La embajada cree que Zapatero le ayud¨® en un contrato militar

"Zapatero ha mostrado que cuando hay un asunto de particular importancia para el Gobierno de EE UU, puede ser d¨®cil para trabajar con nosotros pese a la oposici¨®n interna". La reflexi¨®n corresponde al embajador en Madrid, Eduardo Aguirre, en un repaso a las personalidades pol¨ªticas espa?olas antes de dejar el puesto. Para ilustrar esa afirmaci¨®n, Aguirre pon¨ªa como ejemplo un contrato para la venta de los motores de 45 helic¨®pteros a Defensa que la estadounidense General Electric (GE) arrebat¨® a la favorita, la brit¨¢nica Rolls Royce, tras las gestiones de la embajada ante La Moncloa. "El embajador est¨¢ convencido de que Zapatero en persona intervino en el caso a favor de GE", se se?ala en una comunicaci¨®n fechada el 21 de enero de 2009. Sin embargo, fuentes del Gobierno desmienten tajantemente la suposici¨®n del embajador de que la adjudicaci¨®n se decidi¨® desde La Moncloa. "Ni el presidente del Gobierno ni la Presidencia tuvieron intervenci¨®n alguna en este contrato", aseguran desde La Moncloa.

EE UU afirma que Rolls Royce era la favorita y que La Moncloa "revoc¨® la decisi¨®n" de Defensa

Taguas, que dirig¨ªa la oficina econ¨®mica del presidente, asegura que esa versi¨®n "no es cre¨ªble"

Aunque la embajada no lo precisa, se refiere al suministro de los motores para los helic¨®pteros NH-90. En mayo de 2005, el Gobierno hab¨ªa aprobado la compra de 45 helic¨®pteros NH-90. El contrato con Eurocopter se firm¨® en enero de 2007 por 1.260 millones, pero quedaba pendiente la elecci¨®n de los motores, que se adjudicaron en junio de 2007, siendo ministro de Defensa Jos¨¦ Antonio Alonso. Defensa eligi¨® los motores CT7-8F5 de GE frente a los de Rolls Royce, el fabricante elegido por la mayor¨ªa de los pa¨ªses que hab¨ªan comprado esos helic¨®pteros.

Es en esa decisi¨®n en la que la embajada cree que Zapatero tuvo un papel decisivo. En un documento firmado por el n¨²mero dos de la embajada, Arnold Chac¨®n, que recoge las reflexiones del embajador, se recuerda que en un momento dado Aguirre inform¨® a Zapatero de que los jefes de las compa?¨ªas estadounidenses se planteaban dejar de licitar en Espa?a ante la percepci¨®n de que sus ofertas no eran bienvenidas en los concursos p¨²blicos. "Zapatero contest¨® al embajador que le hiciera saber si hab¨ªa algo importante para el Gobierno de EE UU y que ¨¦l se har¨ªa cargo", relata Chac¨®n.

"M¨¢s adelante -cuando el Gobierno de EE UU hab¨ªa decidido abogar por GE en un concurso frente a Rolls Royce para un contrato del Ministerio de Defensa espa?ol para suministrar motores de helic¨®pteros- GE inform¨® al embajador de que el fracaso en ganar el contrato provocar¨ªa que esa rama de GE cesase sus operaciones en Espa?a, lo que el embajador inform¨® debidamente al asesor econ¨®mico de Zapatero", siempre seg¨²n el documento enviado al Departamento de Estado. Por entonces el responsable de la Oficina Econ¨®mica de Moncloa era David Taguas, hoy presidente de la patronal de las constructoras, Seopan.

"Aunque hab¨ªa abundantes pruebas de toda clase de fuentes que suger¨ªan que el Ministerio de Defensa hab¨ªa decidido adjudicar el contrato a Rolls Royce, Moncloa -la oficina del presidente- revoc¨® la decisi¨®n y se anunci¨® que GE hab¨ªa ganado el concurso", dice el documento de la embajada, que concluye: "El embajador est¨¢ convencido de que Zapatero en persona intervino en el caso a favor de GE".

Fuentes de La Moncloa desmienten rotundamente esa suposici¨®n. "El expediente fue tramitado de acuerdo con las normas que rigen este tipo de adjudicaciones. Los tr¨¢mites de adjudicaci¨®n fueron gestionados exclusivamente por los servicios t¨¦cnicos del Ministerio de Defensa, atendiendo a los requerimientos de la misi¨®n, a los aspectos t¨¦cnicos, a los planes industriales y a las condiciones econ¨®micas", explican desde Presidencia.

Por su parte, Taguas neg¨® a EL PA?S que ese tipo de contratos se decidan en La Moncloa, ni mucho menos que el presidente del Gobierno tenga ninguna intervenci¨®n. "No es nada cre¨ªble" se?ala. Taguas reconoce que la oficina econ¨®mica de La Moncloa ten¨ªa contactos frecuentes con la embajada, pero no solo con la de EE UU, sino tambi¨¦n con otras, incluida la brit¨¢nica. Seg¨²n Taguas, es normal que Aguirre se interesara por esos contratos y en la oficina se escucha a todas las partes, pero esa era una decisi¨®n compleja y t¨¦cnica que fue tomada por una comisi¨®n tomando en cuenta no solo el precio, sino tambi¨¦n todos los factores relevantes.

Fuentes cercanas a La Moncloa se?alan que Aguirre tal vez quisiera "colgarse una medalla" dando a entender al Departamento de Estado que sus gestiones hab¨ªan sido decisivas y que hab¨ªa logrado que el propio Zapatero interviniese.

General Electric es el mayor conglomerado industrial de EE UU, con un valor en Bolsa de 178.000 millones de d¨®lares (unos 236.000 millones de euros). En el momento de adjudicarse aquel contrato, su presidente en Espa?a era Mario Armero, que destac¨® entre las bazas ganadoras de su oferta las condiciones econ¨®micas e industriales. En particular, sus planes pasaban porque un alto porcentaje de los motores se fabricase en Espa?a y por contratar componentes a la industria nacional. Taguas admite que tanto ¨¦l como Zapatero han tenido alguna reuni¨®n con Mario Armero, pero que en ellas se trat¨® de la inversi¨®n de General Electric en Espa?a y que no recuerda que nunca fuera a pedir ning¨²n contrato.

La cuant¨ªa del contrato no ha sido desvelada. Fuentes de la industria de defensa calculan que puede rondar entre dos y cuatro millones de euros por helic¨®ptero, aunque precisan que es muy dif¨ªcil la cuantificaci¨®n, en especial dependiendo de si en los contratos se incluye el mantenimiento y en qu¨¦ condiciones.

Tras ganar el contrato, GE subcontrat¨® con Industria de Turbo Propulsores (ITP) el montaje de los motores de los NH-90, as¨ª como el mantenimiento y otros servicios para todo el ciclo de vida del motor. El acuerdo permiti¨® a ITP anunciar el establecimiento de un centro industrial de helic¨®pteros en Albacete. ITP est¨¢ participada por Sener Aeron¨¢utica (con un 53,125%) y su otro accionista, con un 46,875% es, curiosamente, Rolls Royce, la empresa que result¨® perdedora en el concurso.

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