El Gobierno mexicano admite que ha perdido el control de ciertas zonas

M¨¦xico necesita la ayuda de EE UU. Sus altos mandatarios, desde el propio presidente Felipe Calder¨®n hasta funcionarios de la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n o de la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica (PGR), aprovechan cualquier reuni¨®n con autoridades de EE UU para insistirles en su petici¨®n de ayuda tecnol¨®gica y de formaci¨®n. A veces, hasta de manera angustiosa. As¨ª lo hacen constar en sus informes al Departamento de Estado los diplom¨¢ticos estadounidenses que asisten a esos encuentros. Seg¨²n se recoge en el cable 228419, que detalla una reuni¨®n mantenida con altos funcionarios de la Fiscal¨ªa General de EE UU, el entonces subsecretario de Gobierno de la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n, Jer¨®nimo Guti¨¦rrez, reconoce: "Tenemos 18 meses, y si no conseguimos un ¨¦xito tangible que sea reconocible por los mexicanos, ser¨¢ dif¨ªcil aguantar la confrontaci¨®n en la pr¨®xima Administraci¨®n". Es muy importante tener en cuenta la fecha de esa reuni¨®n: 5 de octubre de 2009. Ya han pasado casi 15 meses y la situaci¨®n de violencia en M¨¦xico, lejos de mejorar, empeora.

Clinton pregunta qu¨¦ tipo de gobernante es Calder¨®n y c¨®mo le afectan las adversidades

El presidente cree que Ch¨¢vez pudo financiar la campa?a del izquierdista PRD

Es m¨¢s, seg¨²n recoge el autor del referido cable, el subsecretario Guti¨¦rrez llega a dar a entender que el Gobierno mexicano ya ha perdido el control sobre ciertas zonas del pa¨ªs, algo que en p¨²blico jam¨¢s ha reconocido ning¨²n miembro del Ejecutivo de Calder¨®n: "Guti¨¦rrez fue m¨¢s all¨¢ al decir que, sin embargo, se ha dado cuenta de que ya ni siquiera hay tiempo para afianzar la preparaci¨®n de las instituciones en los a?os que restan de la Administraci¨®n Calder¨®n [el sexenio finaliza en 2012]". Lament¨® el penetrante y debilitante miedo que tiene una gran parte de la sociedad mexicana contempor¨¢nea, donde incluso la gente en Yucat¨¢n -con "niveles europeos de seguridad"- tiene miedo a causa de la inestabilidad en unas pocas y distantes ciudades. Expres¨® su verdadera preocupaci¨®n por la p¨¦rdida de ciertas regiones. -"Est¨¢ da?ando la reputaci¨®n internacional de M¨¦xico, hiriendo las inversiones extranjeras, y llevando a una sensaci¨®n de gobierno impotente", dijo textualmente Guti¨¦rrez-. Un discurso tan descarnado, pronunciado en la intimidad de una reuni¨®n con colegas estadounidenses, jam¨¢s ha sido pronunciado en p¨²blico por ning¨²n mandatario gubernamental.

Mientras, desde EE UU, la preocupaci¨®n ante la situaci¨®n que vive el vecino del sur va en aumento. El cruce de cables entre el Departamento de Estado y su embajada en la capital es incesante. En el cable 238295, Hillary Clinton pide a sus diplom¨¢ticos en M¨¦xico que le expliquen de qu¨¦ forma le est¨¢n afectando al presidente Calder¨®n en su personalidad y en su forma de gobernar las noticias adversas: la guerra contra el narcotr¨¢fico, la ca¨ªda de la econom¨ªa y los malos resultados de su partido en las elecciones intermedias. ?Qu¨¦ tipo de gobernante es Calder¨®n?, pregunta Clinton.

Los cables que se env¨ªan desde la sede diplom¨¢tica en el DF tambi¨¦n acusan preocupaci¨®n. En el cable 231890, de fecha 28 de octubre de 2009, se refiere que el jefe del Ej¨¦rcito, el general Guillermo Galv¨¢n, plantea el establecimiento de un estado de excepci¨®n en algunas zonas del pa¨ªs, invocando el art¨ªculo 29 de la Constituci¨®n mexicana, a lo que se opone el entonces secretario de Gobernaci¨®n, Fernando G¨®mez Mont, que piensa distinto. La Embajada de EE UU estima que los beneficios son inciertos y los costes pol¨ªticos, altos, y no cree por tanto que la iniciativa del militar prospere, como as¨ª sucedi¨®.

La incesante comunicaci¨®n recoge tambi¨¦n un encuentro, cable 231175, entre el propio presidente Calder¨®n y Dennis Blair, director Nacional de Inteligencia (DNI). El mandatario mexicano traslada al funcionario estadounidense su preocupaci¨®n por la intromisi¨®n del presidente venezolano, Hugo Ch¨¢vez, tanto en M¨¦xico como por toda Latinoam¨¦rica. No descarta que fuera ¨¦l quien financi¨® la campa?a del izquierdista PRD durante las presidenciales de 2006 y se mostr¨® especialmente preocupado por las relaciones entre Venezuela e Ir¨¢n. "La creciente influencia de Ir¨¢n en Latinoam¨¦rica deber¨ªa preocupar a Estados Unidos".

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