Mas ignora la oferta de Puigcerc¨®s

CiU se mostr¨® impasible ante los vaivenes de Esquerra para apoyar o no un futuro Gobierno convergente. Los nacionalistas no modificaron un ¨¢pice su estrategia: saben que si el tripartito suma, volver¨¢ a gobernar, por mucho que los independentistas lancen cantos de sirena. El candidato de CiU, Artur Mas, ignor¨® ayer por la ma?ana, en un acto en la sede de su partido, la oferta de Puigcerc¨®s, y despu¨¦s su posterior rectificaci¨®n, en Matar¨®, donde pidi¨® prestado el voto a los socialistas descontentos.

Con gesto de evidente fastidio, Mas se mostr¨® fr¨ªo cuando un periodista le pregunt¨® si conoc¨ªa la oferta de Puigcerc¨®s. Dijo que pod¨ªa hacer una intervenci¨®n "muy agria y cr¨ªtica", pero que se la iba a ahorrar. "Lo que hace falta es organizar estrategias y sumar esfuerzos y voluntades. No quiero hacer una subasta de pactos", afirm¨®, invitando a los republicanos a esperar al resultado de las urnas. "Habr¨¢ un mandato u otro. Hay que ser prudente", dijo.

De hecho, CiU espera tener el suficiente n¨²mero de diputados como para no necesitar el apoyo de ning¨²n partido, incluido ERC. Los convergentes sienten una profunda desconfianza hacia los republicanos desde que en 2003 se sumaron al primer tripartito y, sobre todo, desde que en 2006 lo repitieron pese a que pod¨ªan haber formado un Gobierno nacionalista con CiU sumando mayor¨ªa absoluta (48 esca?os CiU y 21 ERC). Esa decisi¨®n se interpreta en la calle de C¨°rsega poco menos que como una traici¨®n.

En Matar¨®, en un mitin ante unas 800 personas, Mas pidi¨® a los electores socialistas que les den su confianza y les "presten" apoyo: "Y si no sale bien, dentro de cuatro a?os que nos lo quiten". Y lanz¨® este dardo: "Los mismos que hacen shows en la campa?a son los que luego se pelean como monos en el Gobierno". Entre sus medidas principales, Mas present¨® su plan de moderaci¨®n fiscal que prev¨¦ la supresi¨®n del impuesto de sucesiones. Las arcas p¨²blicas dejar¨ªan de recaudar 400 millones de euros que Mas compensar¨ªa desarbolando, afirm¨®, la "parafernalia" de la estructura pol¨ªtica de la Generalitat.