El asilo elude responsabilidades por los 11 ancianos asesinados en Olot

"Hemos actuado bien". "No hab¨ªa nada que pudiera hacerse para evitarlo". Con estas dos frases se resume la inquietante reacci¨®n ofrecida ayer por la Generalitat de Catalu?a y la residencia La Caritat a la confesi¨®n que el martes hizo el celador de Olot, Joan Vila Dilm¨¦, ante el juez: el asesinato de 11 ancianos entre agosto de 2009 y el pasado mes de octubre.

Durante esos 15 meses, dos veces con insulina, otras seis con tranquilizantes y en los tres ¨²ltimos casos con lej¨ªa, Vila Dilm¨¦ fue quitando la vida a los 11 residentes del geri¨¢trico sin que nadie reparara en que la mayor¨ªa de las muertes registradas en el centro ocurr¨ªan en su turno de trabajo. Sin que nadie sospechara del s¨²bito empeoramiento de la salud de los ancianos. Y, seg¨²n se van conociendo m¨¢s detalles, sin que nadie investigara por qu¨¦ una de sus ¨²ltimas v¨ªctimas, Sabina Masllorens, fue enterrada con "marcas de color rojo o morado" alrededor de la boca, seg¨²n el atestado policial. Vila asesin¨® a Masllorens haci¨¦ndole ingerir una dosis letal de lej¨ªa o de un l¨ªquido muy corrosivo, pero su muerte, como las otras diez, fue certificada como "natural".

El Ejecutivo dice que "es imposible controlar a una persona de este tipo"

El Colegio de M¨¦dicos pide una reuni¨®n para ver qu¨¦ ha fallado

"Hemos cumplido adecuadamente la funci¨®n inspectora. El centro de Olot estaba en la parte media alta de la tabla en cuanto al nivel de calidad asistencial", asegur¨® ayer un portavoz del Departamento de Acci¨®n Social y Ciudadan¨ªa, con el que La Caritat manten¨ªa un concierto para cerca de la mitad de sus plazas. La Generalitat ha puesto a disposici¨®n del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 1 de Olot las actas de inspecci¨®n. Cuando se hizo la ¨²ltima revisi¨®n, en marzo, Vila hab¨ªa asesinado ya a tres personas, seg¨²n su declaraci¨®n. La Generalitat no detect¨® anomal¨ªas destacables.

"Es imposible controlar a una persona de este tipo", esgrimi¨® un portavoz del Ejecutivo catal¨¢n. El acusado aprovechaba las noches de los fines de semana y festivos, cuando ¨¦l trabajaba, para cometer sus cr¨ªmenes porque no hab¨ªa ni m¨¦dicos ni enfermeras, seg¨²n el atestado policial. El decreto que regula las residencias no obliga a tener personal cl¨ªnico de esa categor¨ªa durante las noches. La Generalitat indic¨® que "no se plantean revisar ninguno de sus procedimientos porque todo ha funcionado bien".

El director de La Caritat, Joan Sala, y su abogado, Joan Ca?ada, negaron tambi¨¦n que el centro en el que trabaj¨® Vila durante cinco a?os haya procedido de manera negligente. "La falta de medidas no puede en ning¨²n momento haber sido la causa de lo que ha pasado", insisti¨® ayer Sala.

Este a?o han muerto 15 personas en la residencia geri¨¢trica, de estas, 12 en el turno de Joan Vila (fines de semana y festivos). Incluso los internos, seg¨²n las declaraciones de trabajadores ante la polic¨ªa, se extra?aron de que tantos ancianos muriesen cuando trabajaba el celador. "Si aparte de haber un comentario, hubiese habido una sospecha, habr¨ªa sido una alarma que nos hubiese hecho reaccionar inmediatamente", justific¨® Sala. "No hay un solo indicio de que haya habido alg¨²n tipo de acci¨®n imprudente por parte de cualquier otra persona que no sea el propio imputado", remach¨® su abogado.

El juez, sin embargo, no considera "acreditado que la certificaci¨®n de las muertes se efectuara tras el examen previo de un facultativo", seg¨²n el auto de exhumaci¨®n de ocho cad¨¢veres dictado hace 13 d¨ªas. Tanto Ca?ada como Sala aseguraron que la doctora del centro, Elena Tresserras, s¨ª ve¨ªa a los ancianos antes de certificar su muerte, en los que no detect¨® signos de violencia. Pero eso no lo ¨²nico que se ha de tener en cuenta antes de decidir que una muerte es natural. Seg¨²n el experto en medicina forense legal, el doctor Josep Arimany, "en los casos en los que hay una historia cl¨ªnica y una muerte que no tiene nada que ver con esta, no se puede decir que es una muerte natural, se deber¨ªa mirar". Y se le dar¨ªa un tratamiento de muerte sospechosa de criminalidad.

Precisamente eso es lo que adujeron los forenses en el informe que hicieron llegar al juez para exhumar ocho cad¨¢veres de ancianos muertos durante este a?o bas¨¢ndose en el examen de las historias cl¨ªnicas, seg¨²n el auto del magistrado. Vila admiti¨® el martes que asesin¨® a seis de las ocho personas desenterradas. En un s¨¦ptimo caso dijo tener dudas. Sala y Ca?ada optaron ayer por no dar credibilidad al celador.

El presidente del colegio de m¨¦dicos de Girona, Benjam¨ª Pallar¨¦s, defendi¨® que no ha habido mala praxis m¨¦dica. A pesar de eso, pidi¨® que se revisen los protocolos y anunci¨®, en una entrevista en la cadena Ser, una reuni¨®n con la Audiencia Provincial, de la Fiscal¨ªa y del Instituto Medicina Legal para revisar c¨®mo han podido ocurrir los asesinatos en serie sin que nadie se diese cuenta.

"Si realmente la gente se puede morir por la noche sin personal cl¨ªnico es algo que se deber¨ªa revistar", dijo ayer el abogado de tres de las v¨ªctimas de Vila, Rafael Berga. Una de ellas, Sabina Masllorens, "ten¨ªa los labios muy inflados, la cara desencajada y p¨¢lida y la lengua en una posici¨®n no natural, en el exterior de la boca, como si le colgase", cuando muri¨®, seg¨²n su nieta. El propietario de la funeraria tambi¨¦n se extra?¨® de que tuviese "la cara muy roja y como hematomas por la zona de los labios, la nariz y la barbilla". El abogado de La Caritat asegura que esas marcas aparecieron con el paso de las horas.