La resplandeciente absoluci¨®n de un culpable
Un error evitable deriva en la perversi¨®n del sistema judicial
Fue un error antol¨®gico, garrafal, de principiantes, de manual; de esos que ponen en cuesti¨®n todo el sistema judicial. Porque solo la condena de un inocente es peor que la absoluci¨®n de un culpable.
Claro que Winston Churchill defin¨ªa el ¨¦xito como "la capacidad de ir de error en error sin perder el entusiasmo", por lo que visto as¨ª...
El caso es que un Juzgado de lo Penal de Madrid conden¨® en septiembre pasado al ciudadano marroqu¨ª El Maati Essarboutti, de 19 a?os, a dos a?os y seis meses de prisi¨®n por un robo con intimidaci¨®n. La sentencia declaraba probado que, junto con un colega de fechor¨ªas, el 25 de enero abord¨® en la calle Vallehermoso de Madrid a un universitario, al que tras amenazarle con una navaja le sustrajo un reloj, una cadena de plata, el m¨®vil y la cartera. Todo valorado en 675 euros.
La v¨ªctima, en rueda de reconocimiento, hab¨ªa identificado sin ning¨²n g¨¦nero de dudas a El Maati como uno de los que le amenazaron, golpearon y robaron. Adem¨¢s, en comisar¨ªa precis¨® que el asalto se hab¨ªa cometido el 29 de enero y no el 25, como por error figuraba en el atestado.
Sin embargo, o nadie se ley¨® las 600 p¨¢ginas de las diligencias donde la polic¨ªa advert¨ªa de la equivocaci¨®n en la fecha, o si las leyeron, ni la juez, ni la fiscal, ni la abogada de oficio del acusado se percataron de esa circunstancia. Todas dieron por sentado que los hechos hab¨ªan ocurrido el d¨ªa 25.
Durante el juicio, El Maati neg¨® que ¨¦l hubiera sido el autor del robo. "Ese d¨ªa estaba yo detenido en comisar¨ªa", asegur¨®. Pero como los acusados tienen el privilegio de poder mentir, y hab¨ªa sido reconocido por la v¨ªctima, nadie dio cr¨¦dito a lo que dijo, ni la acusaci¨®n se molest¨® en refutarlo. La fiscal ¨²nicamente replic¨® que eso no era lo que el acusado hab¨ªa dicho en el juzgado, donde hab¨ªa referido que se encontraba durmiendo en su casa. Pero El Maati precis¨® que cre¨ªa que se refer¨ªan a otro robo del que tambi¨¦n est¨¢ acusado y que nadie le hab¨ªa preguntado por el d¨ªa 25.
Se da la circunstancia de que El Maati hab¨ªa sido detenido en la madrugada del 24 de enero por otro robo con violencia e intimidaci¨®n en la calle Galileo, muy cerca de Vallehermoso, y que efectivamente el d¨ªa 25 se encontraba detenido en comisar¨ªa.
Lo que ocurri¨® es que el acusado era tan aparentemente culpable que nadie le hizo ni caso. La juez de lo penal le conden¨® a dos a?os y medio de c¨¢rcel y la abogada de oficio recurri¨® la sentencia en "escasas 10 l¨ªneas" no por el error en la fecha, sino por entender que se hab¨ªa vulnerado su presunci¨®n de inocencia por no haber pruebas de cargo.
Solo el tribunal de apelaci¨®n -integrado por Manuela Carmena, presidenta y ponente; Ramiro Ventura y Mar¨ªa Jes¨²s Coronado-, al revisar el acta de la vista, es decir, la grabaci¨®n con el v¨ªdeo del juicio, ha apreciado el error que determina la absoluci¨®n del acusado.
"Nos encontramos", dice la sentencia, "con que siendo presumible que efectivamente El Maati haya sido el autor del robo (...) del 29 de enero de 2010, no podemos condenarle por el robo del 25 de enero por el que el ministerio fiscal le ha acusado".
Recuerda el tribunal que el principio acusatorio obliga a que los hechos por los que se acusa y en los que se basa la condena sean id¨¦nticos. Puede parecer una simple equivocaci¨®n en una fecha, pero no es as¨ª. Quiz¨¢ pudo haberse subsanado ese error si la fiscal hubiera comprobado el atestado en el juicio, pero no lo hizo y, por tanto, no se permiti¨® al acusado defenderse de una acusaci¨®n que se refer¨ªa al mismo hecho pero cometido en fecha distinta.
El tribunal, que revoc¨® la condena de El Maati y orden¨® su puesta en libertad, critica en la sentencia la forma de gestionar los procedimientos judiciales con una "acumulaci¨®n enorme de documentaci¨®n sin ning¨²n criterio de selecci¨®n", ni ¨ªndice, que provoca estas situaciones.
Y ahora, ?qui¨¦n resarce a la v¨ªctima de esos errores? ?No creen que deber¨ªa querellarse por negligencia profesional?
Por cierto ?les gustar¨ªa saber qu¨¦ pas¨® con El Maati? Pues se encuentra en prisi¨®n preventiva en la c¨¢rcel de Meco (Madrid) por otro robo. Es un broncas y ya ha sido sancionado por agredir a otro recluso. Parece que sigue las recomendaciones de la escritora inglesa Catherine Aird, que aconseja: "Si no puedes ser un buen ejemplo, procura ser una advertencia espantosa".
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