"Hay millones de prisioneros de la pobreza"
A las cuatro est¨¢ en pie. No duerme mucho. La noche antes de la entrevista la pas¨® leyendo sobre Espa?a, su sistema legal, los derechos humanos... Salil Shetty (Bangalore, India, 1961) ha cumplido sus primeros 100 d¨ªas al frente de Amnist¨ªa Internacional como nuevo secretario general. "Estoy estudiando -dice, chuleta en mano- con humildad y consciente de que tengo mucho que aprender". Y que aportar, porque Shetty, primer indio a los mandos de la ONG con sede en Londres, quiere meter una nueva marcha: llegar al Sur. "Los Gobiernos no pueden ignorar Amnist¨ªa porque saben que dice la verdad", arranca la charla, durante su reciente visita a Madrid. "Y nadie puede cuestionar la verdad".
"La participaci¨®n de la gente es tambi¨¦n un derecho fundamental"
Pregunta. ?Por qu¨¦ cambi¨® Naciones Unidas por Amnist¨ªa?
Respuesta. He centrado mi trabajo en los ¨²ltimos 20 a?os en la responsabilidad de los Gobiernos, en ActionAid y en la Campa?a de los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU. Vi que hab¨ªa un problema de procedimiento. La Declaraci¨®n del Milenio habla de desarrollo, de derechos humanos, pero en la pr¨¢ctica no hay un instrumento legal para conseguir esos objetivos. Creo que los derechos humanos pueden forzar a los Gobiernos irresponsables, no de una forma voluntaria sino de una forma legal.
P. ?Es el mejor para el puesto?
R. Pregunte [se r¨ªe] al consejo que me eligi¨®. El tiempo lo dir¨¢. Creo que el cambio solo llega con el movimiento ciudadano. El cambio no puede ser sostenido desde fuera, tiene que llegar de dentro, de la gente. Amnist¨ªa es muy fuerte en EE UU y Europa, pero tenemos mucho que hacer en el Sur. Y yo s¨¦ de eso porque vengo de Asia, he trabajado en ?frica...
P. ?C¨®mo puede estar Amnist¨ªa m¨¢s presente en el Sur?
R. Uno de los derechos fundamentales es la participaci¨®n de la gente, el control sobre su destino. Si quieres tener ¨¦xito tienes que hacerlo desde abajo. Antes de la guerra fr¨ªa solo exist¨ªa EE UU y Europa, pero eso est¨¢ cambiando. Hablo de los BRIC (Brasil, Rusia, India y China) y tambi¨¦n de Nigeria, Indonesia... Si buscas un cambio tienes que tener ciudadanos y movimientos en esos pa¨ªses.
P. ?Est¨¢ viviendo Amnist¨ªa una transici¨®n?
R. S¨ª. Es una decisi¨®n que no solo me compete a m¨ª. Necesitamos movernos m¨¢s y m¨¢s r¨¢pido. Y hablar con la gente. No podemos estar sentados en Madrid y decidir lo que va a pasar en Brasil. Tenemos que involucrar a los brasile?os. Proponerles ser parte de Amnist¨ªa y ofrecerles beneficios tangibles. Si eres un preso de conciencia, est¨¢ claro, Amnist¨ªa hace campa?a para liberarte; si sufres una pena capital, intentaremos pararla. Cuando hablamos de derechos econ¨®mico-sociales, tenemos que ser m¨¢s claros.
P. Pero Amnist¨ªa significa presos de conciencia, tortura, pena capital... ?No confundir¨¢ ahora la lucha contra la pobreza a los seguidores de la ONG?
R. ?A qui¨¦n pertenecen los derechos de los que hablamos? Cerca de 1.200 millones de personas viven en la pobreza. Todos sus derechos son menospreciados. Si vas a una comisar¨ªa de mi pa¨ªs, India, ver¨¢s que solo acude gente pobre. Tambi¨¦n pasa en ?frica y Latinoam¨¦rica. Son prisioneros de pobreza. Todos los derechos est¨¢n conectados.
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