La OTAN se arma para el siglo XXI
La Alianza se dota de un escudo antimisiles, en el que buscar¨¢ el apoyo ruso - El nuevo concepto estrat¨¦gico confirma el principio de defensa mutua
La Alianza celebra en Lisboa su 61? cumplea?os con la adopci¨®n de un nuevo concepto estrat¨¦gico para hacer frente a desaf¨ªos de defensa y seguridad propios de un siglo XXI globalizado, con m¨²ltiples polos de influencia y con actores estatales y no estatales capaces de poner contra las cuerdas a las potencias. Desde el ciberespacio al terrorismo, pasando por los misiles de largo alcance o la seguridad energ¨¦tica, nuevos factores han restado vigencia a las fronteras geogr¨¢ficas. "El concepto reconfirma el compromiso de la defensa mutua. Eso nunca cambiar¨¢", dijo ayer Anders Fogh Rasmussen, secretario general de la Alianza. Fue una reiteraci¨®n de lo b¨¢sico que ahora se complementa con medidas para adaptar la organizaci¨®n a los nuevos peligros. En el c¨®ctel de nuevo y viejo, mientras haya armas nucleares, la OTAN seguir¨¢ siendo una alianza nuclear, que se dotar¨¢ de un escudo frente a la amenaza de misiles bal¨ªsticos. A Rusia le ofrece una relaci¨®n estrat¨¦gica, lo mismo que se buscar¨¢ con la UE.
La OTAN quiere una relaci¨®n privilegiada con la UE en ¨¢reas como la ciberdefensa
Alemania pretend¨ªa que la Alianza se comprometiera con el desarme at¨®mico
Rasmussen anunci¨® ayer satisfecho la aprobaci¨®n del nuevo concepto estrat¨¦gico, 11 p¨¢ginas en las que se confirma la vitalidad del art¨ªculo 5 del Tratado de Washington, fundamento de la Alianza, seg¨²n el cual un ataque contra un miembro es un ataque contra todos que ha de ser respondido. Esta autoafirmaci¨®n se hace necesaria para calmar la inquietud de los aliados del centro y el Este de Europa, recelosos del acercamiento de la OTAN a Rusia.
El corolario de ese art¨ªculo y su aplicaci¨®n al siglo XXI se traduce en que la Alianza puede verse obligada a realizar operaciones de defensa fuera de sus fronteras, como la desarrollada desde 2003 en Afganist¨¢n. Esa flexibilidad estrat¨¦gica queda tambi¨¦n adoptada por el nuevo concepto, a partir de la experiencia en Afganist¨¢n, seg¨²n Rasmussen. "Para adaptarse a las nuevas amenazas, la OTAN incrementar¨¢ su papel en la lucha contra la insurgencia, desarrollaremos una capacidad fija para entrenar fuerzas y crearemos una c¨¦lula para estudiar c¨®mo relacionarse con otros socios en el mundo", precis¨® el secretario general. "El concepto estrat¨¦gico crea una Alianza m¨¢s efectiva, implicada y eficiente que nunca".
La adaptaci¨®n de la OTAN al nuevo entorno obliga a sus socios a aceptar enfoques que hasta ayer mismo les costaba asumir a Alemania, Francia y Turqu¨ªa, los dos primeros por sus diferencias sobre la disuasi¨®n nuclear, y Turqu¨ªa por su oposici¨®n a que la OTAN se abra a una Uni¨®n Europea que es cicatera con Ankara. La disposici¨®n a actuar fuera del espacio euroatl¨¢ntico es consecuencia de que las amenazas pueden llegar hoy desde cualquier punto, como qued¨® demostrado con el ataque de 2001 a EE UU, y la nueva doctrina de la OTAN prev¨¦ consolidar relaciones con organizaciones y pa¨ªses con los que compartir la defensa. Entre ellas la Uni¨®n Europea, tambi¨¦n deseosa de normalizar una relaci¨®n estrat¨¦gica trabada por la presencia de Turqu¨ªa en la Alianza.
La OTAN cree que una relaci¨®n de privilegio con la UE permitir¨ªa un reparto del trabajo en ¨¢reas como ciberdefensa, ayuda humanitaria y desarrollo. Turqu¨ªa, avalada por la Alianza, manten¨ªa que favorecer esa relaci¨®n debe permitirle participar en la Agencia Europea de Defensa, compartir informaciones confidenciales o participar en operaciones de pol¨ªtica exterior y de seguridad de la Uni¨®n. Los l¨ªderes aliados confirmaron su "decisi¨®n de crear las circunstancias m¨¢s favorables (...) para reforzar la relaci¨®n estrat¨¦gica con la UE". Los detalles quedan para m¨¢s adelante.
El concepto estrat¨¦gico tambi¨¦n aborda el papel de la disuasi¨®n nuclear, de forma m¨¢s discreta que en su versi¨®n de 1999, complicada ahora por la aparici¨®n del escudo antimisiles del que se va a dotar la Alianza. Una Alemania muy sensible a la cuesti¨®n nuclear -con un ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, que ha hecho del desarme at¨®mico una cuesti¨®n de principio y que ha reclamado debatir sobre la desaparici¨®n de las armas at¨®micas (alrededor de 200 bombas) custodiadas en arsenales de cinco pa¨ªses europeos- pretend¨ªa que la Alianza se comprometiera con el desarme at¨®mico. Westerwelle mantiene que el escudo que protege contra los misiles bal¨ªsticos hace innecesaria la disuasi¨®n nuclear, tesis contra la que se alza Francia, que bajo ninguna circunstancia quiere renunciar ni a su potencial nuclear ni a su independencia at¨®mica. En todo caso, mantiene Par¨ªs, ambos dispositivos (escudo y arsenal) son complementarios, idea inaceptable para Alemania. El punto de acuerdo se alcanz¨® recurriendo a la sem¨¢ntica: Alemania renunci¨® a la menci¨®n de la complementariedad y acept¨® en su lugar la de que la defensa antimisiles es un apoyo a la disuasi¨®n nuclear, como est¨¢ previsto que quede recogido hoy en la declaraci¨®n final de la cumbre. "Mientras existan armas nucleares, la OTAN seguir¨¢ siendo una alianza nuclear", se?ala el concepto. Lo que explic¨® Rasmussen con otras palabras: "El negocio de la OTAN es la defensa y en un mundo nuclear eso requiere disuasi¨®n". A pesar de ello, el concepto subraya el prop¨®sito de los aliados de crear un mundo sin armas nucleares.
Con una treintena de pa¨ªses poseedores de tecnolog¨ªa para misiles bal¨ªsticos o en busca de ella, la Alianza ha decidido que "desarrollar la capacidad para defender a nuestra poblaci¨®n y territorios es un elemento central de nuestra defensa colectiva". Es la aprobaci¨®n de la creaci¨®n de un escudo antimisiles. Los aliados se proponen "buscar la cooperaci¨®n de Rusia en la defensa antimisiles".
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