Salvat, el t¨¢bano imprescindible

Maestro docto, pero tambi¨¦n mosca cojonera. Sabio erudito y a la vez implacable fustigador del poder. Hombre de tit¨¢nico conocimiento con un car¨¢cter de aqu¨ª te espero -a quien no le pegara alguna vez un rapapolvo que levante la mano-. Inc¨®modo e imprescindible. Ambas facetas de Ricard Salvat (Tortosa, 1934-Barcelona, 2009) fueron recordadas anoche en el Teatre Romea, uno de los escenario m¨¢s significativos de su carrera. El homenaje y "vindicaci¨®n" de Salvat, en formato de espect¨¢culo con teatro, m¨²sica, mimo, marionetas y hasta pintura, llen¨® el teatro y congreg¨® en el escenario a medio centenar de conocidos actores y actrices (Imma Colomer, Lloll Bertran, Carles Canut, Rosa Novell...), entre ellos algunos nombres hist¨®ricos de la Agrupaci¨® Dram¨¤tica de Barcelona y la escuela y la compa?¨ªa Adri¨¤ Gual. Entra?able fue la aparci¨®n de Elisenda Ribas.

Dirigido por Araceli Bruch, el montaje, titulado Insults al p¨²blic, de Peter Handke a Ricard Salvat, record¨® en su arranque la propia puesta en escena hace treinta a?os de Salvat de la obra del autor alem¨¢n que se sald¨® con enorme pol¨¦mica y el p¨²blico invadiendo el escenario. Volvieron a caer los insultos sobre la platea aunque esta vez fueron recibidos casi con ternura. La velada, con momentos muy emotivos, como cuando la viuda de Salvat, N¨²ria, subi¨® al escenario, tuvo mucho de hagiogr¨¢fica y de paneg¨ªrico -se caracteriz¨® al desaparecido como el Piscator catal¨¢n-, aunque la personalidad mordaz, orgullosa, ¨¢spera, quisquillosa y provocadora de Salvat no dej¨® de revolotear por la sala. En un momento de la representaci¨®n, Enric Maj¨® record¨® con cari?o desde el escenario lo que le dijo una vez el director: "?Hoy har¨¢s la funci¨®n bien o como siempre?". En otro, los actores fueron desgranando opiniones muy cr¨ªticas de Salvat acerca del teatro catal¨¢n, punteadas con su propia risa grabada: sobre la falta de ideolog¨ªa, la endogamia, el papanatismo, las subvenciones, "el star-system de estar por casa", el Teatre Nacional, su relevo en la direcci¨®n del festival de Sitges... Una parte especialmente acertada del espect¨¢culo fue cuando Xavier Albert¨ª y Carles Sales reprodujeron el encuentro entre Espriu y Salvat con motivo de la puesta en escena de Ronda de mort a Sinera en 1965. Otra, cuando tras escucharse molestos zumbidos apareci¨® la m¨¢scara de una gran mosca o t¨¢bano -voil¨¤ la mosca cojonera-.

La velada fue el acto central de un programa de actividades en torno a Salvat, al que anoche la canci¨®n final, con el estribillo coreado por todos, sintetiz¨® de maravilla: "Toda una vida/ dedicada al teatro".