Sadam Husein y su familia no sufrieron por la falta de medicinas; los ni?os de Irak, s¨ª. Otros las critican porque no funcionan. Corea del Norte, por ejemplo, no ha cambiado sus pol¨ªticas a pesar de que lleva d¨¦cadas castigada. Las sanciones son vistas por muchos como una cruda expresi¨®n del poder del m¨¢s fuerte. Son las grandes potencias quienes suelen imponerlas a pa¨ªses m¨¢s peque?os y d¨¦biles. Tambi¨¦n son criticadas porque ofrecen a los tiranos una estupenda excusa para justificar las carest¨ªas y abusos a los que someten a sus pueblos. Y son muy ¨²tiles para azuzar las pasiones nacionalistas que unifican a la naci¨®n contra el agresor extranjero, o para disfrazar la represi¨®n: frente a una agresi¨®n internacional es m¨¢s f¨¢cil tratar a disidentes y opositores como traidores a la patria y meterlos en la c¨¢rcel.
El impacto de las ¨²ltimas medidas contra Ir¨¢n aprobadas en la ONU ya empieza a sentirse
A pesar de su impopularidad, y de sus obvios defectos, las sanciones son un instrumento cada vez m¨¢s utilizado en la pol¨ªtica internacional. Y esto es una buena noticia. ?C¨®mo puede serlo? Pues porque la alternativa a las sanciones es la guerra.
Los conflictos internacionales no van a desaparecer. Y cuando las negociaciones diplom¨¢ticas se agotan, es bueno que los Gobiernos tengan algo m¨¢s que bombas en su arsenal, y que puedan echar mano de abogados especializados en sanciones en lugar de recurrir, como ¨²nica salida, a generales que saben de guerras e invasiones.
As¨ª, en los ¨²ltimos a?os ha habido un gran esfuerzo por impulsar las llamadas sanciones "inteligentes". Son m¨¢s personalizadas, ya que afectan directamente a altos funcionarios gubernamentales y a sus familias, a quienes se confiscan propiedades y cuentas bancarias en el extranjero y se les restringen los viajes. Tambi¨¦n son mucho m¨¢s sofisticadas. Actualmente, incluso los pa¨ªses m¨¢s aislados y atrasados dependen del acceso al sistema financiero internacional, por lo cual las sanciones que dificultan esos movimientos tienen un enorme impacto. Estas nuevas modalidades tambi¨¦n utilizan las complejas redes log¨ªsticas en las que se basa el comercio moderno para controlar y restringir las importaciones y exportaciones de los pa¨ªses sancionados.
Claro que por m¨¢s "inteligentes" que sean, las sanciones siempre tendr¨¢n defectos. Adem¨¢s, su efectividad depende del consenso y de la voluntad pol¨ªtica de muchos pa¨ªses. Como demuestra el caso de Cuba, de nada ha servido que Estados Unidos le imponga un embargo comercial si el r¨¦gimen de La Habana consigue todo lo que desea de (o a trav¨¦s de) pa¨ªses amigos.
Por eso uno de los mayores ¨¦xitos que se adjudica el Gobierno de Barack Obama es el de haber logrado que China y Rusia se le hayan unido, junto a Europa y Asia, en las sanciones contra Ir¨¢n. Estas sanciones impiden que bancos y empresas aseguradoras interact¨²en con empresas iran¨ªes, autorizan la inspecci¨®n de barcos cargueros en alta mar o en puertos, congelan los activos que tienen fuera de Ir¨¢n personas y organizaciones como la Guardia Revolucionaria y limitan los viajes de sus dirigentes a otros pa¨ªses. Tambi¨¦n penalizan a pa¨ªses y empresas extranjeras que vendan gasolina o productos derivados del petr¨®leo a Ir¨¢n o le ayuden a aumentar su capacidad de refino del crudo.
A pesar de que estas nuevas sanciones son muy recientes (fueron aprobadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas hace solo tres meses) su impacto ya se siente. Petroleras como la italiana ENI o la francesa Total han anunciado la suspensi¨®n de sus operaciones en Ir¨¢n, uno de cuyos ministros inform¨® de que las importaciones de gasolina han ca¨ªdo a su nivel m¨¢s bajo en 10 a?os. La inflaci¨®n y el paro han subido, y la actividad econ¨®mica se est¨¢ frenando.
Al¨ª Akbar Hachem¨ª Rafsanyan¨ª es un ex presidente que actualmente encabeza la Asamblea de Expertos, una C¨¢mara de 86 cl¨¦rigos que tiene la autoridad para destituir al l¨ªder supremo de Ir¨¢n, el ayatol¨¢ Al¨ª Jamenei. Rafsanyan¨ª exhort¨® a la Asamblea a no desestimar esta nueva ofensiva internacional: "Nunca hab¨ªamos sufrido sanciones tan severas, y se est¨¢n intensificando cada vez m¨¢s. Cada vez que encontramos una manera de evadirlas, los poderes occidentales nos la bloquean".
Ojal¨¢ que estas sanciones funcionen y lleven a los pa¨ªses involucrados a la mesa de negociaciones y a la b¨²squeda de compromisos. Se habr¨ªa evitado as¨ª otra posible guerra. Y eso es lo m¨¢s inteligente.
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